Her safety ✦| Omelia

6| "Paseo a la biblioteca"

Tres días después...

Narra Owen

Entro a la casa de los Shepherd, dispuesto para otro día nuevo de trabajo y llevo mis manos a los bolsillos de mi traje.
Veo a Amelia en el sofá, sentada de espaldas a mí. Me detengo unos pasos detrás de ella y aclaro mi garganta para indicarle que he llegado, como ella me pidió minutos antes.
Pero me sorprendo al ver que al voltear para verme, la mujer deja de parecerse a Amelia y es totalmente desconocida.
-Oh, disculpe, pensé que era la señorita Amelia -digo al instante.
La mujer sonríe y se levanta del sillón.
-Es un placer conocer finalmente al guardaespaldas de mi hermana -dice y se acerca a mí.
Sonríe y me sorprendo, es la primera vez que alguien en esta familia me sonríe segundos después de conocerme. Me extiende su mano para estrecharla y me sorprendo aún más.
-Soy Kathleen Shepherd, mi hermana nunca tuvo el gesto de presentarnos -dijo con humor.
Sonreí con timidez y estreché su mano.
-Owen Hunt -respondí- es un placer conocerla, señorita Kathleen.
-¿Mi hermana me ha mencionado? -pregunta mordiendo su labio, intrigada.
Sonrío y sacudo mi cabeza.
-Lucas me ha hablado de todos el primer día -respondo, evadiendo la pregunta de la señorita Kathleen que intenta hacerme confesar el hecho de que Amelia apenas habla de ella.
-Debo admitir que es más imponente de lo que parece. He visto varios guardaespaldas pasar por esta casa pero usted... -hace una pausa y mantiene su mano estrechando la mía- parece que realmente sabe lo que hace.
Su mirada me quema un poco, de repente noto que Kathleen Shepherd no es solo simpática, sino que también intenta saber mucho más de mí mientras me intimida con sus ojos y su sonrisa seductora.
Suelto nuestras manos y sonrío con poca entonación. La conversación ha terminado, no deseo que siga.
-¿Ha visto a la señorita Amelia? -pregunto intentando cambiar la conversación, intentándole demostrar que solo estoy aquí por su hermana.
-En su cuarto, posiblemente todavía no esté lista. No se le da muy bien la puntualidad -ríe.
-Okay -respondo, no puedo hacer nada, menos exigir puntualidad- la esperaré afuera.
-O podemos seguir conversando -insiste Kathleen y sonríe.
La observo y vacilo mi respuesta, no quiero conversar con ella, pero tampoco quiero ser descortés con nadie en esta familia.
-En realidad, ya estoy lista -la voz de Amelia nos sorprende y ambos miramos hacia las escaleras.
Una parte de mí siente alivio por no tener que haber emitido una respuesta para Kathleen.
Observo cómo Amelia baja las escaleras.
Está usando un vestido bordó, un poco veraniego, corto y suelto, completamente natural. Su cabello está recogido y veo cómo algunos mechones se escapan delante de su rostro. Lleva zapatillas y me sorprende ver semejante informalidad de su parte, aunque me gusta. Me gusta apreciar que Amelia Shepherd está constantemente sorprendiendo, que nunca parece demasiado descifrable.
Lleva un bolso colgado de su brazo y camina hacia nosotros, levanta su mirada y le sonríe a su hermana.
-Gracias por entretener a Owen -bromea.
Kathleen sonríe con timidez, de repente la presencia de Amelia la incomoda, puedo notarlo.
Pero Amelia deja de enfocarse en ella y me observa.
-Buenos días Owen ¿vamos? -pregunta y me sonríe con amabilidad.
-Buenos días, señorita Amelia -respondo con seriedad- cuando usted diga.
-¿Adónde lo vas a llevar? -pregunta Kathleen.
Amelia y yo la observamos, sorprendidos por su curiosidad.
-A la biblioteca pública -responde Amelia.
Me sorprendo al escucharla y por un segundo quiero reírme. La observo y realmente sé que Amelia no está bromeando, realmente vamos a la biblioteca. Es el paseo más insólito e indefenso que me han pedido jamás.
-¿A la biblioteca? -ríe Kathleen- ¿desde cuándo tan aburrida? ¿quieres enseñarle a Owen a recitar tus poesías favoritas? -bromea.
Amelia no responde y solo me observa.
-¿Vamos? -insiste, y sé que ahora es ella quién se siente incómoda.
Su mirada me suplica que comencemos nuestro paseo, lo noto.
Asiento y le indico que camine por delante de mí.
-Adiós Kathleen -dice Amelia y comienza a caminar.
-Qué se diviertan -dice Kathleen con sarcasmo y sonríe con el gozo de molestar a Amelia.
La observo y sonrío.
-Un placer conocerla señorita Kathleen -digo.
-El placer es mío, Owen -responde con una sonrisa amplia y antes de que pueda decir algo más camino detrás de Amelia.
Al salir de la casa, el aire fresco de la mañana se siente en mi rostro. El verano comenienza a esfumarse y el otoño se aproxima.
Y al parecer, Amelia también lo sabe. Noto cómo se abraza a sí misma al sentir el frío traspasar su vestido y hacer contacto con su piel.
-¿Conducirás tú otra vez? -pregunta Amelia y voltea a verme al llegar junto al auto.
Niego con mi cabeza y sonrío con timidez.
-No voy a quitarle el trabajo a Lucas -digo.
-Está bien -Amelia sonríe y observo la sensación de frío en su piel erizada.
-Señorita Amelia ¿no cree que necesitará un abrigo? -pregunto señalando sus brazos al descubierto por el vestido veraniego.
-¿Señorita Amelia? creí que teníamos una regla -sonríe.
-A veces la olvido -confieso avergonzado y emitiendo una sonrisa pequeña.
-Tampoco es necesario que me digas señorita frente a mi familia, mucho menos frente a Kathleen -añadió.
-Creo que es necesario que vuelvas a buscar un abrigo -digo ignorándola y dejando de lado la formalidad.
Ella niega con su cabeza y sonríe.
-Quiero disfrutar los últimos días de verano, ya habrá tiempo para abrigos -responde- creo que deberías hacer lo mismo, ya tendrás tiempo para usar traje durante todo el invierno.
-¿Existen los trajes de verano? -pregunto riendo.
Amelia me observa fijamente y sonríe. Creo que apreció mi risa por algunos segundos y me siento avergonzado, decido volver a mi semblante serio y le abro la puerta del asiento de atrás del coche.
-Me refería a que al menos podría quitarse esa chaqueta pesada -responde con voz suave y sonríe antes de adentrarse al auto.
-¿Estamos listos? -la voz de Lucas me evita responderle algo a Amelia y lo observo.
-Listos -sonrío y cierro la puerta de atrás para adentrarme en el asiento del copiloto.