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Mi abuela parecía a Edward Scissorhands.

No sabía que le gustaba hacer su trabajo con las tijeras, creí que se había vuelto loca. Al darme cuenta de que había mucho cabello mío en el suelo, supuse que estaba yo, totalmente calvo. Sentí que cualquier pájaro podría atreverse a construir su nido sobre mí.

Sin embargo al verme al espejo me sorprendí con él resultado. De verdad no me lo esperaba.

-Le he cortado el cabello al hijo de la vecina de abajo. Así que tengo práctica en hacer los nuevos cortes que hoy en día están de moda.

-¿De verdad ese soy yo?. No lo creo.-Como todo un idiota que soy, me atreví a darme una bofetada a mí mismo en la mejilla mientras me miraba al espejo.

Al sentir dolor y ver que de verdad soy yo. Me sorprendí, que de nuevo me dirigí a abrazar a mi abuela besando su rostro.

-Compré algunos productos para mi piel y estar completamente como un actor de cine.

-Ya dejate de fantasías y ve a tu casa por tus cosas. Recuerda que te quedaras conmigo una semana. No quiero que te desanimes.

-Por supuesto que no abuela. Iré y volveré rápido. Lo prometo.

Dije decidido, para tomar mis llaves de la casa y dirigirme rápidamente a mi hogar.

Pará mí suerte estaba sola. Así que comencé a empacar mis cosas, había recibido una llamada de KiBum, por lo que puse el altavoz mientras empaquetaba.

-¿y... Ya te aplicaste tu mascarilla?.

-Aún no.

-Ya es de noche ¡es el tiempo exacto para hacerlo!.

-Lo haré, lo haré.-Ki me había interrumpido para volverme a decir las instrucciones de como aplicarlo, cuanto tiempo y lo demás que ya venía en la caja. De seguro él solo quería hablar con alguien y por eso llamaba.

-Por cierto, ¿Estás aburrido o porque me llamas?, ¿JongHyun no te causó satisfacción hoy?.

-¡Ahhh! ¡Calla TaeMin!.-Gritó. Daba gracias que no tenía el teléfono a mi oreja, sino me hubiera quedado totalmente sordo.-Él estará fuera de la ciudad por tres día, su tía se va a casar, así que irán a la ciudad donde su tía vive para la ceremonia.

-Entonces, ¿ese fue el motivo por el cual ustedes dos querían estar solos en el aula de clase?.-Sonreí con malicia, intentando que colocará sus mejillas rojas.

-¡Lo extraño mucho!. Le dije que me llevara, pero dijo que no porque tenía que ensayar para la estúpida obra.

-¡Hey!, cuidado con tus palabras, esa estúpida obra como tu le llamas la dirige mi MinHo.

Al decir aquello recordé lo que había ocurrido, así que hice un puchero (que obviamente KiBum no sabría que lo hice), sin embargo no duró mucho, ya que él había soltado un chillido expresando emoción.

-Por cierto, ¿tu familia ya lo sabe?.

-Hoy... Se lo confesé a mi abuela.-Dije nervioso, recordando aquel momento. Así que comencé a morder de mi propio labios.

-¿Cómo lo tomó?.

-Creí que me sacaría a patadas de su casa, pero no lo hizo. Ella aceptó mi homosexualidad.

En el momento que mencioné aquello, escuché como la puerta de mi habitación era abierta de golpe. Debido a una patada que le había dado mi hermano mayor.

Me asusté al verlo, y sobretodo, mi temor aumentó cuando me percaté de la manera en la que hablaba. Estaba totalmente ebrio.

-¿Eres gay?. ¡Pero que asco de hermano tengo!

-Lo siento, Ki. Colgaré la llamada.

KiBum logró entenderlo completamente así que guardé mi celular dentro de mi equipaje y me aseguré de guardar todo, tratando de ignorar a mi hermano que no estaba estable.

Sin embargo él solo le acercó a mí. Apestado a alcohol y golpearme de un golpe a mi rostro.

-Eso y más te mereces por ser marica.

-¡Hyung!.-Grité asombrado, ya que él y yo nunca nos habíamos golpeados, y cuando lo hacíamos era simplemente de broma.

-Deberás tener novia, para que dejes de ser así.-Él mismo sin darse cuenta tropezó tirando uno de mis muebles que sostenía una lámpara de mesa. De la cual usaba para leer mis comics en la noche.

-¿Podrías hablarme de esto cuando stes sobrios?, te lo agradecería mucho. Ahora no sabes lo que estás diciendo.
¡Actúas son consciencia!.

-¿A ti qué?, anda toma tus cosas y vete. No quiero que te enamores de mí.-Tomó mi equipaje y con furia caminó a la puerta para soltar mi maleta.-No quiero verte. Le diré a nuestros padres. Y estarán de acuerdo con lo que hice.

-¿Qué?, hyung, ¡no!.-Grité corriendo tras mis cosas y comenzar a recoger lo que se había regado.

-¡Tsk! Tenía una novia, era hermosa y hoy me cita en un lugar para decirme que es lesbiana. ¡ODIO a ese tipo de personas! ¡Las odio! ¡Las odio!. ¡ELLA ME DEJÓ POR SU ROOMIE!.

Al escuchar el motivo por el cual estaba ebrio, pude entender con mejor claridad.
Sin embargo el daño ya estaba hecho. No había vuelta atrás.

-Así que te odio. ¡Vete y no vuelvas hasta que traigas contigo a una sexy mujer!.

De esa manera gritó cerrando la puerta, dejándome afuera.
Mis llaves se habían quedado adentro. Si no hubiera guardado mi celular dentro de mi equipaje, lo hubiera olvidado. E incluso mi mochila escolar ya estaba en el suelo.

Solté un suspiro y comencé a cargar todo para dirigirme a casa de mi abuela.

Cómo todo buen hermano menor. Iría a acusarlo con mi abuela.

Creía que ella le llamaría a mis padres y les reclamará su actitud, sin embargo cuando llegué a su casa, resultó que ella ya estaba a punto de dormirse.
Y era de suponerse, ella se dormía demasiado temprano para madrugar.

No tuve tiempo de contarle nada, pero sí de llorar en silencio estando en el sofá de la sala de estar.

-Primero, descubro que MinHo es padre, después, mi hermano me hiere y me echa de la casa. ¿Qué sigue?.

Mis ánimos estaban fatales. Hoy había sido el peor día de mi vida. En definitiva.

No supe en qué momento había caído rendido, pero sí había logrado dormir. Después de cansarme de llorar como magdalena.

Mirándote Desde Lejos (2MIN)Where stories live. Discover now