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Tenía un fuerte dolor de cabeza. No sabía lo que había ocurrido.

Desperté observando que no me encontraba en la habitación que mi abuela me había dado y a pesar de que esta se pareciera. Estaba totalmente seguro de que no era su casa. El decorado era diferente.

Giré mi cuerpo sintiendo el de alguien más. Por lo que me acerque a ver de quien se trataba.

Abrí mis ojos grandemente en cuanto note que era MinHo y no llevaba camisa, estaba con su torso desnudo. Me miré a mi mismo y estaba igual, por lo cual me había asustado. No recordaba nada.
Lo único que sabía es que habíamos ido a comer al restaurante, después fui al baño donde MinHo entró seguido de mí. Pero ningún otro recuerdo tenía.

Estaba asustado, pero a la vez tenía un dolor fuerte de cabeza. Así que acerqué mi mano frente a mi boca para poder olerme, notando que aprestaba a alcohol.

¡De seguro me embriagó en el baño y quiso que tuviéramos relaciones y terminamos en su casa!.

Fue lo primero que pensé. Así que bajé mi mano, debajo de las cobijas y poder intentar revisar si MinHo tenía algo que protegiera su cuerpo de la cintura para abajo.
Mi sonrisa se borró al sentir una tela.

Así mismo yo también me revisé y traía unos shorts que no eran míos. Supuse que era ropa de MinHo.
Sentí un movimiento en la cama y miré aterrorizado.

Era MinHo abriendo sus ojos. La escena que jamás borraré de mi mente, por ser tan perfecta y hermosa. Quería acercarme y besarlo.

-¿Soñaste conmigo?.-Mencionó sonriendo mientras me miraba.

-No recuerdo.-Dije nervioso debido a que él parecía de lo más normal.

Sin embargo él sonriente pasó mi mano sobre mí cuerpo abrazándome mientras ambos permaneciamos acostados.
Estaba feliz, pero había aprendido a no confiar en aquellas cosas.

-¿No recuerdas nada?.-Negué con un movimiento de cabeza de lado a lado. Pero él solo soltó una pequeña risita.-Jamás olvidaré como te pusiste anoche.

-¿A qué te refieres?.-Realmente estaba muy asustado. No sabía que había hecho el día anterior. Y menos con esa resaca tan grande.

MinHo no contestó y con su misma sonrisa volvió a cerrar los ojos.

No podía creerlo. Lo que uno más desea con aquella persona con la cual está uno enamorada. Se encuentre en tu cama abrazándote mientras duerme. Sentía que estaba en un sueño de hadas así que no quería escapar de ahí. Por lo que de la misma manera cerré mis ojos y quedé dormido totalmente, igual que él.

En mis sueños la imagen de él se veía tan real. Al igual que aquel gesto en abrazarme dormido. De verdad lo sentía tan bien.

-MinHo, ya me iré a casa, gracias por...-Una mujer muy contenta había entrado sin avisar que entraría. Ella se percató de la manera en la que nuestros torsos estaban desnudos y de como me abrazaba paea dormir.

En realidad sí había escuchado su voz. Pero prefería ignorar y continuar relajado dormido.

Se sentía que la mujer estaba triste, así que dio vuelta intentando alejarse. Tal vez esperaba a que MinHo despertará o algo, sin embargo no ocurrió nada.

Cuando ella se retiró. Comencé a preocuparme, había logrado que MinHo estuviera conmigo, sin embargo aquella persona que también lo amaba igual que yo e incluso era más suertuda ya que su amor si era respondido.

Sentí que hacía mal. No debía ser egoísta. Por lo que me dejé llevar por los impulsos y me puse de pie para correr a la salida. Logrando ver a la mujer llorar en el pasillo, fuera del departamento de los Choi.

Debido a las prisas había olvidado colocarme ropa para cubrir mi torso desnudos. Y me senté a su lado.

-No debes de llorar. No ocurrió nada.

A decir verdad aunque yo no estaba seguro debido a la resaca que tenía, debía de informarle a aquella chica para que no se hiciera ideas erróneas. Ella solo se limpió las lágrimas y me miró.

-¿Lo dice en serio?.

-Creo que si hubiera pasado algo, tendría en mi cuerpo alguna marca ¿no?.

Ella miró mi torso y cuello percatandose de que tenía razón. Mi piel estaba limpia, no había ninguna marca rojiza o alguna mordedura. Todo estaba con naturalidad.

-Entonces ¿por qué no llevan ropa?.

A decir verdad no lo recuerdaba. Así que debía de inventarme alguna excusa tonta para poder salir de esa.

La puerta se abrió y MinHo igual que yo en la parte superior había salido. Rápidamente se agachó al tamaño de la mujer y levantó su rostro.

-YooBi, ¿qué ocurrió? ¿Qué hacen aquí afuera? ¿Por qué lloras?.

-¿Lo ves?, se preocupa por ti. No ocurrió nada grave.-Queria afirmar aunque en realidad no tenía una respuesta precisa.

Me puse de pie y caminé a mi departamento.

-Buen día.-Dije para adentrarme y cerrar la puerta tras de mí. Dejándome caer en el sofá de la casa de mi abuela, con el fin de poder escuchar la conversación de esa chica con MinHo.

Al parecer aquella dupla de verdad se amaba. No debía de interferir.

-Hasta que te apareces, ¿ya viste la hora? Ya son las doce, anda y ve a desayunar algo.-Habló mi abuela al verme en mi sitio.

Yo solo asentí y caminé a la cocina, sacando aquella caja de cartón con cereales azucarados en su contenido, leche y un tazón para colocar todo ahí mismo.
Al tener mi mezcla hecha. Comenzaba a comerla.

-y bien... ¿Ocurrió algo interesante mientras estabas con él?.

-¿Qué va a ocurrir?, él ama a esa tal YooBi yo no tengo oportunidades con él. Lo bueno de eso, es que ya lo sé y no podré hacerme falsas ideas.

Tal vez sonaba un poco deprimido y es que en realidad si lo estaba un poco. Por lo que debía de relajarme para no sentirme peor, si tenía aquel pensamiento en mi mente.

-Solo te diré que lucha por lo que verdaderamente amas. Aferrate y no sueltes hasta que sea tuyo.

Sentí que no podría funcionar.
Creo que deberé hacer todo lo contrario de lo que la abuela dijo. De verdad me sentía mal con ello.

Él no me ama.
Y yo, solo lo miró desde lejos.
Lo veo sonreír. Y estar feliz.
Y no es conmigo.

Mirándote Desde Lejos (2MIN)Where stories live. Discover now