En el año 2017 un virus se propagó por todo el continente latinoamericano, dejando así a la humanidad casi extinta, sólo unos pocos sobrevivientes se verán forzados a luchar con estas criaturas.
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Tomás evaluaba estrategias aquel día en particular, habían rastreado de alguna manera lo que Monarca quería con ellos, así que junto a José había descubierto que los tenían fichados y sabían su localización. Esto le hacía mantener la mente un poco ocupada debido a que en cualquier momento habría un ataque hacia la base y no le hacía pensar respecto hacia María, aunque por dentro le gustaba sabía que algo había cambiado en ella y no sabía qué.
Aidan se encontraba con ella en ese momento, la chica saldría de alta y ya no corría riesgo de convertirse en un infectado, observaba a su primo cómo le ayudaba y pudo notar que estaba un poco distraído. No tenía que hacer tantas preguntas sabiendo que se trataba de Aarón, que por otro lado comenzaban a hacerles las pruebas físicas, demostrando que tenía una resistencia cardíaca superior a la de cualquier humano normal, ya no sentía cansancio o fatiga si no comía al momento. En pocas palabras estaba reaccionando bien ante el virus. Esto preocupaba a Aidan tanto cómo a algunos de sus otros amigos, Aarón no había cambiado su forma de ser, solo que esta vez sentía la necesidad de vengarse por haberle quitado su vida normal.
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Monarca Caracas:
Los pasos se escuchaban rápidamente en aquel pasillo blanco, la joven chica entraba en la oficina de Verónica que se encontraba en su silla observando la computadora.
— Si no me traes algo que anime mi día no me digas nada mejor — Advierte la mujer sin desviar la mirada de la computadora.
— Creo que esto si es importante... Ya está listo — Responde la chica con voz tímida, Verónica levantó la mirada con un pequeño brillos en sus ojos.
Se levantó de su escritorio y comenzó a caminar con pasos apresurados.
— ¿Hubo alguna prueba exitosa? — Pregunta con intriga.
— Si, y control total con el infectado — responde la chica, bajaron hacia el sótano dónde tenían las pruebas lista, Verónica tenía una vista de satisfacción en su cara, habían logrado obtener el control de un infectado y verlo sin atacar al científico que se encargaba del proyecto le alegró más.
— ¡Es fascinante! — comenta entrando a la habitación — ¿Cómo activaron la cepa latente?.
— Con el suero y nanotecnología — responde el hombre — agregamos los nano al suero generando una señal que hace controlar al virus. ¿Era lo que quería no?.
