Capítulo XXX

589 63 0
                                    

Una semana pasó muy rápido y a pesar de tener la ayuda del clan la manada no había logrado encontrar a Stiles. Su rastro se había perdido a unos kilómetros de la salida de Beacon Hills y Derek estaba empeorando cada vez más. La noticia del bebé, de su cachorro lo había afectado aún más. Necesitaba tener a Stiles entre sus brazos, asegurarse de que estaba a salvo al igual que su hijo.

Todos los esfuerzos resultaban en callejones sin salida y ni siquiera Hannah lograba sentir la esencia de Stiles. Era como si él se hubiera esfumado de la faz de la tierra.

- ¿Derek?

- Déjame solo Laura. - le respondió. Su hermana entró en la habitación y abrió las persianas para que la luz entrara.

- Basta Derek, entiendo que te sientas débil, pero si tú haces nada por mantenerte sano será muy difícil que vuelvas a ver a Stiles.

- Esto es mi culpa Laura. - dijo muy triste. - Si yo no hubiera sido tan idiota y tan orgulloso quizás tendría a Stiles y a mi hijo aquí conmigo.

- No Derk, esto no es tu culpa. - se acercó a su hermano para consolarlo. - Quizás cometiste el error de dejarte llevar por tu orgullo, pero no dudo de tu amor hacia Stiles. Jennifer supo cómo manipularnos a todos y la única culpable de todo es Deucalion y ella.

- Mi lobo sabe que algo anda mal y no puedo hacer nada para poder salvar a Stiles.

- Todos nos sentimos así. Deaton y Hannah intentan encontrar la esencia del poder de Stiles, pero creen que él puede estar débil al igual que tú.

- Siempre juré cuidarlo y mírame... No pude hacer nada para evitar que se lo llevaran.

- Fueron más astutos esa vez Derek, pero nosotros lo seremos aún más cuando logremos encontrarlo. Si me lo preguntas esto se parece mucho a cuando Stiles se escondía en el bosque. Nadie podía encontrarlo, pero tú siempre lograbas dar con él.

- Sí, lo curioso es que jamás me esforzaba en buscarlo. Era como si mi lobo supiera en donde estaba y él me guiaba. Como si algo me llevará halando en dirección de Stiles. - Laura se quedó pensando en lo que su hermano dijo.

- ¿Alguna vez escuchaste de la imprimación?

- Claro, pero es muy raro que eso suceda ¿no creerás qué...?

- Creo que tu lobo se imprimió de Stiles. Desde que eras niño fuiste muy posesivo con él y esa sensación de tu lobo guiandote a él puede deberse a la imprimación. Stiles es tu alma gemela después de todo y eso significa que...

- Puedo encontrar a Stiles en donde sea.

- Exacto. - ambos hermanos bajaron corriendo para contarles a todos lo que había sucedido.

- Siempre supe que tu lobo había escogido a Stiles como su pareja. - dijo Talia. - Aunque nos equivocamos está es una oportunidad para que puedas encontrarlo.

- Me temo que con el lobo de Derek debilitado eso será imposible. No tiene las fuerzas necesarias para hacerlo. - dijo Deaton.

- Pero hay otra solución. - dijo Hannah.

- ¿La hay? - preguntó Alan.

- Si Alan, la hay. Para que Derek pueda localizar a Stiles puede usar la energía del nemeton porque al final Stiles y el árbol siguen siendo lo mismo. - el plan de la druida no sonaba tan mal. - Además necesitara de la ayuda de ella. - señaló a Lydia.

-¿Mi ayuda?

-Si niña, eres una banshee no.

- Claro que lo soy.

- Pues ese grito tuyo hace algo más que lastimar el oído de un hombre lobo.

- Lo sé y creo que ya sé lo que quieres que haga. - dijo Lydia.

- ¿Y eso es...? - preguntó Malia.

- Bueno aprendí a dominar el choque de proyección de ondas como ya todos saben, pero hay una habilidad más que aún estoy aprendiendo. Mi grito también puede ser utilizado para poder encontrar a otros, pero no tiene demasiado alcance.

- Tienes razón niña, pero si tú utilizas al nemeton y a Derek podrás encontrar a Stiles en cualquier lugar. La red con la que tú tienes conexión está por todas partes así que no habrá problema si lo intentas.

- De acuerdo, lo haré. - dijo decidida la banshee. La manda se dirigió al nemeton y al llegar Lydia y Derek se sentaron sobre el tronco del árbol.

- Necesito que ambos se tomen de las manos y se concentren únicamente en Stiles. Sientan su energía a través del árbol, él necesita de su ayuda. - les decía Hannah mientras ellos mantenían cerrados sus ojos. Derek se imaginaba a Stiles entre sus brazos, escuchaba su voz y comenzó a sentir esa extraña conexión que lo llevaba hacia él. El tronco del árbol comenzó a sacudirse y a sacar un brillo similar al de los ojos de Stiles. De pronto Lydia abrió los ojos y emitió un grito demasiado fuerte mucho más fuerte de lo normal. Derek empezó a viajar a través del grito de la banshee y pudo ver una vieja cabaña en las montañas que se encontraban cerca de Beacon Hills. Habían varios betas custodiando la casa y al entrar vio al Darach hablando con Deucalion,  pero no le presto atención. Siguió viajando a través de las ondas hasta que llegó a una habitación en la que Stiles estaba acostado llorando. Se veía cansado y débil y su pequeño vientre podía verse más hinchado. El lobo se acercó y entonces Stiles volteó a verlo.

- Derek. - susurró y entonces volvió a su cuerpo en Beacon Hills.

- ¿Lo viste? - preguntó Laura.

- Vamos por Stiles ahora. - dijo Derek decidido. Recuperar al castaño no sería fácil, pero harían hasta lo imposible que estuviera a salvo. Esta vez Deucalion sería derrotado de una vez por todas.

Un príncipe peligrosoWhere stories live. Discover now