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Estaba bien cuando me acostumbré a mis actos. Aunque mi cuerpo todavía se sentía pesado cuando me ataba las bellezas alrededor de las piernas, pero ¿tengo alguna opción?

Honestamente, quería vivir aquí para siempre, como en el Palacio Rubí. Este reino, sin embargo, tenía una bomba de tiempo llamada Claude...

Aunque quiero que esta vida siga como hasta ahora, no puedo arriesgar mi vida por esto. No, no vale la pena. Es por eso que estas bellezas... Más específicamente, son mi seguro para el futuro. Sí, para poder dejar este Palacio cuando quiera, es el seguro para el día de cuando sea hora de irse.

He caminado por el jardín familiar que he atravesado cinco veces. Y poco después de eso, pude entrar en el palacio sin ruido como siempre.

Pero no fui directamente al jardín donde está el arbusto, y seguí el camino que tenía en mente desde la última vez que lo visité.

¡Jadeos! ¡Todavía está ahí!

La última vez que lo visité, estaba lejos así que no estaba seguro, pero en el bien organizado primer piso del palacio estaba lo que vi la última vez, las estatuas de cupido.

El tamaño dependía, así que había unas más grandes que las otras, y eran del tamaño de mi brazo. Para añadir, ¡eran todas de oro! ¡Dios mío!

Si puedo encontrar algo más valioso en mi palacio, son sólo algunas gemas y piedras preciosas, ¡pero de oro!

Estaba empapada de emoción. Había demasiadas estatuas de cupido, así que parecería imperceptible si yo... me llenaba la mano con una de ellas. Es demasiado por ahora, pero si crezco, podría tomar una. Esto es oro, ¿verdad?

Me acerqué a la estatua más cercana a mí y le mordí el trasero que estaba a mi altura. Mis dientes son bastante fuertes ahora, así que... Muerde.

Pasos.

En ese momento, sentí un aura peligrosa detrás de mí junto con una gran sombra lo suficientemente grande como para cubrirme. Me congelé en el lugar, todavía en la posición de morder el trasero del cupido.

"¿Desde cuándo esta clase de escoria comenzó a vivir en mi castillo?"

Lo que pasó y nunca salió de mis oídos fue la fría frase con la voz y el tono más frío. Cuando escuché esa voz, mi cuerpo se estremeció de miedo.

Cuando me di la vuelta, y retrocedía mientras la gran sombra me corrompía y sin saber me golpeé la espalda con la estatua de oro duro.

Cuando estaba tan cerca de ese tipo. El que se acercó a mí eran dos personas. Una de ellas estaba lejos de mí, así que no pude ver la cara, pero a juzgar por su atuendo creo que era un caballero. Y el dueño de la sombra, esta persona que estaba justo delante de mí era...

Tick tick. ¡Clang!

En el momento en que vi su cara, toda la fuerza salió de mi cuerpo.

La bolsa de bolsillo llena de mis bellezas se estrelló contra el suelo y expuso mis bellezas fuera de la bolsa de bolsillo. Las gemas que he ido recogiendo poco a poco brillaban en el suelo blanco.

El hombre que estaba lejos lo vio e hizo una... cara extraña. A diferencia de ese tipo, el que estaba delante de mí no movió un músculo y se quedó mirándome sin emoción.

"Esa cara...".

La voz que era tan fría como lo que expresaban sus ojos parecía estar mirándome directamente. Esos ojos fascinantes...

Él y yo nos parecíamos mucho, pero sus ojos parecían una verdadera joya que no tiene emociones ni nada.

"...Es familiar".

P. E. Where stories live. Discover now