P. E.

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Dijeron que Bluie podría ser usado como pájaro mensajero si se le entrenaba, ¿pero cómo iba a entrenarlo? Hm. Necesito llamar a alguien que sepa bien de aves al Palacio pronto.

Miré aburrida a Bluie comiendo y abrí un libro.

Tampoco podía ir a mi biblioteca, porque tenía que quedarme dentro del Palacio Esmeralda. Así que en estos días, les pedía a las sirvientas que me trajeran libros.

Recostada en el sofá, volteé las páginas. Estaba leyendo un libro sobre cultura mundial, pero quería leer una novela de ficción más interesante. Pero no quería pedirle a las sirvientas que me trajeran los libros que tenía escondidos en la biblioteca.

Keuk. La vergüenza con Lucas y los guardias de la última vez fue suficiente. Ah, ¿cómo estará Lucas en estos días? El Árbol del Mundo estaba bastante lejos por lo que me dijo. Se reiría de mi apariencia ahora, ¿no?

Abrí otro libro y pensé en un montón de otras cosas y extendí una mano.

"Dinero".

Pero no pasó nada.

Entrecerré los ojos. No pude usar magia de nuevo después de esa vez que hice todas esas monedas.

¿Por qué no funcionaba? A veces funcionaba cuando yo quería, y a veces no. 

"¡Monedas de oro!"

Silencio.

"¡Sal oro!"

Más silencio.

Suspiro. Definitivamente no era fácil usar la magia... Lo siento, Lucas. Miraba con desprecio está situación desde que pude usar la magia.

Volví a bajar el brazo y me desplomé en el sofá.

"Princesa, ¿puedo entrar?"

Si fuera Lilly, me habría sentado bien otra vez, pero al escuchar la voz, probablemente era Hannah.

"Entra".

Así que la saludé tumbada en el sofá. Abrió la puerta, y se detuvo un poco al verme.

"¿E-Está cansada?"

Me hablaba con un tono cuidadoso, como si estuviera tratando con su sobrina adolescente.

"Hice unas magdalenas".

"Ooh, parecen deliciosas."

Viendo los postres que Hannah me hizo, me sentí mejor otra vez.

Como era de esperar de Hannah, que estaba a cargo de mis postres desde que era más joven.

"¿Soy sólo yo? ¿O el palacio está más tranquilo que de costumbre hoy?"

"Oh, dijeron que necesitaban ayuda para el baile, así que algunas personas de nuestro palacio fueron a ayudar."

Ah, así que eso es. Se vieron obligados a hacerlo porque pensaron que sólo estaban jugando en mi palacio.

"Así que Seth probablemente estará en el Palacio Gannet todo el día."

"Así que debes estar aburrida, ¿eh?"

"Ahh, no, ¿usted también, no? No soy tan cercana a Seth."

Hannah negó lo que todos en el Palacio Esmeralda sabían y se excusó de nuevo.

Seth y Hannah eran como una aguja y una cuerda, como dos trozos de un par de palillos. Todos en el Palacio Esmeralda lo sabían, incluso los pequeños insectos, pero ella fingía que no lo sabía.

"De todas formas, princesa, le dije al chef que tuviera especial atención en nuestra comida de hoy, así que pasemos un buen rato nosotras esta noche, ¿le parece?"

Me sentí un poco deprimida por lo que dijo.

Ah, ella está tratando de animarme ya que hoy es el cumpleaños de Claude. Especialmente porque era un cumpleaños en el que se suponía que yo participaría.

"Está bien. Gracias, Hannah."

Afortunadamente le sonreí a Hannah. Pero el ambiente era un poco incómodo, así que miré hacia otro lado.

Pero esa noche, no pude disfrutar la cena acogedora como la había planeado.

Porque los guardias irrumpieron de repente en el Palacio Esmeralda.

"¿Q-Qué dijiste?"

Sorprendida, miré a la espalda de Lilly, que estaba bloqueando a la guardia. Habían entrado en el comedor y dijeron palabras impactantes.

"El Emperador ordena que la princesa Athanasia salga en este mismo instante".

"¡Forzando su salida! ¿Cómo te atreves a decir que...!"

"Si no quieres comprar la ira del Emperador, hazte a un lado."

"¡Eso es imposible! No puedes poner un dedo en... ¡No, princesa!"

El guardia apuntó con su barbilla a los demás viendo que Lilly no se movía. Y entonces los guardias empezaron a moverse como si estuvieran esperando su señal.

"¡Ack! ¡Suéltame!"

"¡Suelta a la princesa en este mismo instante!"

Los guardias también agarraron a las criadas del comedor porque podrían intentar protegerme. Y me obligaron a levantarme de la silla.

"¡Princesa!"

Uh, ¿cuál era exactamente el significado de esta situación? Intentaba pasar una cena acogedora con las criadas de mi palacio. ¿No había una fiesta en el salón de baile en este momento? ¿Pero por qué Claude me estaba obligando a salir?

Ah... ¿He oído bien? ¿No pidió que me llevaran, sino que me obligaran? ¿Tratándome como si fuera un criminal?

"La P-Princesa Athanasia de Obelia está entrando."

En esta situación que no parecía real, no entendía lo que estaba pasando. Estaba de pie frente al salón de baile, haciendo el ridículo con los guardias que me rodeaban. El sirviente me anunció con una voz vacilante.

Pero antes de que terminara de anunciarme, los guardias me llevaron al salón. La luz del salón de baile parecía tan lejana. Pero los guardias me tiraron al suelo y me hicieron arrodillarme.

"Athanasia".

Entonces una fría, pero familiar voz atravesó el aire.

Era Claude.

Sabía que no había ni un poco de calidez en su voz, pero aún así levanté la cabeza.

Y me encontré con sus ojos fríos como el hielo.

"Te mostré una generosidad impropia de mí, y te dejé vivir".

Sus fríos ojos me atravesaban desde el gran trono situado en la posición más alta del salón de baile.

Tenía la barbilla en la mano, como siempre, pero sus ojos eran fríos como el hielo.

"Pero mis oídos fueron ensuciados con tu nombre en este día, así que, ¿qué debo hacer?"

Cada vez que Claude decía una palabra, el salón de baile se volvía más y más frío.

Ni siquiera podía oír los sonidos de la gente en el salón de baile respirando.

"¡Su Majestad!"

Félix gritaba como si no pudiera soportarlo más.

"¿Cómo puede hacer esto? ¡Cómo puede, a la princesa Athanasia!"