Prohibitorum-K.TH +18

Duodecim

Contenido +18.

Mis ojos se abren y mis ojos pueden notar que todavía la habitación sigue oscura, un brazo abraza mi cintura y una respiración calmada es perceptible en mi nuca.

Me remuevo para darme vuelta pero él me aprieta contra si mismo para no moverme.

—¿Estás despierta?—su voz ronca vibra en mi oído y me estremezco ante la sensación.

—Umh, sí, amanecí recién, ¿te desperté?—mi ronca pero suave voz hace presencia en la habitación y siento como deja un beso en mi cuello—¿cómo llegué aquí anoche?

Lo siento reír y dejar una leve caricia en mi costado—anoche caíste rendida recostada en mi pecho, te traje aquí y te puse mi remera para que duermas cómoda—mis sentidos se alarmaron, ¿me vio desnuda?

—¿T-tú me viste d-desnuda?—él siente como mi cuerpo se tensó ante mi pregunta y él me aprieta más a su cuerpo.

—Te vi en ropa interior a excepción de que te quité tu sujetador, igual no es nada que ya no haya visto, ¿no?—su comentario provocó que mis mejillas se pusieran rojas, su risa retumba en las cuatro paredes y mi timidez hace que me esconda bajo las sábanas.

—Oh vamos, Su, no puedes ponerte tímida en este momento, no es nada del otro mundo, créeme—dejó tres besos en mis mofletes y mordió suavemente—además, no se si te lo dije, pero tienes lindos pechos, bebé—abrí los ojos y formé una mueca con mis labios de asombro y vergüenza.

—¡K-kim TaeHyung!—mis nervios hicieron presencia en mi cuerpo e intenté alejarme de él lo que provocó que mí trasero rozara múltiples veces su polla.

—Su... ¿si sabes que los hombres sufrimos una erección matutina, cierto?—no entendí su comentario hasta que sentí un bulto prominente de su pantalón y me alarmé.

—Y-yo, lo siento, no quise hacer eso—pero él no tomó en cuenta mi respuesta y se apretó más hacia mí.

Como respuesta no pude evitar jadear, no es fácil para mi tener a semejante hombre detrás de mi frotando su miembro contra mis nalgas.

Su brazo acaricia mis piernas desnudas y hace camino desde mis rodillas hasta el inicio de mis caderas, cuando llega a estas, las aprieta y continúa su recorrido por mi cintura.

Mete la mano dentro de la camisa hasta mi seno izquierdo para luego amasarlo consiguiendo un suspiro de mi parte. Me apoyo en su pelvis y comienzo a moverme sobre su erección obteniendo gemidos roncos en mi oído.

—Su... mierda—su mano se dirige a mi feminidad y frota sus largos dedos por encima de mis bragas, varios gemidos se hacen presente en el ambiente y este comienza a ponerse más pesado.

Mi parte inferior es bajada rápidamente y me acomoda las piernas a modo que mi coño quede a su disposición, él por su parte saca su polla con una dolorosa erección y la frota contra mis labios vaginales generando un placer inmenso en mí.