Iba a ser la boda del año, quizás del siglo, todo el mundo de la cultivación la esperaba.
No así Jiang Cheng.
No le interesaba asistir a la boda de Lan XiChen y Jin GuangYao.
Tenía otros asuntos más importantes que resolver que asistir a una estúp...
¡Yay! !Lo prometido es deuda! Y hoy, 21 de septiembre, día en que cumplo un año más, actualicé tal cual dije. ¡Y doble! jsjsjsj Sí, son dos capítulos, este extra y el 16 uwu
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No podían creer lo que tenían frente a los ojos; era fantástico pero terrorífico a la vez. ¡Estaban en otro mundo! ¡Culturas diferentes, tradiciones sin igual, un idioma completamente extraño para ellos, pero el cual entendían como si siempre lo hubieran hablado! Era completamente un sueño.
O una pesadilla si se consideraba que llegar a ese lugar fue completamente una sorpresa para Jiang Cheng y el primer Jade, pensó Wei WuXian. Y tenía razón; a diferencia de su shidi, Lan WangJi y él llegaron ahí sabiendo que iban a una nación extranjera, pero no así Jiang Cheng y Lan XiChen.
Pero en ese momento, cuando vieron la gran inmensidad del desierto y esa ciudad tan pintoresca a lo lejos, tomaron una decisión; apresurarían el paso.
No venían a hacer turismo después de todo.
–Tenemos que encontrarlos – dijo en esa ocasión Wei WuXian con decisión y una seriedad inusual aun para él, causando extrañeza en el alfa a su lado, quien veía con asombro esta actitud –, tenemos algo que ellos no; nuestras espadas. ¡Podemos movilizarnos más rápido!
–Mm, así es...
–Solo... – dijo y titubeó – ¿cómo sabremos qué camino tomar? ¡No tenemos ni una pista, Lan Zhan!
–...Si tenemos una.
– ¿Eh? ¿Cuál?
Y precisamente era como decía el mayor; tenían una pista, o más bien algo que les ayudaría a seguir el camino que tomaron sus hermanos. Y eso eran las espadas mismas de estos. Wei WuXian aún se aferraba a Sandu, mientras que Lan WangJi tenía a Shuoyue en su poder; armas espirituales que, al estar ligadas al alma y núcleo de sus portadores originales, podían servir como brújula a través de un no muy sencillo hechizo.
El rostro de Wei WuXian se iluminó al enterarse de aquello.
– ¡Perfecto! Podemos identificar y encontrar fácilmente a Jiang Cheng y a ZeWu Jun –celebró con entusiasmo, dejando de lado esa seriedad que había sorprendido momentos antes a Lan Wangji– Que astuto Lan Er-ge~ – llamó cariñosamente, provocando que las puntas de las orejas del jade se sonrojaran.
Wei WuXian casi se rió, casi.
–...No es tan sencillo – espetó el alfa –. Wei Ying, necesitaremos mucha energía.
Y precisamente necesitarían invertir una gran cantidad de fuerza espiritual para activar, aunque fuera solo una vez, el hechizo, por lo que deberían ser cuidadosos de cuándo y dónde utilizarlo.
–Ya veo... – caviló por unos segundos el omega, para que después, y con suma decisión en su mirada, dijera; – Déjame ser el primero en usarlo, Lan Zhan.