Los Secretos de La Élite® [Bloody#2]

Piloto

"La gente dañada es peligrosa, sabe que puede sobrevivir." 

Josephine Hart

LUCY

Hay veces que las situaciones, dan giros completamente inesperados.

Uno de ellos podía decirse que fue el final de la historia o, mejor dicho, el comienzo de una que, desde luego, sería mucho peor de lo que se imaginó.

No me siento mal por eso, tampoco es que pueda hacerlo porque el arrepentimiento es algo banal y estúpido que no te lleva a absolutamente nada, más que a un círculo profundo y oscuro dónde te hundirás cada vez más, mientras te preguntas qué hubiera pasado si todo hubiese sido diferente.

Ahí está en primer error. Declararía que el error más importante de todos es pensar que las cosas hubieran sido diferentes cuando no serían así.

Jamás serán esa forma, aunque creamos que sí.

Desde el momento en que tomas una decisión y estás dispuesta a llevarla a cabo, debes saber que no habrá ni una oportunidad para enmendar si cometes un error. Te hacen creer que sí, pero eso también es otro error.

Un error, otro error y eso me lleva hasta... aquí.

Puedo sentir un escalofrío recorriéndome la espina dorsal, sangre escurre por mis piernas, mi sangre. Poco a poco puedo sentir los latidos desbocados de mi corazón, que va perdiendo la fuerza mientras se escuchan los ladridos de unos animales que vienen detrás de mí.

El frío del bosque golpea contra mi cuerpo, sin embargo, no me permito tener espasmos, no me permito sentir miedo ni que el dolor que me consume poco a poco, sea más fuerte que mi fuerza de voluntad.

No soy cualquiera, pero ellos tampoco lo son y por eso, sé que cuando tomé aquella decisión, iban a destruirme completamente, pero lo que ellos no saben es que, también puedo hacerles lo mismo.

Las hojas crujen debajo de mis ojos, volteo a ver a la persona que llora a mi lado y cuando ve mis ojos, en medio de la oscuridad, deja de hacerlo colocándose en blanco.

«Las miradas dicen más que mis palabras y el poder se demuestra por los ojos». Me relamo los labios resecos y no bajo el paso, se escucha un disparo y me esfuerzo en llegar al lugar seguro.

Sé que no podrán conmigo, sé que seré tan fuerte como me lo proponga y cuando el acantilado llega, dejó caer el arma sintiendo cómo me pisan los talones, como están cada vez más cerca.

—¿Qué harás? — pregunta y no me causa nada el tono lleno de terror de su voz.

—Vamos a saltar.

Me contempla la herida y menea su cabeza. Sé lo que está pensando mientras el agua furiosa choca contras las piedras. Se admira tan azul y profunda, capaz de destruir, pero siendo tan hermosa, que me produce escalofríos y...

—Tengo miedo

Su voz me hace girar y concentrar mis ojos en los suyos.

—No podemos dejar que el miedo nos consuma. — mi voz suena completamente segura y si no confía en lo que digo, me hace creer que sí es eso o que sabe mentir muy bien, porque me agarra de la mano con seguridad.

—¿En nuestra única oportunidad?

Quisiera declararle que no, que no estamos huyendo, que no estamos a punto de hacer algo que posiblemente nos destruya la vida, sin embargo, existen momento donde tenemos que hacer sacrificios.