Zero O' Clock | Novela BL

18:00

Me pone un poquito triste el hecho de que al eliminar los nombres de los chicos la novela inmediatamente se ha vuelto poco leída y nada votada (el ultimo cap solo tuvo un voto el cual agradezco un montón) Es como si al dejar de ser un fanfic de bts simplemente ya no les interesase la historia ni el desarrollo de los personajes, es bastante desalentador. Eso no quiere decir que la cancelaré, pero probablemente sea la última novela que voy a escribir. 

En cuanto la puerta se cerró tras Han-Jae, Young-Soo se giró hacia su amigo con fuego ardiendo en sus ojos. Ki-Jeong tragó duro antes de levantar las manos en un gesto de rendición.

—¡¿No podías llegar cinco minutos después?!

—¡Lo siento, dijiste que tenías hambre así que me di prisa! —respondió asustado corriendo a esconderse al baño.

—¡Sal de ahí, cobarde! —exigió Young-Soo golpeando la puerta, completamente molesto.

Había estado a solo segundos de besar a Han-Jae por primera vez y la inoportuna llegada de su mejor amigo lo había arruinado. Estaba enojado y avergonzado al mismo tiempo.

—¡No saldré hasta que te calmes! —dijo Ki-Jeong como última palabra.

Young-Soo suspiró sonoramente antes de sentarse en la silla junto al escritorio y atacar uno de los pasteles de chocolate con el ceño fruncido. Han-Jae se había visto tan lindo confesándole que nunca había dado un beso que no pudo controlar el deseo de ser él quien le diera el primero.

La puerta rechinó cuando Ki-Jeong la abrió unos centímetros para observarlo de reojo, alerta ante cualquier amenaza contra su vida.

—Sal de ahí, no te haré nada —habló Young-Soo limpiándose los dedos con una servilleta.

Ki-Jeong suspiró aliviado antes de acercarse a pasos lentos. Se sentó algo alejado de él por el momento y tomó su vaso con chocolate caliente.

—¿Qué estaban haciendo? —preguntó con cautela.

—Casi nos besamos, —murmuró Young-Soo. Ki-Jeong por poco escupe su chocolate debido a la impresión— pero has llegado en el peor momento.

—Mierda, lo siento —se disculpó claramente arrepentido. Young-Soo negó con la cabeza.

—Está bien, puedo volver a intentarlo en otra ocasión.

—Él dijo que te veía el sábado, ¿acaso saldrán? —le recordó.

—Iremos al cine.

—Perfecto, bésalo en medio de la película —sugirió.

—No quiero que nuestro primer beso sea en una sala oscura llena de gente y niños llorando.

—Si, tienes razón. —concordó antes de que su gesto cambiase a uno de confusión— Un momento, ¿casi lo besas?, ¿no dijiste que aún no estabas listo?

Ki-Jeong se veía realmente sorprendido y no era para menos. Hace unas semanas Young-Soo habría temblado de miedo con la sola idea de quedarse a solas con un hombre que apenas conocía. Actualmente lo que más ansiaba era estar solo con Han-Jae sin interrupciones.

Todo esto se debía principalmente a la confianza que empezaba a formarse entre ambos y a la actitud paciente y dulce de Han-Jae. El hombre era respetuoso, muy cuidadoso y extremadamente paciente tal como había dicho antes.

—Me he hecho a la idea de que Han-Jae no me hará daño, —explicó eligiendo bien sus palabras— ahora me siento menos nervioso cuando le tomo la mano o él se me acerca.