D MAIL [YOONMIN]

3. d o c e

Le prometí a Hyeon que vería a su padre, considerando la relación legal el vendría siendo mi abuelo, nunca tuve uno de esos, estoy seguro de que mi madre hizo que me odiaran sin conocerme siquiera. El cambio el viejo HoJae seguía igual que la única vez que lo vi en Japón cuando hizo un escándalo porque Hyeon a sus cuarenta años decidió adoptar un adolescente en vez de conseguir esposa y tener hijos propios.

El viejo seguía intentando encontrar la salsa dentro de la bolsa de su comida, me daban ganas de hacerlo por él pero casi me divertía la idea de verlo hacerlo solo.

—Los jóvenes de ahora hacen cosas estúpidas—comentó de la nada, me distraje de lo que estaba haciendo solo para contestarle.

—Lo dice el señor que quiere regatear en un McDonals.

—Insolentes también—sonrió de lado.

—Solo apresúrate viejo, tengo que regresar a mi departamento—llevaban cinco minutos en el auto, el estacionamiento de un McDonals no era exactamente donde pensaba estar durante el fin de semana.

—Es una cueva, llámalo casa o como quieras ¿Cómo es que ni tu abuelo puede visitarte? —rodé los ojos, intentar explicarle que mi espacio personal ocupaba el lugar de un departamento no era fácil, el aun creía que uno debía casarse a los veinte o caducaba.

—Mi psicólogo...—comencé a explicar.

—Psicólogos de mierda—vociferó por fin encontrando su salsa, comencé a reír mientras lo veía comer, mi hamburguesa seguía intacta pero ciertamente no podía comer considerando que estábamos por ir a buscar a JiHyun.

—Sí, tampoco me agradan—comenté con pereza.

—Bueno, yo solo vine aquí para recoger al otro.

—Se llama JiHyun, viejo.

—Llámalo como quieras, un día tengo un hijo soltero cuarentón y al siguiente tengo un nieto y medio y uno de ellos tiene las tuercas desacomodadas—podría haberme ofendido viniendo de alguien más, y si lo dijera como un insulto pero no se quejaba de mí, solo me usaba para quejarse de su hijo.

—Deja de meterte conmigo y deja de comer en McDonals, nadie te tomara en serio, tu hijo es doctor ¿no deberías saber cuidarte a ti mismo?

—Dime eso cuando te comas la hamburguesa que te compré y llama a mi hijo papá o te desheredo.

Quise reírme de nuevo, por fin comenzó a conducir cuando pujo dejar su comida de lado, JiHyun tendría su semana libre y deberíamos recogerlo para luego tirarlo en el primer hotel que encontráramos tal como le había prometido a Hyeon que haríamos antes de que se fuera a Japón, también prometí ir a todas las sesiones lo cual estaba haciendo sin problemas.

Me gustaba reunirme con el viejo HoJae aunque no lo hiciera regularmente él siempre se quejaría de todo y llenaría mi plato de comida mientras tanto.

Para una persona que siempre tuvo un plato pequeño y se acostumbró a comer tan poco, que alguien desinteresadamente llenara su plato por pura compañía era extraño.

Desde que nos conocimos tres meses atrás el simplemente resopló al verme y dijo "bien seré tu abuelo pero nada de hablarme bonito, odio los halagos" y aunque no tuviera ninguna intención de hacerlo de todos modos acepté tales condiciones, tomamos té juntos en la vieja residencia del anciano y así es como de cierto modo llegamos a hablarnos mutuamente.

"El amante de mi madre tiene una vida" apenas comenzaba a pensarlo a fondo, tenía un padre mayor y una madre excéntrica que se la pasaba de viaje, tenía un departamento desarreglado muy cerca del hospital y no tomaba nada que no tuviera al menos dos cucharadas de azúcar.