Capitulo 51.

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Mis pies se encontraban hinchados, había asistido a tres cirugías luego de que la reunión concluyo, una de cirugía general, otra de pediatría y la ultima de ortopedia. Los nuevos doctores en realidad eran bastante habilidosos con sus cirugías, cuando termino mi día me dirigía a cada donde me esperaba mi madre con una deliciosa cena.

—¿Como te fue? —me pregunto mi madre mientras ponía la mesa.

—Bien, otra vez me duelen los pies me dare una ducha y luego te comento todo lo que paso el día de hoy.

Me una ducha de agua fría, deje aquella agua correr por todo mi cuerpo mientras mis ojos estaban cerrados y mi mente teletransportada a otro lugar.

Me hice dos trenzas pegadas y luego me puse un poco de maquillaje, justo cuando me iba a poner el labial escuche mi celular sonar.

—¿Si? —respondí, observándome en el espejo para decidir si me iba así.

—¿Ya estas lista?

—Hans, ¿Enserio creíste que iba a ir a tomar contigo luego de que me ignoraras ayer? —tome mis llaves.

—No te estaba ignorando, te dije lo que sucedió y te pedí disculpas, ven por favor, quiero compartir contigo esta noche.

Escucharlo decir eso me emociono.

Baje super rápido, y me quede viéndolo sin decir absolutamente nada, solo sonreí, nos dimos un abrazo honestamente esperaba algo mas... un eso quizás.

Me puse la pijama y me fui a comer con mi madre.

—Ya mañana me voy. —me dijo mientras se llevaba la cuchara a la boca.

—Madre no he podido compartir contigo por que estoy trabajando lo siento.

—Lo se hija y no te preocupes por eso, me iba a ir unos días mas pero lamentablemente se me presento algo para mañana en la tarde así que tendré que irme.

—Entiendo, no te preocupes. Prometo que cuando tenga tiempo ire a visitarlos —tome su mano y sonreí.

—Tranquila. Tienes muchos compromisos aquí y lo entiendo. —hubo un silencio entre nosotras —. ¿No tienes enamorados? —sonreí al escuchar eso.

—Si tengo, creo... la verdad no lo se. Pero el punto es que no me siento preparada para estar en una relación.

Ella sonrió.

Nos vimos una película juntos hasta que mi madre se quedo dormida, ambas estábamos acostadas en el sofa cama, así que apague la televisión me acomode entre las sabanas y dormí con mi madre mientras le acariciaba el pelo.

Al día siguiente me levante del sofa y me entre a duchar, me arregle y luego tome las llaves del auto para irme, iba tarde a decir verdad anoche me había acostado super tarde viendo la película, odiaba dormirme  al ver una película.

Aparque el auto en el estacionamiento del hospital entre corriendo a registrar mi llegada y luego de hacerlo me sentí bastante bien. Me acerque a la recepción.

La chica me paso el historial del paciente que tenia que ver hoy.

—Buen día —escuche una voz aguda y ronca junto a mi, mire a ver si hablaba conmigo y efectivamente.

—Buen día —le respondí al hombre alto, de piel un poco mas clara que la mía, su pelo era castaño y rizo, parecía llevar un tatuaje en el antebrazo. Me regalo una pequeña sonrisa y observe los rectos, blancos y delicados que se veía su dentadura, al igual que su boca rosada barbie.

Recuérdame.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora