Capitulo 45.

90 7 0
                                    

Y mientras recordaba la conversación por la cual Antonella se alejo de mi, entre a mi boca el sorbete del agua, para luego servirme un poco de vino blanco en la copa que tenia enfrente. Observaba con determinación las parejas que habían en el lugar, en ciertas mesas habían parejas, en otras una familia completa, observe una niña darle un beso a su padre mientras su madre sonreía, y una sonrisa se formo en mi rostro.

—¿Disculpa? —escuche la voz de un hombre mientras me llevaba la cuchara de sopa a la boca.

—¿Si? —dije sin mirar.

—¿Le molesta si le acompaño? —subí la mirada y observe a Preston.

Sonreí al verlo, y me levante del asiento dándole un abrazo. Se sentó frente a mi mientras observaba en menú.

—¿Como has estado? —me pregunto mientras cerraba el menú.

—Mejorando a decir verdad.

—¿Y el hospital?

—Aprendiendo poco a poco.

—Escuche decir a Antonella que seguramente estarías aquí, así que decidí venir a verte, pues básicamente te habías desaparecido —sonreí para bajar la mirada al plato. —. Por un momento hasta llegue a creer el absurdo rumor.

—¿Cual? —pregunte —. ¿El que salió en el periódico con la suposición de que me había suicidado? ¿O el de todo internet de que mande a alguien a que me matara? —rode los ojos al recordar todas las cosas absurdas que las personas inventaban sobre mi.

—La del periódico.

Nos reímos y duramos un rato hablando acerca de muchas cosas. Los viajes que habíamos tenido, Hans, Preston su esposa y yo.

—¿Y Marena como esta? —pregunte mientras tomaba un sorbo de agua.

—Esta en casa de sus padres de visitas, cuando salga de aquí pasare por ella, deberías visitarnos un día de estos, ella también estaba preocupada por esos rumores de tu muerte y eso, hasta íbamos a la mansión pero nunca había nadie, o tal vez no querías recibirnos.

—Me mude hace mucho de esa mansión, no aguantaba estar ahí sola, me sentía sola en ese lugar tan grande y sentía hasta miedo... no se —me lleve la copa de vino a la boca —. Es difícil de expresar como me sentía en realidad.

—Se que ha sido difícil la superación de esto, yo la verdad me volví agresivo, esta bien que éramos mejores amigos de toda su vida. Pero no pensé que me doliera tanto la muerte de el, fue difícil para mi la muerte de su hermano pues tan bien éramos amigos. —su mente se teletransporto —. La verdad no pensé que perdería a dos buenos amigos en esta vida.

—Yo no pensé que perdería al amor de mi vida. —una sonría triste salió a la luz mientras la ocultaba llevándome la copa a la boca.

—Si —se llevo su copa a la boca —. Yo en realidad con cualquiera que veía me iba a los puñetazos, mas con los paparazis, son insoportables en los momentos mas delicados.

—¿Por que crees que me desaparecí y me cambie el color de pelo? —suspire —. Me tenían cansada, se me lanzaban, me preguntaban cosas que me hacían sentir peor. Siempre uso estas gafas.

—¿Y en el hospital como haces?

—La verdad ahí nadie me reconoce, la mayor parte del tiempo suelo usar mascarillas, pero hasta el momento nadie me ha reconocido. Es difícil ver personas felices a tu alrededor cuando tu te encuentras básicamente devastado, insuficiente, roto y cansado. —una sonrisa se formo en mi rostro, mientras suspiraba y me recostaba de la silla —. Es difícil sonreír, pero luego las sonrisas falsas se vuelven difícil de diferenciar cuando obtienes la practica. La verdad me consideraba una persona fuerte —sonreí —. Pero me di cuenta que soy una mierda.

—Eso lo dices por que estas en proceso de recuperación.

—¿Y este proceso cuanto acaba? —respondí cansada sin esperar respuesta.

—A mi madre le tardo unos 6 años, pues su dolor no lo compartía. Se lo guardaba para ella misma y así en realidad la recuperación suele ser mas difícil. —el celular de Preston empezó a sonar, el se levanto de la silla y se fue a un lado al volver se volvió a sentar. —. Tengo que irme, tengo que ir a buscar a Marena. Fue un placer volver a verte Pandora, cuando quieras sabes que puedes visitarnos.

—Gracias. —le di un abrazo.

—Yo pago.

—No es necesario no te preocupes por eso, yo lo hago.

—No claro que no.

Al final lo deje hacerlo, por que la verdad el era bastante insistente. Tome mi cartera y camine hacia la salida, me acerque al auto y busque mis llaves.

—Hey —escuche a alguien detrás de mi.

Me gire para ver si era a mi. Un hombre, alto blanco y fuerte con el pelo un poco largo se acerco a mi.

—Se te quedo esto —dijo pasándome una tarjeta.

—¿Y esto que viene siendo? —le di la vuelta a la tarjeta.

—Mi número —me guiño el ojo y se dio la vuelta dejando en el aire, pero con risas por la forma tan segura que tenia ese chico de ligar.

Me subí al auto intentando olvidar lo que acababa de suceder, y conduje a casa eran las 12:04 de la noche. Al llegar me quite la ropa y me di un baño corto mientras intentaba relajarme, hasta que cerré mis ojos y mi mente me llevo a un lugar donde yo no quería estar.

—Hoy me quedare contigo y no ire a trabajar —me dijo mientras se entraba a la ducha conmigo desnudo rodando mi piel mojada por el agua.

—¿Estas seguro? —le pregunte mientras sentía como me pegaba a el, y acariciaba mi pelo mojado. Sentirlo detrás de mi alteraba todos mis nervios por mas veces que nos acostemos y eso, los nervios cuando se acercaba a mi con la intuición de follarme me volvía loca y me ponía nerviosa.

—¿Por que no me quedaría con el amor de mi vida? —me dijo mientras pasaba sus manos por mis pechos mientras yo en mi espalda podia sentir la erección que provocaba toda esta situación.

—No lo se —le hable con un hilo de voz.

Tan solo recordar como nos devorábamos hizo que una lagrima de felicidad ligada con tristeza corriera por mi mejilla. Salí de la ducha mientras secaba todo mi cuerpo para darme una ducha.

Al día siguiente me levante temprano para ir al hospital, me hice un peinado a la altura de mi nuca, me puse mis tenis deportivos que eran unos de los mas cómodos que tenia. Tome el transporte publico, al llegar me compre un café, fui al armario y me puse mi traje azul, dejando mi bolso y mis cosas en el casillero.

—Dicen que el jefe de cirugía va hacer una reunión importante —me comento Zahian mientras nos poníamos los guantes para atender a unos pacientes.

—Siempre esta haciendo reuniones importante, y la verdad no son nada de importantes pero bueno.

—Tienes razón —me respondió mientras entrabamos a emergencias, ella hacia su trabajo mientras yo podia ayudar en lo mas que podia.

Ella tenia una operación bastante importante y yo por suerte pude asistir.

—Bien lo primero es que en mi quirófano no hay juegos, o chistes la vida de una personas esta en mis manos y eso me lo tomo muy enserio —. hablo y observo a dos internos que estaban pegándose de hombros. —. Si me hacen alterar saldrán de mi quirófano automáticamente —. se coloco los guantes. —. Empecemos Dra. Hardt acércate —honestamente Zahian era otra persona en el quirófano era muy entregada, y cruda. En el quirófano todo le molestaba.

Me acerque al paciente que ya estaba en la camilla previamente anestesiado.

—Haremos una cirugía de Válvulas Cardíacas. ¿En que se basa esta cirugía Dra. Taylor?

—Pues... —se puso nerviosa. —. Se trata de...

—Tiene 5 segundos para que me conteste sino saldrá del quirófano y observara la operación desde el balcón. —Dijo Zahia mientras la miraba por arriba de sus gafas fumigándola con la mirada.

Recuérdame.Where stories live. Discover now