Capitulo 43.

84 10 1
                                    

1 Año y 6 Meses después.

Muchas cosas suceden en tan poco tiempo, termine la universidad y ya tenia alrededor de 8 meses en hospital de interna rodando por todas las especialidades, atendiendo pacientes, dándome a destacar y dándome cuenta que son mas las vidas que se pierden que las que se salvan.

—Dr. Hardt tu darás la noticia de que el paciente no sobrevivió.

—Bien —dije mientras me retiraba los guantes y me alejaba del cuerpo sin vida.

—¿Que se siente dar las malas noticias? —me pregunto una chica que siempre estaba pegada a mi como cliché en cabello.

—Te acostumbras.

Me acerque a una señora, y me senté junto a ella.

—Su esposo no pudo sobrevivir señora —la señora empezó a llorar. —. No se ponga así, mientras usted haya disfrutado todo junto a el, no debe por que sentirse triste e incompleta. La vida continua, cuéntele su historia de amor a sus nietos. —la señora me sonrió y seco una de sus lagrimas.

—Gracias.

Asentí y volví a emergencias. Empecé a llenar un formulario, hasta que note como el Dr. Anderson se acercó a mi.

—¿Esta noche si aceptara salir conmigo Dr. Hardt?

—Estoy ocupada, no tengo tiempo para salir ni para ir por unos tragos como usted dice. Lo siento Dr. Anderson.

Ese hombre era irritante, horrible y de mal carácter quería conseguir las cosas a las malas y a las buenas. Se había cogido a la mitad de las internas, tan solo por decirles que les iba a conseguir las mejores cirugías pero que tenían que darle algo a cambio.

—¿Cuándo tendrás tiempo para mi? —dijo mientras pasaba su mano por su calves —. Sabes que puedo enseñarte muchas cosas, y conseguirte buenas cirugías para que seas una buena cirujana.

—Le aviso cuando pueda. —puse mi mano en su hombro mientras entregaba el formulario a la secretaria y me iba de ahi lo mas rápido posible.

Camine por los pasillos del lugar mientras, tenia la cabeza en otro planeta.

—Hey ¿Que tal? —Zahia se colgó de mi brazo —. ¿Unos traguitos esta noche o que?

—No tengo tiempo.

—Sonríe un poco, ósea nunca te he visto ni sonriendo, ni tomando, ni bailando. ¿Siempre fuiste así de aburrida?

Reí.

—Así me gusta, sonríe.

Zahia es la directora de Cardiología del hospital, es una cirujana demasiado buena y se podría decir que se convirtió en mi amiga.

—¿Vamos a comer? —le pregunte mientras caminábamos por todo el lugar.

—Tengo una cardiocirugía en 45 minutos así que hagamos eso rápido.

Fuimos a la cafeteria y empezamos a almorzar, mientras ella me hablaba de lo que había hecho anoche.

—Es que no lo se, el no era como que tan bueno en la cama. La verdad fue el peor sexo que he tenido en mi vida. Solo pensaba en satisfacerse el.

—¿No podemos hablar de viajes o no se? —dije mientras tomaba jugo.

—¡No!, el sexo es importante.

—El sexo es importante cuando estas en pareja, tu solo tienes amigos con derechos.

—Esos también son importantes. —reí —. ¿Y tu? Cuéntame de tu vida sexual.

Recuérdame.Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon