Min Yoongi, siempre obtuvo el primer lugar.
Park Jimin, siempre fue el segundo lugar.
Sus vidas se basaron en competir entre ellos, queriendo obtener el mayor logro en el mundo de la música.
Incluso luchando en contra de su amor, en contra de sus se...
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(Narrador Omnisciente)
- Yoonnie, ¿Ya me dirás a dónde me llevas? - Preguntó un curioso Jimin.
- Ten paciencia cielo, si te lo digo ahora...
- No será sorpresa, ya lo sé - Yoongi sonrió y Jimin no tuvo de otra que esperar llegar hacía donde sea que su amado lo llevé.
Yoongi había estado planeando aquella salida a solas con su adorado Minnie hacía varias semanas. Sin decir nada, ni levantar sospechas, planeado todo muy bien.
Dejó a Jungkookie con Hoseok y Taehyung. Pues para Kookie, Tae siempre será su tío favorito, aunque no lo admita aún. Mientras Kookie ni ellos estén en cada, está estaría en remodelación, pues a menudo Jimin le decía que la casa parecía de algún vampiro, sin color ni vida, así que decidió que un blanco en toda la casa, quedaría perfecta.
Organizó muy bien el lugar al que lo llevaría, pues definitivamente quería sorprenderlo. No quería que fuera cliché, pero Jimin ama lo cliché, el romance y lo cursi y la idea es que a su adorado chico le guste y claro que de esforzó muchísimo por conseguirlo.
Durante el viaje Jimin trato de mantenerse despierto, pero después de un tiempo, se quedó completamente dormido, dándole así una enorme ventaja a Yoongi y favoreciendolo, pues en el tiempo que el menor logró dormir, llegaron al lugar en que estarían durante aquellos dos días.
Yoongi estacionó el auto y sonrió al ver dormir tan pacíficamente a su hermoso ángel, todos los días se hacía una misma pregunta.
¿Cómo no amar aquel hermoso ángel?, Si Jimin es el único amor de su vida, su bello ángel, un ser que siempre debe cuidar y amar, incluso después de la muerte.
El mayor aprovechó que su ángel dormía, para lograr colocar una venda sobre sus ojos y así no pudiera ver el hermoso lugar frente a ellos.
- Amor - Llamo el mayor a su pareja, tratando de despertarlo - Ya llegamos cielo - Jimin empezó a moverse un poco, para después hacer un puchero con sus labios al sentir sus ojitos vendados.
- ¿Por qué tengo mis ojitos vendados Yoonnie? - Preguntó Jimin, con un tono berrinchudo. El mayor sintió y dejó un casto beso, sobre los gruesos belfos de su amado ángel.
- Por qué llegamos y quiero que te sorprendas al ver la increíble sorpresa que te tengo cielo.
- Está bien, pero cuando me quites la venda, lo primero que veré, serán luches y tú mi puño en mi rostro si no te apresuras Yoon - Refunfuñó el mejor, Yoongi solamente río, adorando aún más al amor de su vida.
- Como digas cielo - El mayor ayudó a su novio a bajar y después caminaron un par de pasos, con mucho cuidado.
- ¿Ya? - Yoongi no respondió y en su lugar, actuó.
