capitulo 14

10.8K 523 5
                                    

¿Cómo podía gustarle alguien como yo? ¿Cómo podía alegrarme tanto que le gustará? ¿Será que…?

-Eres una mujer preciosa- susurro cerca a mis labios.

De nuevo nuestros labios estaban en un delicioso y delicado movimiento, lo hacía tan lento y tan suave que me hacía desear más, aunque fuera el momento perfecto.

Nos separamos por falta de aire, lo mire a sus tan lindos ojos azules, que brillaban y brotaban de la lujuria que salían de ellos.

-Creo que deberíamos ir a clase- dije.
-¿Y si no vamos a clase?- volvió a acercarse a mí.
-No… Yo…- junto de nuevo nuestros labios sin dejarme terminar.
Correspondí a su beso, pasando mis manos por su cuello, empujando su cabeza un poco más hacia mí para que se profundizará más el beso, Harry paso sus manos por mi cintura, levemente me levanto haciendo que me subiera en su regazo. Tome
su cabello jalando suavemente de él; mientras que Harry empezaba a descender sus besos por mi cuello, ladee un poco más la cabeza para que tuviera más acceso a él, y en ese instante sonó el primer timbre que anunció la primera hora de clase.
Baje mis manos al pecho de Harry y el aún permanecía besando mi cuello, lo empuje un poco para que se separará de mí, este me miro con una hermosa y divertida sonrisa, le devolví la misma sonrisa guiñándole un ojo, me levanté rápidamente, tome mi mochila y empecé a caminar.
-Nos vemos a la salida Thompson- continué mi camino.

-Pagarás por esto Sofía Collins- grito detrás de mí, sonreí levemente.
Aceleré más mi paso, no quería volver a llegar tarde. Llegue al salón que aún permanecía abierto, mire un puesto vacío al lado de mi hermano y senté, le sonreí, y en ese instante llego la profesora.

Narra Harry

Después de que ella me dejara ahí, debajo del árbol, con ganas de más y con su aroma aun acompañándome, tomé la decisión de levantarme e ir a clase. Tomé mi mochila y caminé a paso normal, no me afané en absoluto por llegar a clase.

Mi mente estaba absolutamente perdida en ella, en como su cuerpo se acoplaba tan bien al mío, como me hizo sentir, como ladeo su cabeza para que accediera a ella, me había perdido en ella, solo era ella, solo existía ella, solo existía tan bello y
maravilloso ser, con su aroma embriagador, con la sonrisa más dulce que nunca en la vida vi, con los ojos hermosos, ella era el ser más bello y embriagante que no merecía tener.

Llegue a clase, tarde como era de esperarse, escuché como el profesor me daba un buen sermón por llegar tarde, pero al menos no me iba a volver a mandar a la oficina del director. Tomé asiento, apoye mi cabeza en las mano y me puse a
esperar a que las horas pasarán, tenía tres infernales horas con este señor, y solo esperaba la hora de la salida para verla.

Pasaron las tres horas, salí a tomar algo y ya solo faltaban tres horas más, una de una, dos de otra, faltaba poco, en realidad muy poco, pero la espera se me estaba haciendo eterna. Llegue a la cafetería con ganas de poder encontrármela, pero no estaba, miré hacia todas las direcciones y me encontré con la mirada de su hermano, su semblante era muy serio, solo me miraba, sin expresión alguna.

Le sonreí esperando que cambiará la expresión o que al menos tuviera alguna, y así fue. Caí en cuenta que él toma las mismas clases con Sofía, ella debía de estar por ahí en los pasillos, si no estaba aquí debía de estar en su casillero, o en algún lado de los pasillos. Me entregaron la bebida y me dispuse a salir de la cafetería con
plan de encontrarla, tal vez, si hablaba con ella la espera podía ser menos tortuosa.

Llegue a la puerta y sentí una mano pasar por mis hombros, voltee la mirada y ahí estaba Collins, Luke Collins sonriendo, me saludo muy amigable, no era propio de él.
Me empezó a alejar de la salida llevándome a la mesa con los demás del equipo.

Me quise negar sacando de excusa que tenía algo que hacer, pero fue totalmente en vano, me detenía cada que podía. Me tomaba fuertemente el brazo, sentándome de nuevo, definitivamente este no era Thompson, algo le sucedía.

Me salvó el timbre de la siguiente hora, me levanté rápidamente, y al salir de la cafetería tome a Bradley en la entrada, le sonreí y este se fue detrás de mí. Me sitúe en las escaleras por donde pasaban todos; y ahí pasaba, con una chica rubia de
ojos claros, que al momento de ver a Bradley se sonrojo levemente, miré
rápidamente a Bradley que también la miraba un poco sonrojado, sonreí
burlonamente dirigiendo la mirada de nuevo a Sofía, que ya me miraba, y al darse cuenta que la voltee a mirar, bajo su cabeza y un suave y tierno sonrojo apareció en sus tan lindas mejillas. Oh por Dios, esta mujer es realmente hermosa.
De nuevo volvieron a pasar las tres horas más largas de la vida. Y al momento que dieron la salida, tomé mis cosas y salí como si nada más importase, y era así, solo importaba ella. Bajé rápidamente las escaleras, dirigiéndome a la biblioteca.
-¿Por qué tan sonriente Thompson?- alguien me detuvo.
-¿Qué mierda quieres Cox?
Sonriente pero agresivo- sonrió- cálmate Thompson, iremos a la práctica de futbol,
¿Vienes?
-No… Yo…-me detuve- Tengo cosas que hacer, creo que hoy no iré.
-¿De nuevo? ¿Qué pasa amigo?- me tomo de los hombros sacudiéndome un poco.
-Nada… So- me interrumpí al verla pasar. Ella estaba en su uniformede Lacrosse.
Uniforme que se veía excepcionalmente bien en ella, sus curvas se marcaban a la perfección, su cabello estaba recogido dejando ver cada facción de su rostro, estaba hermosísima. Iba con un chico, alto. Este pasó su brazo por los brazos de
Sofía pegándola a su cuerpo, ella pasó uno de sus brazos por la espaldade él, la furia empezó a salir a flote, me dio rabia verla con él. Y empezando ¿Quiéncarajos era él? ¿Y por qué la abrazaba?
Y entonces pensé…
-¿Sabes qué? Si iré a la práctica de hoy, deja me cambio- Cox sonrío triunfante aún sin ver a Sofía.
Caminé en dirección a los vestidores, tenía que saber quién carajos era ese chico y por qué abrazaba así a Sofía.

TouchdownDonde viven las historias. Descúbrelo ahora