capitulo 24

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¿Hablar debidamente?

-Si… Ven, siéntate- tocó un lugar a su lado y avance hacía el cerrando a mi espalda la puerta.

-¿Y de que quieres hablar?- pregunté intentando hacerme el desinteresado.

-Escucha Harry… Yo… No se como decirte esto…

En ese instante muchas cosas se me vinieron a la cabeza, cosas que podrían ser posibles, pero que sabía que no lo eran, aunque aún así, lo pensaba. ¿Y si tenía novio? ¿Y si se cambiaba de universidad? ¿Y si se iba del país?

-Lo lamento- abrí mis ojos y el tenía la cabeza hacia abajo.

-¿Po-por qué?

-Lo que pasó hoy… No debió suceder… Esa “conversación” que tuvimos a la salida no debió pasar.

-Escucha Collins, no te estoy entendiendo nada.

-Déjame explicarte mejor- tomo un poco de aire y empezó a hablar- a la salida, cuando sonó la campana, salí rápidamente del salón para irte a buscar, sabía perfectamente dónde, sabía que te dirigías a la biblioteca, y también sabía que Sofía iba a pasar por ahí, por eso te busque y hablé contigo. Paso exactamente eso, te encontré cuando te dirigías a la biblioteca, sabía que Sofía iba a pasar tarde o temprano por ahí, y sabía que iba a escuchar la conversación, por eso quise que habláramos ahí, justo en ese lugar, justo de eso. Quería que dijeras que ella no te importa para que se alejé de ti, y no se vuelvan a ver. Se que ella te gusta Thompson, es más que evidente, la forma en que la miras… Nunca habías mirado a una chica de esa manera, de la manera en que la miras a ella, y hoy me di cuenta de eso, al sostenerte contra la pared y la miraste, en tu mirada se reflejaba tanto amor y cariño, que me sorprendió verte así, me sorprendió que de ti saliera esa mirada; y por eso mismo quería que ella se alejará de ti, es la primera vez que te veo así y temo que le hagas daño.

-Yo…

-Pero el que le hizo daño fui yo, te hice daño a ti, y sobretodo a ella…

-¿Qué? ¿Ella está bien?

-Thompson… Hoy había decidido quedarme en casa y no quise ir a ningún lado y, por lo que llegue primero que ella.

-¿Y…?

Cuando ella entro a casa, me sentí culpable de todo- a Luke se le cortó la voz en ese momento- sus ojos estaban llenos de lágrimas, no me dirigió una sola mirada, no me saludo, no me habló, ignoro completamente mi existencia, ignoró por completo que estaba ahí, que estaba de pie frente a ella y solo siguió a su habitación. Cerro la puerta, y entonces…- se quedó callado y una lágrima se asomo por su mejilla.

-¿Entonces…?

-Rompió en llanto…

Mi mundo terminó de derrumbarse, me empecé a sentir culpable, de mi boca salieron cosas que nunca imaginé decirle, pero aún así salieron, y aunque no se lo dije directamente a ella, lo había escuchado y estaba hablando de ella.
Mis ojos se cristalizaron a tal punto de no poder ver; ahogué un sollozo en mi garganta, en lo que Luke continuaba.

-Cuando la escuché llorar de tal manera, sabía que la había embarrado. Sabía que ella era feliz y yo le arrebaté esa felicidad haciendo que te escuchará decir cosas que ni siquiera querías decir. Me sentí la persona más despreciable del planeta.

Las lágrimas empezaron a bajar por mis mejillas, humedeciendo las comisuras de mi boca. Por más de que intentaba detener las lágrimas me era imposible, no podía, saber que ella estaba tan mal, y que había resultado de esa manera por mi culpa, por algo que no quería decir pero que dije, solo por querer protegerla, la dañaron.

-Me quedé en su puerta hasta escuchar que se había calmado, hasta que deje de escuchar sus sollozos, y entonces tome la decisión de venir aquí, de hablar contigo y pedirte disculpas, por hacer esto casi imposible. Se que ella gusta de ti, como tú de ella, la forma en que sus miradas se conectan… Nunca antes había visto algo así. Tanta conexión entre dos personas, que aunque sean de polos opuestos, se atraen profundamente.
Si… Eso éramos Sofía y yo, polos totalmente opuestos, éramos de mundos totalmente distintos, pero que, sin importar que tan opuestos seamos, sería capaz de llegar hasta ella, de entrar al mundo de ella, solo por estar con ella, eso no me importaba, la quería y la necesitaba a ella, a su tan linda inocencia, a su tan espléndida sonrisa, a sus brillantes ojos castaños, a su cuerpo bien figurado y marcado con las más bonitas curvas. A sus labios tan dulces, tan suaves, esos que encajaban a la perfección con los míos. Sí, definitivamente la necesitaba a ella, solo a ella.

“Necesitaba a Sofía Collins”

-Por eso Thompson, tienes el camino libre, has feliz a mi hermana, amala como merece ser amada. Ella se merece eso. Y tú… No se que decir, ya lo ganas todo con ella, ya lo tienes todo con mi hermana.

Sonreí y asentí, tenía razón, tenía todo con Sofía.

-Gracias Collins- me animé a decir- pero ahora lo importante es que ella me escuché, que me deje explicarle lo que sucedió, no quiere hablar conmigo, no me quiere escuchar, y lo entiendo completamente, pero si quiero hablar con ella, quiero que me deje explicarle las cosas.

-Dale un poco de tiempo. Ella pensará las cosas, ella siempre toma la mejor
decisión, solo ten paciencia y espérala.

-Ella tendrá todo el tiempo que quiera y necesite, pero solo espero que lo sea mucho… No se si voy a poderlo soportar.

-Tranquilo, lo vas a soportar, si de verdad la quieres, la esperarás. Igual, intentaré hablar con ella, cuando noté que tiene un mellizo. Intentaré hablar con ella, intentaré explicarle lo que sucedió, y haré lo posible para que te escuché.

-Gracias Luke. Enserio gracias.
Sí, gracias Collins. Muchas gracias.

TouchdownWhere stories live. Discover now