Touchdown

capitulo 15

Narra Harry

Llegué a los vestidores hecho todo una furia, me cambié lo más rápido que pude, salí, y ahí aún estaba Cox esperando por mí. Me miro sonriendo.

-No me acordaba lo bien que se veía la hermana de Collins en su uniforme- apreté con fuerza mis puños.

-Si ajá, vamos- dije secamente intentando ocultar mi enojo.

-Ven... Thompson… Tu…

-No- lo interrumpí.

-Pero si no he dicho nada- bajo la mirada.

-Se lo que vas a decir y la repuesta a eso es no- sabía que me iba a pedir algo de Sofía, lo podía ver en sus ojos. En definitiva era un idiota.

-Ya… Esté bien, está bien…- seguimos caminando hacia la cancha.

Llegamos a ella, dirige mi vista hacia el equipo de Lacrosse, no la veía; pero si pude reconocer al tipo alto con el que ella estaba hace un rato, tenía la insignia de capitán, no le podía ver la cara, estaba de espaldas y permanecía así.
Llegamos con el equipo, todos me rodearon, no había pasado tanto tiempo sin estar con ellos, o al menos eso creía yo.

-¡Thompson, Thompson, Thompson!- cantaron todos al unísono.

-Hace mucho no estabas por aquí, o con nosotros Thompson- Collins se acercó a mí- bienvenido de nuevo- me abrazó.

El abrazó de Collins me tomo muy por sorpresa. No supe que hacer, o decir. Solo correspondía a su amigable abrazo y sonreí. Luego de esto, el equipo de Lacrosse empezó a gritar.

-¡Jax! ¡Jax! ¡Jax!- animaban con mucho a liento, sabía perfectamente de quién hablaban, de ella, mire rápidamente al otro lado de la cancha y seguía sin poder verla.

-¡¿Pueden hacer un poco de silencio?! ¡Intentamos entrenar!- bromeo Cox.

El equipo de Lacrosse y el de Futbol se llevaban excepcionalmente bien, solo que a Cox le gustaba bromear con ellos, creo que solo lo hacía por querer llamar la atención de Sofía. En ese instante el tipo alto con la insignia de capitán dio la vuelta sonriendo. Él… Él era con el que iba Sofía. No pude evitar pensar que podía ser su novio, aunque Sofía ya se haya besado conmigo.

Podía ser que Sofía este jugando conmigo, que solo me esté usando para hacer el estúpido trabajo.
“Mierda” dije dentro de mí, me empecé a sentir peor, me estaba lastimando absurdamente.
Volví a mirar al equipo de Lacrosse que se reían muy animadamente, mire al chico alto, lucía esplendido, muy cálido, muy amable, muy guapo, podía entender porque estaba con Sofía.
¿Pero qué mierdas me pasa? ¿Por qué me pone tan mal que este con Sofía? No podía… No… Estaba ¿celoso…? No.
De repente, salí de mis pensamientos viendo como una chica preciosa se situaba  justo al lado de él. Sofía, sonreía divertida, estaba preciosa, su coleta andaba un poco despeinada, sus mejillas tenían un suave sonrojo, ella no parecía ser de esas chicas que anda jugando con los hombres, no, ella no era así, no podía besarme y hacer que le importé teniendo a otro, ella es tan dulce y tan… Tan ella, tan inocente.
En su mano, había una botella de agua, la cual tomaba de a pequeños sorbos, deteniéndose para reír.
En ese instante se me ocurrió una idea. Dije que me vengaría de ella por lo que me hizo hoy, por dejarme ahí debajo del árbol; y sabía perfectamente cómo hacerlo.

Narra Sofía

Pasaron al redor de dos horas escuchando las absurdas bromas de uno de los del equipo de futbol mientras entrenábamos. Al terminar, volví a tomar mi botella de agua, me despedí del equipo y salí de la cancha para irme a cambiar. Voltee a ver a Harry quien también me miraba, me guiño un ojo y yo me sonroje levemente.
Terminé de darme una ducha y cambiarme, al salir de nuevo al pasillo estaba el equipo de futbol, se dirigían a sus vestidores. Mire a Harry, y una corriente paso por mi cuerpo, estaba solo en pantaloneta y sin camisa, me sonroje al verlo, y baje la mirada dirigiéndome a la entrada.
Al caminar, escuche el los suspiros de las chicas, muchas de ellas veían y
señalaban a Harry, no pude evitar sentirme un poco celosa, aunque si era absurdo sentirme así, al fin solo estábamos juntos por un estúpido trabajo, empecé a caminar con más rapidez hacia la entrada, ya no soportaba más el ambiente, me sentía incomoda y no quería escuchar lo que decían de él.
Casi llegando a la entrada, alguien tomo mi brazo haciendo que girara bruscamente, levante la vista y ahí estaba Harry, mirándome sonriente.

“Es tan lindo… ¿Por qué tienes que tener tantos encantos?”

-¿A dónde vas?- dijo sacándome de mis pensamientos.

A casa- respondí aun mirando sus preciosos ojos.

-¿Y el trabajo?

-Mañana continuaremos, ahora estoy cansada y tú no te has duchado.

-¿Te molesta que no me haya duchado?- sonrió divertido.

-No… Yo… Mañana continuamos- dije dando media vuelta de nuevo- además creoque deberías atender a tus fans- solté.

-¿Qué dijiste?

“Mierda…”

-Nada- volvió a tomar mi brazo.

-¿Qué acabas de decir Sofía Collins?- aun sonreía divertido pero su mirada se estaba tornando oscura.

-Ya te dije que nada- dije intentando soltarme de su agarre- ahora si me disculpas, me voy.

-No señorita, tu no vas a ningún lado.

-Pero- me interrumpió.

-Quédate aquí- dijo- voy por mis cosas, si te vas me voy a enojar.

Asentí levemente, y lo vi alejarse. Y me quede ahí, esperándolo, viendo como todas las chicas se lo comían con la mirada, no soportaba eso, aunque no podía estar o sentirme celosa, no era lógico, no…

-Bien, vamos- dijo Harry
interrumpiendo mis pensamientos.

-No te duchaste- volví a decir.

-No, lo haré en casa- sonrió.

Baje la mirada y me sentía tranquila, a lo mejor las chicas que se lo comían con la mirada me odian o me odiarían porque el anda conmigo. Pero el tenerlo cerca y tenerlo conmigo me hacía sentir tranquila, me hacía sentir bien.