Dangerous Promise ◌ ChanBaek ♞

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Capítulo 40: Se acabó..
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El sonido del disparo se escuchó por todo el terreno, alertando a algunos subordinados de ambos bardos quienes no dudaron en acercarse a donde ellos estaban. Nadie se esperaba la siguiente escena.

Baekhyun juró que toda su sangre se congeló en ese mismo instante, su sorpresa fue tan grande que sus ojos se abrieron de par en par y de su boca salió un jadeo insonoro. De un momento a otro perdió todo control sobre su cuerpo. La pesada arma se resbaló de sus manos cayendo al suelo, sus piernas flaquearon, y estuvo seguro de que iba a caer en la tierra seca por la falta de fuerza pero justo en ese momento Chanyeol lo alcanzó a zancadas, atrapándolo de la cintura y ocultándolo con su espalda para hacerle ver hacia otra dirección que no fuera el cuerpo agonizante de Chung-Ho tirado en el suelo. Pero Baekhyun ya lo había visto en vivo, la imagen más clara en su cabeza de la bala traspasando hasta dejar sin vida a su verdadero progenitor.

El cuerpo de Chung-Ho impactó contra el suelo, la sangre iba manchando en grandes cantidades por toda su cara y ropa, la tierra a su alrededor de un momento a otro se convirtió en un charco rojizo que dejó marcada la muerte del gran jefe. 

Chanyeol estaba sin habla, no podía decir ni una sola oración porque al parecer todas las palabras se atoraban en su garganta ante cada intento. Tenía miedo, un terrible miedo porque entre sus brazos Baekhyun no dejaba de apretarlo y morder su hombro cómo si estuviera luchando internamente consigo mismo a gritos, ya que de su boca no salía ni un sólo sonido. Por otro lado estaba su bebé, no tenía ni una puta idea de qué demonios había hecho Baekhyun para meterse a una pelea tan peligrosa. Pero no podían estarse arriesgando, el doctor ya les había dicho sobre el riesgo que tuvo con el ataque imprevisto de MinJae, no tenía las capacidades para estar jugando a las sorpresas.

Se creó un silencio lúgubre entre todos, nadie dijo nada y  los hombres junto a las mujeres que anteriormente peleaban los unos con los otros, dejaron de hacerlo. Llamando la atención de Chanyeol y Baekhyun cuando la mano derecha de Chung-Ho tiró su arma contra el suelo, el mismo sujeto quién había lanzado la bala directo a su cabeza; luego todos los subordinados por parte de éste hicieron lo mismo. Desbocando al escuadrón de Chanyeol porque no entendían ni un carajo de lo que pasaba. Pero no iba a ser bueno.

Incluso Michaela quien les sostenía la mirada desde las colinas se alejó de la mirilla del fusil con el ceño fruncido. 

—Fue un total cabrón con todos nosotros, pero nunca nos dejó de lado.—comenzó a hablar el sujeto que solía acompañar a Chung-Ho a todos lados. Era alto, con unos brazos muy bien proporcionados de músculos y un cabello anaranjado que lo hacía destacar entre todos. Mejor dicho se le conocía por lo mismo. 

Salió de entre los arbustos para darse a conocer, y estuvo a punto de continuar cuando Chanyeol le apuntó con el arma en la cabeza. En tanto a Baekhyun no hizo ni siquiera un esfuerzo por limpiar las lágrimas en sus ojos, que cuando levantó la mirada hacia el escolta de su padre, lo enfrentó con unos ojos llenos de frialdad.

—Dejó una última petición. Tienes que saberla.—se empeñó en decir el sujeto, viendo a los ojos a Chanyeol con suplica porque a diferencia de Baekhyun, el otro tenía una mirada más psicópata y estoica. Lo cual era una total mierda porque iban a enfrentarse pero no tenía otra alternativa. 

—Habla.

Demandó en su lugar, Baekhyun.

El peli-naranja se aclaró la garganta, comenzando a hablar en voz alta para que todos los presentes escucharan lo que tenía por decir.—Nadie va a meterse más con la familia Park. De ahora en adelante toda nuestra unidad queda bajo las órdenes del hijo de nuestro jefe.., Byun Baekhyun. Quién se rehúse o intente hacerle algo, será sentenciado a la muerte sobre las órdenes de Chung-Ho.