Dangerous Promise ◌ ChanBaek ♞

♖

Capítulo 1: Recuerdo.

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« Dieciocho Años Después »

Las personas corrían o caminaban por todos lados y pasillos que pudiesen constituir a ese aeropuerto. Algunas con prisas, y otras con tranquilidad rodando sus respectivos equipajes o paquetes para llevar a bordo con el siguiente vuelo. 

—Mamá ya te dije que no debes preocuparte por mí, estaré bien ¿Si?—respondió Baekhyun para el remitente tras la línea telefónica.

Habían pasado dieciocho años desde ese entonces, el aún rubio ya no era aquel pequeño niño que se había conocido en Seúl. 

Ahora era todo un joven en su etapa de la adultez, sin embargo no perdía ese encanto infantil que poseía. Pues su rostro seguía casi intacto al poseer aún de la tersidad y suavidad en su piel, la piel blanca que acentuaba ese enigmático color de cada pieza en su estructura. Los ojos brillantes cual soles al amanecer, relucientes canicas traslúcidas. Labios rosa al natural, tendiendo a ser un poco más matizados cuando la presión que ejercía con sus dientes se aumentaba. Pequeño pero fino mentón, mejillas rellenas a la forma indicada, la piel libre de imperfecciones o grietas de vejez. Prácticamente se podía considerarle como la clara definición de lo que muchos llaman, Perfección.

Su figura delgada y curvilínea caminaba con pasos lentos en dirección a las sillas plásticas de espera, en donde tras llegar tomó asiento con su equipaje al lado para asegurarse de no perderle. Con el teléfono en mano y una madre preocupada por su partida hacía otro distrito; Baekhyun se limitó a volver escuchar:

—Pero amor, ¿Qué pasa si te sucede algo allí?—cuestionó su madre sobre protectora.

—Ya estuve aquí cuando era un niño, no creo perderme.—respondió un tanto cansino por seguir con el mismo tema desde que había bajado del transporte aéreo.

—¡Pero eso fue hace mucho! No conoces como esta la ciudad ahora, o en donde están los restaurantes ¿Y si te roban el equipaje mientras vas por la calle? 

—¡Mamá todo estará bien! Sehun pasará por mí en el aeropuerto, él conoce bien la ciudad y además tú sabes que es policía por lo tanto dudo me suceda algo estando con él.—exclamó bajito.

—¿¡Mocoso a quien crees que le estas hablando para usar ese tonito!?—moduló un tanto enojada la mujer tras la línea.

—Lo siento mami querida..—murmuró Baekhyun, sabiendo que con usar palabras bonitas podía convencer a su madre con facilidad.

—Está bien mi bizcochito, cuídate y dile a tu novio que aún quiero a mi hijo con vida ya que en cuanto te suceda algo juro que viajo desde Bucheon hasta Seúl, solo para asesinar a ese tipo que tienes cómo prometido.

—A sus ordenes.—comentó el contrario riéndose al momento de hacerlo, pues así era su relación con su madre. Tonta pero a la vez cordial.

Después de un par de palabras más como la despedida, Baekhyun colgó la llamada y guardó su teléfono en el bolsillo trasero mientras la espera de su prometido se hacía su espacio de tiempo. Aburrido observó un poco el enorme ventanal frente a las sillas del recinto, donde la luz se colaba con facilidad entre la pared acristalada.

No había estado en ese lugar desde hace dieciocho años atrás, él aún recordaba el último día en la ciudad. Era un seis de Junio cuando jugaba con su mejor amigo en ese tiempo a perseguir el balón, un juego un tanto cliché pero divertido. Todo había pasado de forma extraña, luego de ese día sin imaginárselo su madre lo había llevado a vivir a otro distrito desconocido para él, pero para la mujer no, ya que era su ciudad natal de nacimiento.