8. La perdición.

2.2K 99 31
                                    

Clara.

02 de septiembre.

Entro a mi habitación después de que Aaron me dejara en casa cuando mis padres llegaron por la tarde.

Dejo todo en la cama saliendo a fumar al balcón.

En la mesa hay un jarrón largo de cristal con una Rosa Blanca, la cual tiene una nota.

La abro.

"Princesa, te escribo desde Rusia, no sé si sabrás quién soy, tampoco sé si te acordarás de mí, de los momentos que pasamos juntos, de los 6 años que tuve la posibilidad de estar a tu lado.

Yo sí que lo recuerdo, y ahora que estamos en las condiciones que estamos, he decidido contactarme contigo.

Supuse que sabrías al menos que soy de la familia por la Rosa Blanca, la flor que nos simboliza a los Santos.

Oh, perdóname, no me he presentado como debía, soy tu tío Francis Santos.

Supongo que habrás escuchado sobre el secuestro de tu abuela. Y sobre que últimamente no hablo mucho con vosotros. Pero dadas las circunstancias, he decidido volver a los Ángeles a ayudar con el caso en el que nos encontramos.

¿Sabes? Tienes dos primitos pequeños, Bela y Oleg Santos Zakharov, como lees, estoy comprometido con la Dama de la mafia rusa. La mujer más dulce y más tarada que he conocido en toda mi vida.

Espero que tú al menos me comprendas, sé que eres jóven y supongo que todavía no habrá ocurrido y no lo habrás experimentado, pero espero que tú al menos comprendas que me enamoré.

Según la familia, de la mujer equivocada, pero yo estoy muy seguro de que es la correcta.

Te dejo de contar mi vida porque supongo que no te importa y porque prefiero hacerlo en persona. Nos vemos mañana, en un día estoy aquí.

Pd: Díselo a tu padre.

Besos de tú tío"

Me quedo perpleja por lo que acabo de leer, mafia, enamorado, hijos, primos, rusia... ¿Que?

No entiendo nada y decido bajar al comedor con mis padres para darles la carta.

Cuando me ven bajar las escaleras lentamente se preocupan.

-¿Que pasa Clara? -Me pregunta mi padre.

-He... He recibido una carta de... ¿De mi tío?

-¿Que?

Mi padre no sabe que responder y me arrebata la carta leyéndola en alto.

-¡Maldito cabrón! Se va y decide venir sin avisar. -Dice.

-Relájate cariño, es tu hermano. -Le pide mi madre.

-Desaparece más de 20 años y se presenta diciendo que está casado con la dama de la mafia, que tiene dos hijos con su apellido y que está enamorado. ¡Enamorado! ¿¡Pero qué dice, qué coño dice, se le ha ido la pinza!?

De repente se escucha el timbre y Carla se acerca para abrir.

No se escucha a nadie, tan sólo pasos viniendo.

-Este hombre está fat-

-Hermanito. -Se escucha detrás. Los cuatro nos giramos apreciando a un hombre fornido y atractivo, de pelo castaño y ojos oscuros.

-¿Francis? -Pregunta.

-El mismo.

-Pero si llegabas mañana.

Destrúyeme [En Proceso]Where stories live. Discover now