Demasiado Indomable, Demasiado Salvaje [Traducción ESP]

Capítulo 25 : ¿Dónde está Wei Ying?

Lan Wangji estaba casi triste cuando tuvo que maniobrar la espada hacia abajo, en las afueras de la ciudad. Se estaba haciendo tarde y todavía tenían que recoger todas las comisiones y regresar a los túmulos funerarios antes de que oscureciera, le había prometido a Wen Ning que regresarían para entonces. Tampoco quería dejar a los niños hambrientos por más tiempo, tenían que entregar más comida lo antes posible.

Sin embargo, lamentó un poco no poder mostrarle más al chico. Estaba claro que Wei Ying estaba en la luna de felicidad y emoción mientras volaban sobre los túmulos funerarios y luego un poco alrededor de la ciudad. Lan Wangji recordó lo emocionado que estaba cuando aprendió a manejar una espada. A lo largo de los años, se había convertido solo en un medio de viaje para él, pero para Wei Ying, todavía era nuevo y tenía toda la magia que alguna vez tuvo para todos.

Los ojos del niño aún estaban muy abiertos y emocionados cuando Lan Wangji lo soltó y saltó al suelo sólido. Algunos discípulos se habían estado enfermando después de sus primeros intentos, pero no parecía ser el caso de Wei Ying, se veía perfectamente bien y listo para ir a la ciudad. Todavía estaba charlando y maravillado por lo que acababa de pasar, Lan Wangji sonriendo ante sus palabras y asintiendo con la cabeza cuando era necesario.

No se estaba metiendo en la conversación con Wei Ying ya que su mente estaba completamente ocupada por otra cosa. Le había prometido al niño que la gente de la ciudad no lo reconocería, pero casi había olvidado en ese momento que la nueva túnica que había querido que Wei Ying usara era una de sus comisiones y primero tendría que ir a recogerla.

Wei Ying ahora estaba parado frente a las primeras casas de la ciudad y visiblemente no podía esperar para entrar. Saltaba arriba y abajo en su lugar y miraba a Lan Wangji con expectación. Estaba claro que no quería entrar solo.

Lan Wangji suspiró internamente, tenía que ir a recoger la bata él mismo mientras el chico lo esperaría aquí. Se habría llevado a Wei Ying con él sin pensarlo dos veces si hubiera creído que el chico no sería reconocido y que la gente del pueblo no se volvería contra él; Desafortunadamente, no estaba convencido de que ese sería el caso, por lo que Wei Ying tendría que esperar aquí. Solo podía esperar tener la paciencia necesaria para hacerlo.

Se volvió hacia el niño y lo miró con una expresión seria: "Wei Ying, por favor espere aquí un momento, iré a buscar una bata nueva para usted".

El chico lo observó por un segundo, también muy serio. Luego asintió con la cabeza, la comprensión floreció en sus ojos cuando preguntó, un poco inseguro: "¿Volverás por mí?"

“Mn,” Lan Wangji asintió solemnemente.

"Está bien, te esperaré".

Lan Wangji entrecerró los ojos un poco, todavía un poco dudoso de que esto fuera realmente una buena idea. ¿Quizás podría llevarse al chico con él después de todo? La gente del pueblo no había sido más que respetuosa con él, seguramente si el chico caminaba a su lado, no intentarían ahuyentarlo. Sin embargo, era demasiado arriesgado confiar solo en su reputación. Si esta visita no iba bien, Lan Wangji temía que Wei Ying no fuera tan enmendado como para salir de los túmulos funerarios en el futuro, ni siquiera hablar de llevarse a los niños con él.

Para probar sus palabras, el niño le sonrió y se dejó caer en el suelo donde estaba, sentado allí como si fuera lo más natural que se podía hacer. Lan Wangji le dio una última mirada y prometió solemnemente: "Vuelvo enseguida". Wei Ying asintió y se puso más cómodo.

Lan Wangji no perdió ni un segundo más y se apresuró a entrar en la ciudad. Había encontrado el puesto donde había encargado las túnicas para los niños con bastante facilidad, todavía estaba en el mismo lugar que esta mañana; no es que hubiera esperado que fuera en ningún otro lugar. La única diferencia era que ahora había varias personas, todas desempaquetando paquetes de tela de un carrito y colocándolos junto al puesto bajo la atenta mirada del vendedor.

La mujer reconoció de inmediato a Lan Wangji y, por supuesto, lo haría cuando él colocó una gran comisión unas horas antes e incluso dejó la mitad del pago por adelantado. Ella se inclinó respetuosamente y él asintió en respuesta.

“Honorable Hanguang-Jun, hemos preparado todo lo que ha pedido. ¿Quiere comprobar la mercancía? Son nuestras mejores piezas, duraderas y cálidas ".

Lan Wangji dejó de escucharla después de esas palabras mientras continuaba elogiando la ropa que uno de los otros hombres le mostraba ahora. No quería parecer grosero, pero no tenía demasiado tiempo para complacer al vendedor y escuchar su charla de negocios, tenía que volver con Wei Ying. Temía que si el chico perdía la paciencia, pudiera hacer algo tonto por puro aburrimiento.

Hizo un gesto hacia la mujer para que dejara de hablar. Sabía que probablemente debería haber comenzado a regatear, ella esperaba que lo hiciera, por eso estaba elogiando tanto la mercancía. Sin embargo, a Lan Wangji no le importaba demasiado el premio. Las túnicas parecían de una calidad lo suficientemente alta como para poder durar un tiempo, incluso en los túmulos funerarios. No le importaba pagar un poco más por los servicios del vendedor.

Sacó su bolsa de dinero y le dio a la mujer el resto de la suma previamente acordada. Los ojos de la mujer se agrandaron y rápidamente se inclinó ante él, al igual que todos los demás ayudantes. Luego les dijo que pusieran todas las túnicas en un solo lugar y las metieran en su bolsa de qiakun, aparte para una. El último era rojo y negro y asumió que era lo suficientemente parecido al tamaño de Wei Ying para poder usarlo. Agradeció al vendedor y, con la bata en brazos, se dirigió de regreso al lugar donde lo esperaba el niño.

O más bien se suponía que realmente lo estaba esperando, porque cuando salió de la ciudad, Wei Ying no estaba a la vista.

Inmediatamente entró en pánico, temiendo lo peor. ¿Y si alguien hubiera descubierto al niño y lo hubiera ahuyentado? ¿O qué pasaría si la gente de la ciudad finalmente hubiera tenido suficiente y decidiera no intentar disuadir a Wei Ying de venir a la ciudad, sino encarcelarlo? ¿Qué pasaría si se dieran cuenta de que era un cultivador demoníaco y quisieran venderlo a una de las sectas de cultivo?

Lan Wangji respiró hondo para calmarse. A pesar de que su mente ofrecía los peores escenarios, esos eran poco probables. No veía signos de lucha ni había escuchado gritos. Era más probable que Wei Ying se hubiera aburrido como temía y hubiera regresado a los túmulos funerarios o hubiera decidido ir a la ciudad solo, posiblemente buscándolo.

Lan Wangji cedió a sus instintos que le decían que el chico, tan emocionado por la visita como lo había estado, no habría regresado por su cuenta. Eso dejaba solo la otra opción. Lan Wangji giró sobre sus talones, la túnica todavía en sus brazos, y se sumergió de nuevo en el alboroto de la ciudad, buscando a su alrededor la familiar figura vestida de negro o la cinta roja de Wei Ying ondeando en el viento.