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Sus ojos inyectados en sangre dejaban ver lo furioso que estaba, su caja torácica se expandía con cada respiración que daba, sus dorados iris nunca se apartaron de ella, analizaba la situación, el ambiente, el panorama.

Ella quería escapar, eso lo dedujo muy bien, su agitada respiración le decía que había corrido todo el camino hasta aquí, su ropa mal colocada y su despeinado cabello..todo de ella decía que quería huir de él..pero no lo iba a permitir.

Lucía podía observar la maldad en él, esa aura maligna que desprendía por cada poro de su piel, como sus puños se apretaban debido a la fuerza que ejercía..debía alejarse sino quería morir lenta y dolorosamente.

- Lucía....

Su tétrica y gruesa voz diciendo su nombre le helaba la piel, el miedo se apoderó de ella una vez haciendo que hiciera lo primero que le decía su instinto de supervivencia.

Correr

Cómo pudo dió media vuelta obligando a sus piernas a moverse dispuesta a alejarse de aquel siniestro hombre, era como una pesadilla, toda su vida la vió en cámara lenta, su mente le jugó una mala pasada llevándola a su pasado, en esos días dónde era feliz con su madre, cuando no sabía de la existencia de esas sanguinarias criaturas..esos días cuando podía ser ella misma.

Creía que conocía a Víktor, cuan arrepentida estaba de engañarse a ella misma, ese hombre era un monstruo sin corazón, sin una pizca de humanidad, todo lo que lo rodeaba era puro egoísmo y maldad.

Corría lo más rápido que sus piernas se lo permitían, pensaba que estaba alcanzando la anhelada libertad, un peso en su espalda la hizo perder el equilibrio haciendo que cayera al duro suelo lastimándose en el proceso.

Una agitada respiración rozó su oído enviándole escalofríos por todo el cuerpo, sus lágrimas se acumularon en sus ojos, se maldecía lo débil que era, como no podía escapar de aquel ser.

- No te dejaré irte Lucía - susurró en su oído - sobre mi cadáver!!

El llanto se hizo presente por parte de ella, la había alcanzado y abalanzado sobre ella impidiendo su escape, de repente dejó de sentir el peso sobre su espalda sintiendo un gran alivio y segundos después su cuerpo fue alzado como un costal de papas quedando en el hombro de Víktor.

Víktor comenzó a caminar hacia su auto, dónde una vez cerca de este lanzó a Lucía cómo Basurto contra el asiento del copiloto, cerrando la puerta de un portazo y poniendo el seguro, rodeó el coche e ingresó molesto a este realizando la misma acción de hace unos minutos.

El silencio reinó entre ambos, ninguno se atrevía a dar el primer paso, los sollozos de Lucía era el único sonido allí presente, Víktor llevó un cigarrillo a sus labios encendiéndolo con las cerillas inhalando aquel tóxico pero adictivo humo, la mirada de Lucía se dirigió hacia él con disimulo observándolo, quería hablar, preguntarle el porqué de sus acciones...pero no se atrevía.

- Dentro de poco será luna llena - soltó - con ello mi transformación y justo después mi celo....

Cambió drásticamente de tema, era como si nada de lo anterior hubiera pasado y ahora tuvieran una simple charla de amigos.

- Por qué? - soltó Lucía después del silencio - por qué me haces esto?

Sollozó cuando sintió la mano de Víktor en su muslo dando suaves caricias, Víktor lanzó el cigarrillo fuera del auto justo para después darle toda su atención a Lucía.

- Eres mi mujer - apretó su muslo - pasaste la prueba - sonrió - eres toda una guerrera...

- Eres un monstruo! - gritó furiosa - un sádico..todo fue obra tuya!!

Intentó alejarlo de ella lanzando golpes con sus manos, golpes que fueron retenidos por él, Víktor sujetó con fuerza sus manos impidiendo que continuara golpeándolo, con una de sus manos agarró ambas manos de Lucía mientras que con la otra sujetaba fuertemente su mentón haciendo que lo mirara.

- Dices que soy un monstruo! - gruñó cerca de su rostro - no sabes nada de mí Lucía - hizo una pausa - no sabes una mierda de mí...

La soltó bruscamente a la vez que encendía el auto y se ponía en marcha hacia algún lugar desconocido para ella, Lucía se alejó de él lo más que pudo pegando su cuerpo hacia la puerta, giró su rostro hacia la ventana observando el paisaje.

Estaba nerviosa, mordía su labio de vez en cuando, jugaba con sus sudorosas manos, no sabía qué hacer, cómo pudo fijarse en un hombre como Víktor, cuanto se arrepentía de haberlo conocido...ahora no podía escapar de él...se había obsesionado con ella.

Cada vez oscurecía más hasta el punto de no poder ver bien la carretera, no sabía en donde se encontraba pero al juzgar por los cuervos y árboles diría que en un bosque.

Sus sentidos se pusieron en alerta, la había sacado de la ciudad y llevado a un bosque para pretender asesinarla?

Aquella incógnita giraba en su mente sin dejarla encontrar la calma.

De un momento a otro Víktor detuvo el auto quedando todo en total silencio, el ruido que hizo el asiento le indicó que Víktor se había movido, Lucía cerró los ojos cuando su mano se posó en su mejilla repartiendo suaves caricias y sin ella esperarlo sintió sus labios sobre su frente.

- Volveré enseguida - la miró - no hagas nada estúpido...

Y sin más que añadir salió del auto adentrándose en el denso bosque, una vez que Lucía perdió de vista su cuerpo su cerebro comenzó a maquinar como salir del auto y huir de ese psicópata, tan rápido como pudo se dirigió hacia la puerta del piloto por donde había salido Víktor.

El sonido del picaporte accionado eliminó toda tensión y agonía de su cuerpo.

Había dejado la puerta abierta....

Retiró el cabello de su rostro a la vez que secaba sus sudorosas manos en su chaqueta, abrió la puerta con cuidado manteniendo sus sentidos en alerta, salió del auto dónde la recibió el frió de la noche, la densa niebla no la dejaba ver más allá de sus narices pero nada de eso le importó cuando emprendió camino lejos de aquel lujoso auto.

Cada paso que daba era como si la estuvieran observando, se sentía asechada, abrazó su cuerpo intentando de brindarse calor ella misma, unas risas la hizo detener su andar, sentía que estaba dando vueltas en círculos, comenzó a sudar frió, aquellas risas no eran normales..había cierto toque diabólico en ella.

Unas pisadas se escuchaban a sus espaldas que cada vez se acercaban más a ella, el pánico se adueñó de ella comenzando a correr con todas sus fuerzas.

- Lucía.... Lucía.... Lucía....

Voces diciendo su nombre, llamándola, no sabía si su cordura duraría mucho pues se estaban encargando de acabar con ella poco a poco.

Mientras en lo profundo del bosque dos sujetos observaban el panorama de la pobre chica de manera divertida, les gustaba causar esa clase de temor en las personas... él quería corromperla, acabar con su cordura, era demasiado buena para alguien del infierno como él.

- No crees que ya es demasiado - sugirió - la pobre chica no aguantará por mucho su estabilidad emocional

Una sonrisa por parte del contrario detuvo el hablar de su amigo.

- Es lo que estoy buscando - deslizó la lengua por su labio inferior - verla fuera de sus cabales...quiero ver la forma más salvaje y enloquecida de ella...

Fue lo último que se planteó entre ellos siendo aquellos ojos dorados el predominante, amo y señor de esa noche.

- No podrás huir de mí.....mi Caperucita
































Continuará......







" Los secretos de una Bestia " ||1er Libro ✔️Where stories live. Discover now