Pequeña travesura

No te molestes con Qinghua

Omegaverse

Viajar al norte del país resulta ser un tanto satisfactorio para Shen Yuan quien ha estado esperando este viaje por varias semanas. La larga espera está por llegar a su fin, pensar que está a tan solo minutos de cambiar el rumbo que ha tomado su vida, probablemente las cosas cambien y pueda disfrutar de una vida libre de restricciones.

El cosquilleo en su estómago, la somnolencia recorriendo sus ojos por la ansiedad, esos nervios recorriendo cada parte de su cuerpo como un escalofrió interminable, encontrarse con el que posiblemente sea su persona destinada.

Hace algunos meses atrás, conoció a un chico demasiado guapo por medio de una página de citas, ese hombre fue el que mando el primer mensaje una sola mirada a la foto de perfil de él provocó que las piernas de Shen Yuan temblaran.

Al mirar con detalle la foto de aquel semejante hombre de rasgos hermosos y finos acelero indescriptiblemente su corazón, para Shen Yuan fue algo que no esperaba, conocer a alguien amable y tierno por medio de una página recomendada por su amigo que, aunque sea molesto le ayudó de manera indirecta en encontrar a una persona que no es para nada un loco, además le gustó la idea de viajar para poder conocerlo en persona.

Solo espera que ese chico no cambie de actitud o sea una farsa, deseando que sea todo lo que imagino y no termine por arrepentirse, yendo de regreso a su casa con la cabeza enterrada en sus hombros por una cita arruinada.

Debe demostrar que puede encontrar a una buena pareja, un alfa que no sea un cretino o idiota. Al principio quería conocer a un beta, dicen que ellos suelen ser más dulces y nobles al tener pareja, no como los alfas que son controladores, obsesivos y posesivos.

Los anteriores alfas que llego a conocer se comportaron como animales salvajes que solo deseaban poder enredarse en sus sabanas una noche para abandonarlo al día siguiente, un hecho que dejo malos recuerdos, además de una visión errónea de lo que significa ser un beta en un mundo donde te ven como un objeto.

Pensando en lo difícil que fue para Shen Yuan encontrar en esa tonta página de citas a un hombre decente, recordó que antes de esa persona hubo alguien que estuvo molestándolo por más de un mes causando que estuviera a nada de cerrar su cuenta y además de querer ir a gritarle a Shang Qinghua que lo iba a matar por hacerle perder el tiempo en tonterías.

Por alguna razón los tipos raros siempre se le acercan con intenciones ocultas, aunque él la mayoría de las veces no esta interesado, no puede negar que ha estado esperando por un príncipe azul que lo salve del palacio de hierro al que fue confinado por su hermano mayor.

Ahora que se encuentra en el aeropuerto espera que las fotos que le ha mandado el joven no sean más que edición. Su fresca piel de jade, sus ojos tan oscuros y hermosos, además de esa tenacidad al hablar lo han envuelto en una prospera imagen que espera sea verdad.

Las fotos mostraban a un joven alto de cabello medianamente largo, negro y liso, unos ojos encantadores y una sonrisa que puede hacer que las piernas colapsen con solo mirar fijamente a ese hombre, además de tener el cuerpo de un semental salido de una novela. Todo lo vuelve un alfa deseable para Shen Yuan.

La espera en el aeropuerto se va haciendo cada vez más larga y las esperanzas de Shen Yuan van disminuyendo progresivamente. Sentado en una banca en el sitio acordado se dijo a si mismo que esperara solo unos minutos más, si ese hombre no llega con todo el dolor en su corazón tomara sus cosas y va a ir a cualquier hotel decente para turistear por lo menos un par de días antes de regresar a casa.