POZO

846 142 22
                                    

SANTIAGO...

Observo la camioneta irse sintiendo una fuerte opresión en el pecho. Después de quince años sigue haciendo que mi interior se estremezca. Vuelvo a entrar a la casa encontrándome con Andrea que me observa molesta y dolida por lo que acaba de suceder.
- Lo siento – digo a lo que ella sonríe triste mientras sus ojos se llenan de lágrimas.
- Es tu infierno ¿verdad? – pregunta con dolor a lo que yo asiento con la cabeza – un infierno increíblemente hermoso – sin más se da la vuelta entrando de nuevo a la casa y yo la sigo abrazándola por la cintura.
- No significa nada – miento por que verla después de tanto tiempo me removió el mundo entero. Andrea se vuelve a verme molesta dándome una bofetada.
- Repítelo hasta que te lo creas – responde ella alejándome – pero no me mientas, porque lo que veo en tus ojos me duele.
- Lo siento, fue un momento de debilidad – digo abrazándola de nuevo – perdóname, te quiero muchísimo y no quiero perderte.
Un rato después Andrea se queda dormida y yo la observo sintiéndome como un imbécil por lo que sucedió hoy. Con sumo cuidado me levanto de la cama para luego salir de la habitación, camino hasta la cocina en busca de un poco de agua.
- Paso mucho tiempo – escucho la voz de mi hermano
- ¿sabías que estaría aquí? - pregunto sintiendo junto a mí.
- No, aunque hoy me reuní con ella en Madrid – habla haciendo que me vuelva a verlo – aún hay algo que debes saber...
- No quiero saberlo – respondo a lo que asiente con la cabeza, lo veo sonreír deslizando hacia mi algo sobre la mesa.
- Mira la sorpresa de mi esposa – dice con una enorme sonrisa en el rostro, tomo el papel dándome cuenta que se trata de una ecografía.
- Te felicito – digo viendo la ecografía en mi mano – no sabes la envidia que les tengo – me refiero a nuestra hermana que también se encuentra embarazada – siempre he querido ser padre.
- Lo sé, puede que con Andrea tengas hijos pronto – dice mi hermano a lo que yo asiento con la cabeza, aunque para mí solo hay una mujer con la que tendría hijos.
- ¿Fuiste tras ella? – pregunta mi hermano a lo que yo asiento con la cabeza.
- Solo quería verla – respondo bebiendo un poco de agua – una vez más, pero me arrepiento por que verla me hizo darme cuenta que sin importar lo que suceda o cuánto tiempo pase, siempre será ella.
- ¿quieren ir al pozo? – escuchamos la voz de Pavel tras nosotros – parece que necesitan distraerse.
- ¿pozo? – pregunto sorprendido
- Si, un lugar de peleas clandestinas – responde Alek llegando junto a Nikolay.
- Necesito golpear a alguien – respondo poniéndome de pie a lo que ellos asienten con la cabeza – voy a cambiarme – vuelvo rápidamente a la habitación donde me cambio rápidamente antes de ir a la entrada donde ya todos están listos.
Rápidamente los cinco nos subimos a una camioneta que se pone en marcha en segundos. Durante el camino hablamos del nuevo integrante de nuestras familias y lo feliz que nos hace a los cinco. Después de más o menos una hora de camino llegamos a una zona apartada de la ciudad, la camioneta se detiene frente a un abandonado.
- Interesante lugar – dice mi hermano mientras bajamos de la camioneta.
- Aún no han visto el interior – responde Pavel sonriendo mientras avanzamos entrando. Todo está completamente oscuro iluminado tenuemente por el fuego que crespita en botes de basura. Alek nos guía hasta que llegamos a un lugar varios pisos bajo tierra hasta un enorme espacio donde vemos que hay personas de pie rodeando una jaula.
Los cinco caminamos hasta ellos que al notar nuestra presencia nos abren camino observándonos como si fuéramos dioses. Caminamos hasta un muro donde nos sentamos observando la pelea que se desarrolla en este momento.
- Buenas noches señores – dice un hombre acercándose a nosotros
- Prepara una pelea para él – dice Nikolay palmeando mi hombro.
- Alguien fuerte – respondo mirando la pelea – necesito desahogarme.
En ese momento siento como mi mundo se detiene al ver a los Wang aparecer en el lugar, noto que un hombre se acerca a ellos para luego señalarnos.
- Esto debe de ser una broma – dice mi hermano haciéndome reír mientras niego con la cabeza.
- Yo queriendo pasar el resto de mi vida soltero – comienza hablar Pavel – pero por esa mujer hasta padrastro seria. – me vuelvo a verlo curioso notando que observa a Seri acercarse a nosotros junto a su hermano.
- ¿padrastro? - pregunto curioso a lo que mi hermano niega con la cabeza.
- Si, ella tiene un hijo – responde Alek observándome pensativo, pero sus palabras hacen que el pecho se me contraiga justo cuando los hermanos Wang llegan hasta nosotros – que pensándolo bien...
- Buenas noches – saludan al unísono, pero noto que ella me ignora por completo.
- ¿tampoco podían dormir? – pregunta Nikolay observándonos.
- Quiero distraerme – responde ella sonriendo. La escaneo con la mirada notando lo hermosa que se ve vestida con un conjunto deportivo negro y tenis blancos – quiero pelear.
- ¿Qué? – preguntamos todos al unísono
- Yo peleare contigo – digo haciendo que ella se vuelva a verme enarcando una ceja.
- Acepto – responde mirándome a los ojos de forma retadora
- Están locos – dice Sebastián poniéndose de pie junto a nosotros.
- Debemos enfrentar nuestro propio infierno – respondo mirándola a los ojos a o que ella asiente con la cabeza.
- No te contengas... 

BARATRODonde viven las historias. Descúbrelo ahora