𝐈 𝐇𝐀𝐓𝐄 𝐘𝐎𝐔, 𝐇𝐘𝐔𝐍𝐆 | 𝐦𝐢𝐧𝐣𝐞𝐨𝐧𝐠

8. CASUAL.

Holi. Tan sólo quiero aclarar que en este fic particularmente, la historia ronda principalmente entre Jeongin y Minho, siendo el resto de los personajes bastante secundarios (a excepción de uno), por lo que parece más un fic de dos personas que otra cosa (pero es intencional).

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Acto seguido fue comenzar a pasar más tiempo con Minho inconscientemente.

Era raro para Jeongin acostumbrarse a su presencia, más el mayor le daba muy buenos consejos en diferentes momentos del día.

Desde como responder a una chica por mensaje, hasta que foto subir a las redes para parecer más galán, Minho se había ocupado de darle un poco más de seguridad a su hermanastro.

Claro que en su relación seguían peleándose, y Lee continuaba haciendo las mismas estupideces con sus amigos de siempre.

Sin embargo, al cabo de unos tres días, las cosas dieron un giro inesperado.

Yang se despertó de buen humor, emocionado de que se reuniría con sus amigos a pasar la tarde juntos, pero su felicidad se esfumó al ver a Minho desplomado en el living de su hogar.

Este tenía el cabello desordenado y sus ropas hechas añicos, además de que su olor era una mezcla entre perfume y alcohol, que invadía todo el ambiente de la habitación.

Jeongin pensó que este se había drogado nuevamente, por lo que negó con la cabeza y a continuación, se acercó para poder despertarlo.

"Minho. Despierta." se puso de cuclillas al sofá en dónde estaba, notando que el mayor parecía también tener un moretón rojo en su ceja izquierda. "Minho... Qué hiciste?"

Jeongin bufó frunciendo sus cejas, no pudiendo entender por qué siempre el otro parecía meterse en líos cada vez que salía.

No obstante, el mayor procedió a abrir sus ojos despacio, haciendo contacto visual con él, terminando por fijar su vista en la suya.

"Estás bien?" Jeongin preguntó, ahora un poco más tranquilo, mientras este se sentaba en el lugar.

"Mi cabeza... Me duele..." Minho se tomó de ella con una mano, cerrando brevemente sus ojos, sintiendo molestia también en sus oídos.

"Debes dejar de tomar en exceso... No te hace bien." Jeongin se sentó a su lado sin ser consciente de ello, y a continuación posó su mano en la frente del otro, queriendo ver si había levantado fiebre. "Creo que te enfermaste."

El menor lo miró haciendo una mueca con su boca, más el otro se lo quedó viéndolo con confusión.

"Puede ser... No estuve muy abrigado ayer." Minho comenzó a decir, de repente tomando de la mano de Yang, sorprendiéndolo por ello. "Pero si tengo calor." aclaró suspirando, conduciendo esta al interior de su camisa, haciendo que su hermanastro tocara su torso desnudo.

Inmediatamente, Jeongin quiso apartarse, pero Minho fue más fuerte y terminó por hacerlo quedar encima suyo.

"Minho... Por favor suéltame." le pidió con pasividad en su voz, pero con preocupación en su cara.

De todas maneras, su hermanastro no le hizo caso y lo sujetó con más fuerza.

"Jeongin... A ti te caigo bien... Verdad?" Minho entrecerró sus ojos, apenas si viéndole, queriendo saber la respuesta de su pregunta. "Es decir... Te he estado ayudando así que nos hemos hecho más cercanos, no?"

El castaño insistió en su cuestionamiento, pero mantuvo su posición, estando debajo del otro, quién parecía haberse empezado a molestar por ello.

"Si, Minho. Me caes bien." Yang le respondió rápido, queriendo que su respuesta le permitiese zafarse de él.

Sólo que Lee terminó por tomar al otro, envolviéndolo con sus brazos en una especie de abrazo incómodo, en dónde casi todo el cuerpo de Jeongin descansaba sobre el de Minho.

Yang sintió el calor del mayor, y sostuvo la respiración al notar que la boca de este se encontraba a un milímetro de su cuello, haciéndole sentir un cosquilleo, erizándole la piel.

Afortunadamente, el peli negro pudo levantarse a los pocos segundos, sintiendo alivio por ello.

De todas formas, Minho sonrió, feliz.

"Es bueno que nos llevemos mejor..." opinó estirando sus palabras. "Después de todo somos familia."

El mayor se acostó nuevamente en el lugar, y Jeongin optó por dejarlo solo, queriendo poder huir de aquella repentina situación que lo había estresado.

Actúa así porque está enfermo... Enfermo y, todavía, borracho.

Yang pensó instantáneamente, regresando a su cuarto para poder hacer otra cosa.