Capítulo 10

227 44 54
                                    

'Unos días después de conocernos, nos besamos por primera vez. Recuerdo que después de aquello, empecé a cuestionarme si me había enamorado de él.

Hoy, con diez años más de vida y de experiencia, puedo responder con claridad a esa pregunta.

Sí, sin duda alguna.'

━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━

Se despertó temprano a la mañana siguiente, sin necesidad de que su madre lo llamase. Se sentía como flotando en una nube después de la noche anterior.

Taehyung le gustaba demasiado y por primera vez en su vida, no le daba miedo reconocerlo. A pesar de que se conocían de apenas unos días, lo hacía sentir mimado y protegido, y su corazón bombeaba más vivo de lo que jamás había estado en sus diecisiete años.

Estiró las sábanas con cuidado, se puso la camiseta del pijama y salió de la habitación en dirección a la cocina, para prepararse algo de desayunar.

- Buenos días, Jimin. - lo saludó su padrastro al verlo entrar. Estaba, como cada mañana, preparando el desayuno para su esposa.

- Buenos días, Wooseok. - le respondió él, con una somnolienta sonrisa, buscando un bol donde echar sus cereales.

- ¿Qué tal lo pasásteis anoche? ¿Todo bien con vuestros nuevos amigos? - Jimin trató de controlar los nervios que el tono de voz de su padrastro le producía. ¿Acaso intuía que él...? No, era imposible.

- Bien, la verdad es que genial. Vimos una película, jugamos a videojuegos y comimos pizza, como habrás visto. - le respondió señalando las cajas de cartón vacías junto a la basura.

- Me alegro mucho, hijo. Parecen buena gente los Kim. - le dijo su padrastro con una sonrisa, pasando junto a él con la bandeja en las manos. - Quizás demasiado libertinos para mi gusto, pero bueno...

Jimin se quedó en silencio, plantado en mitad de la cocina, tratando de entender a qué había venido esa frase. Le daba miedo pensar que Wooseok pudiera descubrir que le gustaban los chicos.

Si bien era cierto que nunca había escuchado ningún tipo de comentario homófobo o despectivo por parte de él o de su madre, tampoco era un tema que se tratase con naturalidad en la casa.

- Jin. - susurró, repentinamente, mientras volcaba la caja de cereales sobre el bol, recordando que su hermanastro estaba tan fuera de la norma como él. - Jin debe saber.

...

Estaba demasiado aburrido, su hermanastro aún dormía y su madre y Wooseok hacían cosas que no le interesaba lo más mínimo, así que decidió dar un paseo por las instalaciones del resort, a ver si con un poco de suerte se cruzaba con Taehyung.

Habían intercambiado los teléfonos la noche anterior, pero como ninguno de los dos tenía saldo, de poco les servía.

Pasó por delante de su apartamento un par de veces, dudando si debía llamar o no. Quizás Taehyung quería hacer cosas a solas y no estar todo el tiempo pegado a su culo. Pero, a pesar de sus dudas, sentía muchas ganas de verlo, así que se armó de valor y tocó la puerta.

Esperó unos minutos, pensando que quizás podrían estar ocupados, pero nadie abrió la puerta, así que intuyo que no estaban y ahí el pánico se apoderó de él, al darse cuenta de la realidad.

Taehyung se iría de Jeju, al igual que se iría él un día después. Su historia tenía fecha de caducidad, y no podía hacer nada para remediar eso.

El amor lo conocí en Jeju [Vmin]حيث تعيش القصص. اكتشف الآن