El amor lo conocí en Jeju [Vmin]

Capítulo 28

'El problema de experimentar la felicidad máxima, es que tarde o temprano te tocará bajar. Y la bajada es lo que más duele, sobre todo si viene de golpe y de forma inesperada. Así que si estás leyendo esto, Taehyung, esta es la parte de la historia que no conoces. Yo jamás quise separarme de ti, pero la vida a veces es demasiado cruel, espero que puedas entenderlo.'

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Se quedó despierto hasta ver el sol salir. Taehyung había caído rendido un rato atrás, pero él era incapaz de dormirse. Aunque hubieran hablado de mantener el contacto y visitarse, Jimin sabía que las cosas no serían tan fáciles y eso le preocupaba.

Sentía unas inmensas ganas de llorar, porque el inevitable momento de separarse de él estaba llegando, y aunque apenas habían pasado dos semanas juntos, era y siempre sería la persona que había cambiado su vida inesperadamente.

Taehyung le había hecho sentir el amor de una forma completamente distinta a la que estaba acostumbrado y conocía. Taehyung había provocado que un ejército de mariposas se quedasen a vivir de forma permanente en su estómago. Taehyung le había enseñado lo que significaba querer a alguien con la piel y el corazón.

Taehyung había sido su primer amor, su primera vez, y eso era algo que llevaría para siempre con él.

Porque la vida puede quitarte a las personas, sacarlas de tu camino y darles un nuevo rumbo, pero los recuerdos nadie puede borrarlos. Jamas. Y eso era lo único en lo que quería pensar, que pasará lo que pasara, los recuerdos de aquel verano en Jeju vivirían con él.

Cerró los ojos y dejó que las lágrimas salieran mientras lo apretaba con fuerza entre sus brazos. No quería volver a reprimir sus sentimientos aunque, siendo honesto, cuando se trataba de él, tampoco sabía como hacerlo.

- Por favor, no te olvides de mí. - le susurró, secándose las lágrimas para que no cayeran sobre él, con la absurda esperanza de que sus súplicas calaran en el subconsciente del rubio.

Lo que no sabía era que Taehyung se sentía exactamente igual que él.

...

Consiguió dormir un rato antes de que el señor Kim los despertase para desayunar, y lo hizo sentado a la mesa con ellos, como un miembro más de la familia.

Se había sentido muy cuidado por todos ellos, incluso por el silencioso Jungkook, que mas de una vez le había ofrecido un mando de su videoconsola, para que jugase con él y no sintiera vergüenza de estar allí.

- ¿Lo tenéis todo listo, chicos? - les preguntó la señora Kim, entrando en la cocina. Ambos primos asintieron mientras devoraban su desayuno. - Tú te iras mañana, ¿no Jimin?

- Sí, mañana por la mañana volveremos a Busán. - le respondió él, con una triste sonrisa que la madre de Taehyung captó al instante.

- ¿Vendrás a visitarnos algún día? - le preguntó, sentándose a su lado con la taza de café entre las manos.

- Claro, si a ustedes les parece bien. - la mujer soltó una carcajada y asintió con la cabeza.

- Nos encantaría que vengas, y seguro que a Taehyungie también. - el rubio sonrió y asintió dándole la razón a su madre.

- Por suerte, hoy en día con esto de los teléfonos podréis comunicaros bien. - añadió el señor Kim, que los había estado escuchando en silencio.

- Bueno... ¿Tienes saldo, Jimin? - le preguntó Taehyung con sorna. Sabía perfectamente que lo había gastado todo de nuevo llamándolo a él y a Hoseok.