Capitulo 24

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La respiración pesada, su boca entreabierta dejaba escapar el aire que denso que salía por el esfuerzo de correr y más aquella herida abierta en su brazo no ayudaba, Hanako salto hacia el otro extremo evitando no caerse en aquellas aguas putrefactas, aquellos seres le estaban siguiendo el paso.

Pero la pregunta aquí es ... ¿Cómo está viva?

No hace falta decir que había confiado en Akaza lo que al final fue un error muy grave que le estaba costando y es que ¿Cómo no confiar en él? Aquel chico se había abierto a ella dándole mucha información necesaria, claro a menos que todo lo que le haya dicho era una vil mentira.

La pelinegra se detuvo, apunto su arma de dotación hacia el frente, la criatura pálida y monstruosa corría como una araña por encima del techo o por los lados de las paredes, cuando vio que esa criatura saltaría al frente, sujeto su arma con fuerza y jalo del gatillo.

¡Bam!- se escucho

La bala se había alojado en el cráneo de la criatura, justo en el cerebro, aquella cosa cayo de bruces contra el piso empezando a convulsionar, su cuerpo reaccionaba a la plata de acero especial.

Y aquí viene la respuesta a la pregunta de hace momentos.

Hanako no era tonta, se había llevado por si acaso su arma y esas balas especiales que encontró aquella vez en el área de pruebas y objetos confiscados, que casualmente eran parte del proceso de detención de aquella extraña mafia.

El pequeño sonido de algo romperse llamo su atención, aquel demonio se despedazaba en mil fragmentos que parecían pequeñas motitas de ceniza.

Su boca forma una "o", su sorpresa era bastante grande, pero aquello no duro mucho pues el rugido gutural de otra criatura se escuchó, Hanako empezó otra vez a correr y tratar de encontrar una salida.

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Senjuro sujetaba a (nombre) de la mano, estaban sentados en aquel parque de la otra vez pero con la diferencia de que el no se iba a perder.

No de nuevo.

- ¿Esta rico? – le pregunto, el rubio parecía estar disfrutando del sabor a vainilla y chocolate de aquel dulce frio llamado helado era algo nuevo para el sobre todo porque aunque lo vendían en su época este nada mas estaba en la ciudad principal.

- ¡Esta muy rico! – dio un bocado grande a la bola de vainilla, rápidamente se llevó su mano a la cabeza al sentir frio en esta - ¡Ah! Esta frio –

-Si te lo comes muy rápido sentirás esa sensación le dicen cerebro congelado–

-Se siente muy raro ¿Por qué pasa eso? –

-Oh bueno... es una explicación simple la sensación que sientes ahora es debido a que las arterias de tu garganta aumentan su flujo por el frio y tu cerebro no puede sacar la sangre tan rápido como entro – dio una mordida a su helado - ¡Además! El dolor no proviene de tu cerebro proviene del ganglio efenoplatino –

Senjuro parpadeo aquella explicación no fue tan simple y no le había entendido ni pio

- ¿Cómo sabes eso? – le pregunto

(nombre) se quedó en silencio

Si... ¿Cómo sabia eso?

-Supongo que leí un articulo de internet por ahí – se alzó de hombros restándole importancia

-(nombre) – la llamo – ¿Alguna vez te has preguntado cómo es que nosotros nos conocemos? –

- ¿A qué te refieres? –

Two Souls  (Senjuro x Tu)Where stories live. Discover now