Two Souls (Senjuro x Tu)

Capitulo 26

Su corazón bombeaba como loco y sus piernas ya no daban para más, podía ver el cielo de la oscura noche llenarse de los reflejos de aquellos luces de la urbe central, dio un traspié cayendo al suelo de bruces y cuando cerro sus ojos para rezarle a cualquier Dios que la escuchara el quejido horroroso de aquel demonio se escuchó.

Hanako abrió sus ojos y pudo ver a un hombre empuñando una katana justo como aquellas personas de la organización que investigo, sus ojos vieron al demonio desvanecerse cuando su cabeza fue cortada.

Sanemi observo a aquella joven, estaba un poco desorientado, no hace poco paso por aquel portal perdiendo de vista a los 2 rubios, su mirada firme se suavizo al verla herida del brazo.

- ¿Estas bien? – pregunto guardando aquella arma en su vaina, la pelinegra asintió

Sanemi miro a su alrededor, el callejón húmedo y sucio era iluminado a penas por las luces neón de un establecimiento, su ceño se frunció la infinidad de gente que pasaba era abrumadora y a simple vista no podía adivinar quien era un enemigo o no.

-Oye...- llamo la pelinegra arrastrándose hasta quedar sentada cerca de la pared - Bonito uniforme – bromeo tratando de romper el hielo, sus manos se dirigieron hacia su camisa y arranco un retazo de la tela y amarro está cerca del brazo para hacer presión – Esta noche...es la peor de mi vida – apretó más el nudo – Eh...- sus ojos viajaron con nerviosismos hacia el peliblanco – Como mi salvador supongo que debo conocer tu nombre -

-No importa –

-Hombre difícil –

- ¿Dónde estamos? – pregunto dando un paso cerca de la luz, parpadeo varias veces al no acostumbrarse a los reflejos incandescentes –¿En qué año estamos? – corrigió su pregunta, no quería admitirlo pero la mocosa tenía razón

- Estamos en junio del 2019 – Hanako escucho el pequeño sonido de sorpresa que hizo, la pelinegra se quedó callada y pensó en la pregunta que el extraño le había hecho, alzo una ceja curiosa - Adivinare – soltó en broma - ¿Eres del pasado? -

Sanemi la observo en silencio y aquella mirada fue suficiente para darse cuenta que su pregunta no había sido un juego, su boca se abrió en una "o" y golpeo su cabeza con la palma de su mano.

- ¡Ja! Viajes en el tiempo...lo que faltaba –

Hanako se levanto con dificultad, sus piernas temblaron, el peliblanco rápidamente la agarro por debajo de su hombro y la apoyo cerca de el, la mirada de aquel hombre se dirigió hacia el rincón más oscuro del callejón observo rápidamente a aquella mujer

- ¿Puedes correr? – pregunto

- ¡Claro! – respondió con sarcasmo – deja que me acomode el hueso zafado ... ¡No puedo! – Sanemi chasqueo su lengua irritado, con un movimiento rápido y como si fuera un costal de papas la puso en su hombro - ¡Oye, bájame! – se quejó pero al ver el grupo de monstruos que se acercaban a ellos su rostro palideció - ¡No me bajes! Debes correr ¡Ahora! –

-No te cargue para huir –

- ¿Que? – la pelinegra fue cambiada de posición y ahora estaba detrás de la espalda de él agarrándose como podía de sus hombros – No estarás...- soltó asustada al ver como el extraño corría pero no corría hacia la dirección contraria, no, corría hacia aquellos monstruos - ¡Espera! - chillo

Sanemi era busco, si, no le importaba mucho o poco que la pobre estuviera prácticamente sujetándose con fuerza como si aquellos hombros fueran lo único que la ayudaban seguir con vida; el contrario desenvaino su katana con rapidez y de un movimiento como si fuera el mismísimo viento, aquellos monstruos encontraron su fin en aquellas habilidosas manos.