DISFUNCIONAL : 1918

Cap 5 : CAZA

Siento perfectamente el acero de la bala, abriéndose paso por mi carne, rasgando a su paso dejando solo una mancha roja, ensuciando mi ropa, sentía como mi respiración se corta en ese momento acompañado del susto. En eso veo un poco al cielo elevando mi mirada hacia uno de los techos de las casas, notando un hombre sosteniendo un rifle apuntándome.

En eso rápidamente corro hacia detrás de un árbol, aún con las manos en la herida, una bala a duras penas rosa mi espalda, mientras que otras solamente chocan contra el suelo. Ya en cobertura con una mano saco la escopeta de entre mi saco abriéndola e introduzco los dos cartuchos, escucho aún disparos, balas chocando contra la madera, levando el polvo, astillas y pedazos de corteza.

Entre mi respiración agitada y el dolor de la herida noto que unas luces se acercan. Dos personas, una de ellos, viste una gabardina café, una boina con patrón cuadriculado, un cubrebocas de cartón ocultando su cara, es más grande que yo casi como 1.87, portando en sus manos una escopeta winchester 1897, un clásico americano solo que en este caso en la punta del cañón lleva una bayoneta de acero.

El otro solamente lleva un chaleco ligero y pantalones de trabajo cubriendo su cara con un trapo algo largo, zapatos ligeros y un pantalón de trabajo en sus manos, noto guantes de cuero, una pistola F.N. Browning Mod.1900 y en la otra lo que creo que es un machete curvado reflejando la luz de las farolas.

—N-No quiero problem-más.

Dije nerviosa apuntando la escopeta al hombre de gabardina, siento mi pulso temblar y el dedo en el gatillo en frío acero acompañado de la luz de las farolas, escucho las pisadas lentas de ellos sobre el piso. Desvíe la escopeta apuntando el hombre del chaleco, ellos parecían calmados, sus respiraciones tranquilas y serenas, ni siquiera puedo escuchar sus corazones latiendo.

¿Por qué no puedo?

En lo que se acercan atormentada por el miedo y la presión, doy un paso hacia el frente apuntado aún la escopeta.

—LARGO DE AQUÍ, DÉJENME SOLA!.

—Demonio vil, tu sangre es el mal en esta tierra, infestado con plaga y sangre... una alimaña en la creación de Dios.

Declara el hombre de la gabardina elevando su escopeta y apuntándome, al igual que lo hizo el hombre de chaleco.

¿Alimaña?
Solo estoy enferma ¿No?...

—Q-Que? N-Necesitó ayuda... solamente estoy enferma.

Entre el sudor frío, una sensación de nudo en el cuello, el cuerpo atormentado por el miedo y la desesperación únicamente mirando el acero de las armas, no dan una sensación muy cómoda.

—SOY UNA PERSONA!.

Dije entre los nervios dando un paso hacia adelante a punto de jalar el gatillo contra el caballero de chaleco, hasta que en ese momento una bala impacta en mi codo haciendo que suelte la escopeta. En ese instante nada más veo el acero descender hacia mí, clavándose entre el hombro y cuello, aprovechando el momento el caballero de la gabardina con su bayoneta intenta apuñalarme.

Con mi mano intento cubrirme de la puñalada, resultando que la misma bayoneta perfore la palma de mi mano, para luego que la escopeta sea disparada destruyendo mi mano por completo. Solo admiro salir volando por el aire entre trozos de carne y hueso quedando una parte de mi pulgar y el dedo meñique, todo lo demás se esfumó.

Grito a los 4 vientos con todas mis fuerzas, entre las lágrimas y el dolor brutal, pero mi grito es interrumpido cuando el caballero de chaleco quita su machete de mí rasgando músculos en el proceso.

En un momento empujé a ambos hombre apartándolos de mí, en un momento de respuesta de "huir o pelear" salí corriendo con las fuerzas que tenía. Mi paso es lento, a duras penas podía ponerme en pie y mantenerme así, corro entre los pasillos oscuros mientras escucho las pisadas acercándose más y más.

Tire algunos botes de basura, cajas de madera o cualquier otra cosa que me pueda ayudar a retrasarlos entre los pasillos, con la mano intacta tomo la muñeca de la otra mano destrozada aumentando el paso cada vez más.

Por cada esquina que paso doy vuelta, desviando mi camino en cada esquina hasta que en punto determinado me detengo, sentía mi respiración agitada y rápida, al igual que escucho los latidos de mi propio corazón.

La garganta seca y la sed se hacen destacar otra vez, me recarguen contra la pared intentando calmar mi respiración, siento como sangre cae a choros de mi mano y de mi cuello. Quiero gritar y expirar el dolor, así que un momento de desesperación e improvisación, con la manga del saco usándola como mordaza y gritando con todas las fuerzas.

Necesito volver al refugio y rápido
¿Quiénes eran esos?...
¿Demonio vil?

¿Eso soy?
Esas personas
¿Prepararon ese camino de sangre?...

Parecían preparados como si ya lo esperaran de antes
Cuestionaré eso después
Primero lo primero...

Me quite mi saco como podía y también mi camisa revisando la herida entre el cuello y el hombro, brota sangre con fuego acompañado de un ardor en la misma herida. Es un corte profundo, dos agujeros de bala, daño al músculo interno, la arteria subclavia, venas y la clavícula, sangrado masivo y pérdida de conocimiento en menos de 3 o 4 minutos.

¿Por qué sé eso?
De todas maneras es inútil
Aunque tuviera equipo médico en condiciones...
Estoy sola y apenas puedo moverme con libertad...

Pierdo sangre con cada segundo...
Solamente siento mi vista nublase un poco, al igual que un ligero dolor de cabeza o mareos...

Sin armas y siendo buscada...
Solo me queda esperar

...

¿Sabes qué guion?...
Vete a la mierda si voy a caer que sea bajo mis términos

Admiro el agujero de bala en mi codo aún sangrado, mordí esa misma herida buscando la bala con mis dientes hasta sacarla limpiamente, escupí la bala mientras uso una parte de mi camisa como mordaza y gritar.

Con los dedos de mí otra mano intacta, busque la bala en el agujero de mi hombro, sentía mi dedo tocar el músculo envuelto en sangre cálida hasta que finalmente saque la bala dejándola caer a lado mío, me separo de la pared para seguir. Paso por paso, camino sin rumbo fijo, mientras con la mano intacta apoyo con fuerza la herida del hombro parando el sangrado un poco, siento como mi vista se nubla con cada paso, estoy cansada con mareos envueltos en la cabeza.

Pasillo por pasillo, calle por calle, plaza por plaza, camino dejando un rastro de pisadas de sangre y...

Perdón, ya ni sé qué pensar

Hasta que en una de esas calles tropiezo un poco, pero por la debilidad caí al suelo de costado, siento el frío en la punta de los dedos, al igual que la tierra del suelo.

Solo... unos 5 minutos ¿Si?...

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Hola Xd

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Un abrazo y un beso 7w7

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