DISFUNCIONAL : 1918

Cap 23 : EMPATIA

Duele...

Siento un dolor en estómago, un dolor punzante acompañado del ardor en el mismo, siento fuego en la frente y dolor en los ojos, no puedo respirar, es como tener un nudo en cuello mientras lágrimas y mocos recorren mi cara con inquietud, me duelen los pies y las manos con callos son un horror, tierra y uñas quebradas solo están en las puntas de mis dedos mientras la tierra húmeda se asienta en mi piel y ropa con insistencia.

No escucho nada, pero ante mis ojos nada más se presenta la pared de piedra y madera, siento mi pecho arden sin olvidar una sed en la boca que recorre hasta la garganta, en un momento de calma y fuerza apoyando mis palmas en suelo dejando la tierra entre los dedos pude reacomodar mi cuerpo asintiendo la espalda contra la pared dejando que calen las astillas y la piedra ya no me importa.

Todo se ve un poco nubloso acompañada de una incomodidad en la cabeza, acerco mi mano a mi frente y al tocarla siento algo cálido como el sol, veo mi mano notando sangre y mucha. Respiro con tranquilidad creando los ojos por unos segundos, pero al abrirlos veo a Lucy en suelo boca abajo, con dificultad y cansancio me acerco a ella arrastrando mis rodillas un poco dejando más raspones, pero cuando llegue a ella solamente con tranquilidad, dulzura y la mano temblorosa toco su rostro,

Su piel está áspera, seca y con raspones, algunos profundos con la misma intimidad y delicadeza de un hastisgo de bondad, usando mis muslos como almohadas recargo la cabeza de Lucy en ellos, pero aun así no se mueve. Intento moverla en pequeño y cuidadoso toque, pero nada, mi respiración se intensifica al par como veo a Lucy entre mis manos. Su cabello tan gastado pero con cierta suavidad, su piel reseca como ojos de otoño y sus ojos como dos pedazos de carbón en medio del desierto inexistente.

—Lucy... —La voz se quiebra acompañada de un tono bajo e intranquilo mientras el viento solo susurra a mi oído.

Siento mis manos tambalear mientras una sensación recubre mi espalda, el dolor y el frío solamente se sienten en la sangre mientras dulces lágrimas limpian el polvo de mi cara. Con sutileza y miedo tomó su muñeca revisando su pulso con insistencia hasta encontrarlo, de un segundo a otro un silencio moral apaga el ambiente similar al estar bajo el reflector del mundo únicamente esperando algo.

—Q-Quiero i-irme a c-casa... —Aclara Lucy susurrando entre dientes con esos ojos vacíos mirándome de reojo.

Di un pequeño suspiro con una media sonrisa, jorobándome un poco más fuerte el cuerpo, quitando esa fría y dolorosa sensación en la espalda. Con emoción y alegría acaricio la cabeza de Lucy dejando pasar su cabello reseco entre mis dedos, dejando bajo mis uñas la caspa, pero de un segundo a otro ella se aparta levantándose con las pocas fuerzas que aún pose, le ayude a levantarse hasta que veo su cuerpo completo y a más detalle. Su ropa algo rasgada mientras sus brazos y piernas envueltas en tierra, raspones y moretones, en su cara un labio partido y un ojo morado se hacen destacar de entre la mugre en sus mejillas y bajo los ojos.

Antes que pudiera decir algo o pensarlo en un abrir cerrar de ojos, ella se abalanza contra mí poniendo su cara en mi hombro derecho mientras sus brazos aprietan con fuerza mi torso, sintiendo sus uñas calar hasta la piel. Escucho perfectamente como quejidos de dolor, un sutil llanto, el apretar de sus dientes y como se suena el moco mientras su respiración frenética humedece mi cuello. En un movimiento improvisado con dulzura correspondí el abrazo llevando mi antebrazo derecho al nivel de su cintura mientras el agua, otro brazo atraviesa su espalda, tocando con mi mano su cabello con delicadeza y tranquilidad oliendo a carne y sangre.

Esto se siente raro...

Nos quedamos así por unos 2 o 3 minutos, mientras que solo queda una sensación cálida y más tranquila solo con el escuchar de nuestra propia respiración.

—E-Está bien... está bien... ya p-pasó —Dije con un tono reconfortante mientras aún acaricio su cabello envuelto en nudos, pero aun así se siente sedoso.

En ese mismo momento Lucy se aparta de mi hombro, mirando fijamente aún con la cara roja, pero con una mano le quito las lágrimas que quedan devolviendo la mirada con una tranquila sonrisa.

¿Que mierda te hicieron?

—U-Un poco mejor? —Mencione poniendo una mano en el hombro de la carne.

Ella asiente con la cabeza y la mirada baja limpiando lo que queda de lágrimas de su cara, mientras que su calor poco a poco se va exclusivamente quedando el frío otra vez. Cerré los ojos por unos segundos, respirando hondo y exhalando con sutileza por la boca, cuando abrí los ojos intenté morder a Lucy apuntando mis dientes contra la clavícula, pero antes que nada la empujé dejando que caiga de espaldas sobre la tierra.

La sed ha vuelto, recorre mi garganta hasta llegar al corazón rojo, huesos y carne se desgarran mientras lágrimas rojas recorren mi mejilla mientras un aliento húmedo y podrido sale de mi ser. El sonido de tambores y el lienzo con un único punto rojo vuelve, un punto latente como perfecto. Cómo un animal tome el tobillo de la carne rasgando tela y piel con la punta, mis uñas, con otra mano apoyo un poco de mi peso en la cabeza de ella contra la tierra.

La carne intenta apartarme pataleando con insistencia e intentando quitar mi mano de su cabeza, con la otra mano tomó su brazo izquierdo alzándolo un poco hasta morderlo. La carne se desgarra mientras la sangre brota en flores hermosas mientras se siente la brisa del mar, el cabello, una cálida sensación más el sabor en la boca, un sabor fuerte, persistente, agrio pero con cierto toque de frescura.

El sabor...

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Hola Xd

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