¿Que pasaría si en una fiesta te acuestas con el novio de tu mejor amiga que también resulta ser mejor amigo de tu novio en la infancia?
No era sencillo responder.
Cada giro, caída, movimiento era algo primordial para que bailar se viera conciderad...
Oops! Questa immagine non segue le nostre linee guida sui contenuti. Per continuare la pubblicazione, provare a rimuoverlo o caricare un altro.
—Me quiero morir. —Pronuncio Félix entre dientes.
Por suerte los padres de Félix no protestaron al verlo de tal estado.
Había dejado el chófer de Nat en mi casa que fue un gran alivio por que no tenía dinero en el bolso para el autobús y bueno no tenia el " mi coche" que le había dicho a Nat que tenia.
Todo lo que había pasado esta mañana fue... Raro.
Raro en el sentido que no fue de la manera adecuada que conociera a la madre de Adriel. Era una mujer muy bonita, Adriel se parecía mucho a ella en todos los sentidos, cosa que no vi de André.
Tal vez solo se parecía más a su padre.
Cuando estaba ya apuntó de llegar a la puerta me detuve de pronto cuando escuche gritos y regaños con dureza.
Dorian...
Fue en lo primero que pensé.
Mierda.
Abrí la puerta de golpe y al momento sentí tres miradas encima mío.
Eran mis padres con Dorian al frente sujetando su codo con su otra mano.
—Por fin llegas Dhara —Mi padre fue el primero en hablar con un tono demandante.
Doria tenía puesto en espaldas una mochila de instituto color morada, algo que se me hizo raro de solo verlo, al saber que el morado no era uno de sus colores que más le agradaba y mucho de algo que llevara al instituto. Eran las once de la mañana y el ya estaba cambiado con su vestimenta de siempre, solo que esta vez con un suéter grande color negro, esto ya me estaba dando mala espina.
—perdón por no avisar pero—
—Tu hermano llegó en la madrugada y no viniste con él, nos tenías preocupados Dhara. —Exclamó mi madre.
¿Qué yo no vine con él?
Pero... Si él no había ido a la fiesta.
Lo observe para obtener una respuesta de parte de él, pero solo obtuve una exaltación de ojos saltones para cubrirlo.
¿Ahora en que te habías metido Dorian?
Suspiré y me dirigí a mis padres.
Me debes una Dorian.
—Si... Félix bebió mucho así que mande a Dorian a casa y luego lo iba alcanzar pero ya era muy tarde así que me quede en casa de... —Corte de pronto mis palabras- De Nat. —Les regale una sonrisa cerrada sintiendo el sudor en mis dedos de nerviosa que estaba.
