-15-

7.4K 416 248
                                    

-La maldición -

-La maldición -

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Lo siento.

Pude enviarle. Me sentía muy mal por mi, por él, nunca estaba en mis planes que Adriel apareciera de la nada y que todo se arruinaría.

Aunque llegada de Adriel me hizo reflexionar. La parte sensata de mi piensa más claro las cosas. No podía quedar teniendo novio. Hacerlo sabiendo que tengo novio, que no quería cagarla de nuevo.

No quería cometer el mismo error una y otra vez.

Tampoco quería hacerle ilusiones, yo tenía novio y ya estaba con bastantes problemas para empezar con otro.

Me hacía mucha ilusión verte, pero supongo que será después.

Aunque era un mensaje podía sentir que no era la misma sensación de antes. En el fondo aún sentía esa intriga por él, después de todo tenía derecho de hacer más amigos y por sus similitudes a las mías, me hacían pensar que era de confiar aunque no lo conociera. Era ese tipo de persona que con sola verla te hacen sentirte segura de no ser juzgada, que tiene un ambiente seguro y lo demuestra. Pero que va, es solo una cita y aunque no lo conocía del todo de seguro me entendería.

—No puedo creer que sean tan altos...  —dijo Oliver riéndose mientras comía palomitas.

Al final, había llamado a Oliver después de confirmar que los pequeños inconvenientes se había sido esa pequeña no cita. Hubo varias quejas de Dalí que lo único que quería era que siguiera al chico y lo besara como una película romántica. Pero ni siquiera podía, tampoco por la culpa. Así que tuve que aliviarlo con Oliver, después de todo, yo también quería desestresarme. Así de mala novia soy.

Me reacomode un poco para acercarme más a él. Estaba tan atractivo el día de hoy con esos pantalones apretados, era como verlo cuando tuvimos nuestra primera intimidad. Coloque una mano en un puño sobre mi vestido entre mis piernas para que no se alzará mi vestido.

Desde que tuvimos el primer toque entre nosotros fue el inicio de algo nuevo para él, el también había perdido la virginidad conmigo y para el ya era una adicción pero aunque me gustaba verlo feliz, había ocasiones donde el acababa antes que yo y yo apenas entraba al clímax. Me daba pena decirlo pero la última vez que lo hicimos tuve que fingir un orgasmo, cada vez que lo recordaba me hacía pensar que tal vez yo era el problema, no él. ¿Cuándo había visto un hombre acabar primero que una mujer?

Eso había sido diferente con Adriel. No había poder alguno de parar mis gemidos, tal vez era de dolor por que tanto en mi o solo que disfrutaba el momento.

O tal vez los dos.

Sus gruñidos en mi oreja que ponían aún más, él no gemia y a que en pleno acto no me daba curiosidad, ahora que sabía sus actitudes, en el fondo quería saber cómo era ese lado vulnerable.

Pero supongo que eso solo lo sabrá Nat.

Me reacomode de nuevo a su lado agarrando un poco de palomitas.

Amor Por Error ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora