¿Que pasaría si en una fiesta te acuestas con el novio de tu mejor amiga que también resulta ser mejor amigo de tu novio en la infancia?
No era sencillo responder.
Cada giro, caída, movimiento era algo primordial para que bailar se viera conciderad...
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—¡Shot, shot, shot, shot, shot ! —Todos gritaban al insonoro y yo aún no podía creer que les hacía caso.
Y cuando menos lo pude aguantar, termine la garra de cerveza.
Todos gritaron festejando por mi victoria y yo sonreía como tonta, no sé si era porque ya estaba lo suficiente ebria o porque me alegraba saber que Adriel me miraba con enojo en una esquina.
—¡Ahhh-driel —Llegue a él a tropezones, me sentía muy feliz.
Bufo al sentir mi aroma.
—Dios, estás que te mueres de ebria.
—No es cierto —Le negué con un dedo al ritmo de las luces. Sonreí.
Adriel que solamente estaba bebiendo agua, lo dejo en la barra del pequeño bar para luego pararse de asiento.
—Ven te llevaré al coche -Me cogió del codo pero yo me retuve.
—¡No! Mis amigos y yo la estamos pasado bien Adrielsito.
—Tu no tienes amigo y creo que fue mala idea traerte. —Volvió a coger mi codo pero yo retrocedí.
—¡No! ¡Fue la mejor decisión que haz hecho en tu vida! —Le dije aumentando el tono de mi voz para ser escuchada por el tras la musica que estaba a la mayoría del volumen. Rei. Dios me sentía tan feliz. De pronto escuché como la canción cambio a Disclosure de Latch haciendo de varias personas gritaran. —¡Esa es mi canción! —Grite aunque no escuchara mucho esa cancion y me uní al baile.
Ni siquiera me di cuenta como Adriel ya no estaba a mi lado, todo estaba dando muchas vueltas que no sabía dónde era la dirección correcta dónde bailaba. Yo solo sentí como música se colaba en mis oídos haciendo que todo al rededor desapareciera.
De pequeña siempre me interesó bailar, aunque nunca fui a clases ni siquiera participe en bailes de instituto, todo era desde casa. Bailes que aprendía en Youtube, baile que le mostraba a mi hermano cuando estaba pequeño, era la manera de mantenerlo distraído para que no llorara. Amaba bailar.
Me movía de una lado otro siquiera siguiendo el ritmo, era como si mi cuerpo me mandará a seguir un ritmo propio. Era divertido este lugar. Apenas sabía de él y ya lo amaba.
Cerré los ojos y dejé que la música entrara en mi, mis manos se movían con grandes y ligeros movimientos, mis caderas no tenían un patrón, y mis piernas solo obedecían. Me sentía por primera vez como si estuviera en esas fiestas que tanto leía en los libros y me creía la protagonista. Era como si por primera vez disfrutara estar aqui sin finjir que lo que hacia no era adecuado, sin temor que nadie me juzgue. Chocaba con algunas personas pero no les daba importancia cuando de pronto. La música se paró.
Abrí los ojos de golpe.
El reflector estaba en mi, todos me miraban, no identificaba sus expresiones pero si alguien que reía.
