Quizás, solo Quizás - HyunHo

👻 Capítulo 19. 👻

• Cuando el aura de un fantasma es:

Rojo: Se han Suicidado.

Amarilla: Fueron Asesinados.

Celeste: Tienen un Pendiente.

• Cuando quien puede ver fantasmas está muy cansado, ellos pueden usurpar su cuerpo.

• Cuando, la persona que puede ver fantasmas quiere, puede tocarlos.

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Quizás, solo quizás habías encontrado algo nuevo que te gustaba.

¿Así se sentía ser besado?

La boca de Minho sabía bien. O al menos eso creías.

No entendías exactamente lo que estaba sucediendo, solo sabias que te gustaba como el rubio sostenía tu mandíbula con su mano, como cuando inclinaba su cabeza el beso se volvía más profundo, como su lengua entraba y exploraba tu boca, como su cuerpo se pegaba y amoldaba al tuyo, ejerciendo una leve presión que te embriagaba.

Si no fuera por esa presión que ejercía sobre su cuerpo contra el tuyo y la pared, estas seguro que hubieras caído al piso, ya que tus piernas hacia bastante habían decidido dejar de cumplir la simple función de mantenerte de pie.

Despegaste sus bocas solo para poder tomar un poco de aire, y aun así Minho mordía y succionaba tu labio inferior impidiendo que sus labios de alguna manera dejaran de estar en contacto.

Abriste con pereza tus ojos, solo un poco y ambas miradas se encontraron, justo cuando él dejó libre tu labio inferior, para ahora pasar su lengua por la comisura de su propio labio, un poco hacia arriba.

Su lengua era rosada, muy rosada.

Aunque tu cerebro estaba completamente en blanco sin poder procesar nada más allá de tu presente, aunque aún tu corazón latía con pesadez, aunque aún sentías que no habías llenado tus pulmones de suficiente oxígeno, aun así acortaste de nuevo la distancia, dejando ahora un beso casto sobre sus labios, y luego otro, y otro igual.

- Una vez más - le pediste cuando notaste que no respondía como querías, devolviéndote el beso, y en segundos lo tenías devorando tu boca, produciendo unos sonidos extraños y hasta obscenos si incluías los gemidos atascados en tu garganta cuando su mano bajo hasta tu trasero, apretándolo, haciendo que no solo tu estomago se revolviera sino que también una especie de punzada bajara por tu amigo.

- Basta – dijo de repente alejando su boca y pegándola ahora en tu cuello, mandando una descarga a todo ti cuerpo - es suficiente – murmuro, pero no parecía que te lo dijera a ti, sino que se lo estaba diciendo a sí mismo.

Antes de que pudieras decir algo escuchaste la puerta principal del baño ser abierta y dos voces masculinas a la par hablando, riendo y solo entonces recordaste donde estabas, quien eras y que estabas haciendo.

¿Qué estabas haciendo?

- Shhh... - murmuró bajo, sobre tu mandíbula - voy a salir primero, cuando ellos se vayan sales, ¿entendiste? - te explico bajo, mirándote a los ojos, por lo que asentiste - buen chico - te felicito, dejando un casto beso sobre tu boca antes de separase de ti y salir.

Miraste que la tapa del inodoro estaba baja y te sentaste sobre el mismo, dejando caer el peso de tu cabeza en ambas manos, tus codos sobre tus rodillas.