El costo del amor 2

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—Jefe en verdad lo lamento, es que se me presentó un problema y...

—Jimin debes avisar con tiempo si no vas a venir, no puedo dejar el restaurante sin show, agradece que mi hijo estaba aquí y está tocando—El gerente del restaurante suspiró pesado. —¿Puedo contar contigo para mañana o debo buscar a alguien más?.

—Mañana estaré allá jefe, no le quedaré mal, lo prometo—Jimin se sintió más tranquilo. —No consiga a nadie más...

—Ok pero si no vas a venir me avisas, por favor Jimin no lo olvides—

—No lo olvidaré jefe, gracias, en verdad gracias—

—Si si si, adiós, cuidate y cuida a tus cachorros—

—Adiós, que esté bien—

Jimin cortó la llamada y se giró mirando a Jihyun y Yoongi hablar con los niños, se tomó un momento para pensar la situación... ¿Vería a Jungkook nuevamente? No sé imaginaba como se sentiría eso y mucho menos quería imaginar como se pondría Jungkook. Por todos estos años se decía que Jungkook lo odiaba por lo que hizo, pero él como sabría si jamás llegó a conocer ni la mitad de su marido.

-Jimin debemos irnos–Yoongi le puso la mano en el hombro asustandolo.

-¿Que?–Preguntó Jimin abrumado.

-Que ya es hora de irnos, no podemos quedarnos más tiempo, llamaríamos la atención–Yoongi se forzó a sonreírle levemente.

-Ya llaman la atención, dos personas con finas prendas en un barrio bajo siempre llama la atención... Van a estar en problemas si alguien de la prensa los ve aquí...

-Qué más da... Si por ayudar a Jungkook perdemos todo lo hacemos, digamos que yo aprendí que el dinero no lo es todo, un día al igual que tu no tuve nada Jimin...

Jimin sonrió levemente y asintió.

-¿Cuando volverás?–Preguntó Yoongi.

-Solo demen unos días, tengo trabajos–Jimin pasó las manos con fuerza sobre su rostro. -¿Le dirán a Jungkook?.

Yoongi negó levemente.

-Está sedado, además no puedo ilucionarlo, avisanos para que cuando llegues él esté despierto...

-Bien–Jimin miró a sus hijos y suspiró. -¿Quién más sabe de esto?.

-¿A que te refieres?.

-A la situación de Jungkook, a que me encontraron... ¿Los señores Jeon lo saben? ¿Mi hermano lo sabe?–Preguntó Jimin serio.

-Pues no hemos dicho nada Jimin, la prioridad de Jihyun y la mía es ver a Jungkook mejor... Por ahora nada más nos importa...

-No le digan nada a nadie todavía, yo... Veré como me comunico con mi hermano–Jimin se recostó a la pared y cerró los ojos. -Sabía que debía enfrentarme a esto... Pero no estoy preparado Yoongi, tengo miedo...

-Oye... Jungkook ya no es un niñato, ahora es un hombre y sabe lo que es prioridad en su vida, suena cliché pero se dio cuenta de lo que perdió por idiota...

Jimin miró a Yoongi y este asintió levemente con una sonrisa.

-Todo va a estar bien... Este puede ser el reinicio de sus vidas... Sé que aún lo amas, tus ojos siguen brillando cuando dices su nombre...

-¿Y él no me llegó a odiar?–Preguntó Jimin volviendo su mirada al suelo.

-Jamás, ese hombre no podría sentir nada más que amor por ti...

El corazón de Jimin se aceleró por esas palabras, al fin y al cabo él era igual... Por Jungkook solo podía sentir amor y amor del fuerte.

Jimin fue a la sala y se sentó a lo que MinGuk rápidamente se subió en las piernas de él. Chae estaba en las piernas de su tía siendo consentida así que estaba contenta y tranquila.

-Niños despidancen de sus tíos, ellos ya deben irse–Dijo Jimin sin muchos animos.

-¿Vendras otro día tía?–Preguntó Chae.

-Eso no sabría decirte–Jihyun pasó por detrás de la oreja el cabello de la infante. -Pero si nos vamos a ver otra vez, eso lo prometo...

Chae feliz aplaudió y miró a Jimin que le hizo una seña con la cabeza para que se bajara.

-Ya tienes nuestros números... Llamanos–Yoongi se levantó y le dio la mano a Jihyun para que lo imitara.

-Ujum–Jimin asintió.

-Chao tíos–MinGuk les agitó la mano con una dulce sonrisa.

Ambos adultos le agitaron la mano aun sin entender por qué MinGuk a comparación de su hermana no recibía ni daba abrazos, a duras penas se dejaba tocar la mano y eso cuando él quería.

-Cuidensen mucho–Les dijo MinGuk.

-Gracias cariño, tu también, además cuida a tu papi y a Chae–Jihyun le envío un beso.

Jimin vio a su cuñada y a su amigo irse, Chae corrió y se volvió a despedir de ellos para después cerrar la puerta con seguro... Ella era una niña muy eufórica así que ya se pueden haber imaginado la enorme celebración que hizo por todo el departamento.

-¿Papi estas bien?–Preguntó MinGuk en un susurro y tomó a su padre de las mejillas.

-Si cariño, solo estoy cansado–Jimin sonrió levemente. -¿Estas contento como tu hermana de haber visto a tus tíos?.

-No como ella pero si me gustó verlos... La tío Jihyun es muy bonita, y el tío Yoon no es tan alto...

Jimin rio suave por ese comentario.

-Lo sé cariño, yo que soy pequeño soy mas alto que el tío Yoon...

MinGuk rio divertido y como desde que era un bebé buscó refugio y tranquilidad en el pecho de su padre.

-¡Chae cariño deja de gritar, vas a alterar a tu hermano!–Dijo Jimin fuerte llamando la atención de la infante que rápidamente fue hacia él. -Sé que estas feliz pero sabes que no debes hacer eso mi amorcito..

Chae asintió y se acercó a MinGuk que tenía los ojos cerrados.

-¿Gukie estas bien?–Preguntó Chae en un susurro.

-Si, y también estoy feliz por la tía Jihyun–MinGuk abrió lenta y perezosamente los ojos y la miró.

-Debiste dejar que te abrazaran, la tía Ji huele rico y es calientita, no como papá pero si lo es..

MinGuk negó y escondió nuevamente su rostro en el pecho de su padre buscando lo mismo de siempre... Tranquilidad.