El costo del amor 2

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-No puedo creerlo–Lisa negaba con una sonrisa.

-Lisa si te cuento esto es por que confío en ti, no es que ahora vayas y le cuentes todo a tu novia–Jimin la regañó.

-Oye es que decirme que tu esposo es Jeon Jungkook el magnate y que tu hermano es la gran bomba sexi de Park Hoseok es una locura... Y sin olvidar que Park Taehyung no solo es tu cuñado sino también fue tu mejor amigo... ¡Jimin todos son super famosos y tu viviendo aquí!–Lisa alzó la voz emocionada.

-Tu tienes dinero hasta para botar por la ventana y no digo nada–Jimin se acostó en el sofá y suspiró. -No sabes lo difícil que es que todos los que amas sean tan reconocidos... No me quejó de ser padre pero solo soy eso, ni fui a la universidad, mis únicos estudios son de como ser padre y esposo... Soy un fracasado al lado de ellos...

-Jimin no digas eso–Lisa se sentó en la alfombra y acarició suave el cabello. -Ellos te quieren así ¿o me equivoco?.

-Pues lo hacen por que no hay mas opción... Ya estoy como muy viejo para ir a la universidad y estudiar algo, ademas mi hijo es autista y debo cuidarlo, es complicado...

-No pienses en eso, mejor piensa en lo bien que puedes vivir con tu marido y tus niños... Jamas volverás a pasar hambre, tus niños no tendrán ampollas por los zapatos apretados, hasta Gukie tendrá mejor atención de especialistas y todas las medicinas a tiempo–Lisa sonaba contenta pero toda la emoción se le fue al ver a su amigo. -¿Que pasa? Deberías estar feliz por que tienes a tu familia reunida...

-Los papás de Kookie dirán que volví con él por el dinero, los lujos y privilegios de ser su esposo... ¿Que hago para que no digan eso de mi? Lisa me pregunto que diran las fans de Kookie cuando se enteren de todo..

Lisa vio como su amigo se sentó abrumado, hace tanto no lo veía así de mal.. Así que se subió al sofá y lo abrazó.

-Jimin...

-¿Que tal que Jungkook piense que por el dinero estoy con él?–Jimin agarró con fuerza la argolla que colgaba de su cuello. -No puedo decir que Kookie ya no escucha a sus papás pero...

-¿Piensas que ellos le meterán cosas en la cabeza?–Preguntó Lisa curiosa.

-No sé... Él ama mucho a sus papás, tengo miedo es que me quiten a los niños, ellos tienen las de ganar por que me pueden demandar por abandono de hogar y por no darle muchas cosas a los niños...

-¿Jungkook te ha insinuado algo?–Lisa ya no sentía nada de emoción, ahora andaba preocupada y hasta un poco temerosa.

-Hasta ahora no... Pero... Su papá Seokjin me odia por ser pobre, antes decia que yo era un mantenido... ¿Que tal que él convenza a Jungkook para que me quite a los niños?.

-¿Crees a Jungkook capaz de eso?.

-Él ahora está vulnerable... La única seria Jihyun que me ayudara pero... Ella...

-¿Nadie le hace caso verdad?–Lisa recibió un asentimiento de cabeza a su pregunta. -Lo siento, yo viendo cosas estúpidas cuando en verdad hay muchas cosas por que preocuparte..

-Aveces pienso que soy muy exagerado pero... Después de mucho he aprendido que siempre debo esperar lo peor de la gente que amo para no decepcionarme–Jimin suspiró pesado. -En algún momento... Ellos me harán daño...

-Qué feo vivír así–Lisa lo abrazó con fuerza. -Yo jamás te voy a decepcionar, seré la mejor amiga del mundo, la mejor tía y la mejor complice... Si tu llegas a matar a alguien cuenta conmigo para desaperecer el cuerpo.. Así de fiel seré...

Jimin esperó unos segundos procesando las últimas palabras de su amiga y rio suave, eso último habia sonado medio psicótico pero admitía que era muy difícil esperar algo malo de Lisa.

×××××××××

Jimin salía de la lavandería frustrado, no le habían querido dar el trabajo simplemente por que no tenía experiencia.. Eso era tonto, pero su molestia se fue cuando vio una panadería cerca donde decía que necesitaban meseros con o sin experiencia.

-Buenos días–Saludó Jimin al entrar e hizo una reverencia.

-Buenos días, ¿que necesita?–Preguntó la chica después de corresponder su reverencia.

-En el aviso dice que necesita mesero, ¿aún está disponible?–Preguntó Jimin tímido.

-Ya han llegado tres antes que tu, espera que el jefe llegue... Puedes sentarte con los demás–Le dijo la chica para meterse al área de la cosina.

Jimin asintió y se fue a sentar al lado de otros tres chicos que estaban pegados a sus celulares. Él revisó el suyo y Jungkook no le había hablado, suspiró y guardó otra vez el aparato para poner atención en los clientes que entraban y como la misma cajera los atendía.

Cualquiera pensaría que Jimin con su ropa descolorida y desgastada era un tonto o hasta algo peor... Pero sacando su apariencia él tenía un sentido del aprendizaje mucho más rápido que otros, así que con sólo ver sabía que muchos de los clientes que veian ya eran conocidos y tenían pedidos específicos y hasta encargos del día anterior.. Estaba intentando aprenderse los nombres y las caras de los clientes cuando entró un joven con muchas bolsas plásticas, se levantó para saludar con una reverencia pero el joven al corresponderle se le cayeron las bolsas.

-Le ayudo–Se ofreció Jimin rápidamente.

-Gracias–El joven sonrió ampliamente y se agachó para tomar las bolsas del suelo.

-Señor déjeme y le ayudó–Se ofreció la cajera y tomó la mayoría de las bolsas. -¿Llevó esto a la cosina?–Preguntó al joven recién llegado.

-No todo, algunas cosas son para aseo, y recogí los uniformes–El joven le dio una suave caricia en el cabello a la chica y ella asintió para irse con una sonrisa. -¿Ya te atendieron?–Le preguntó a Jimin.

-Oh no no.. No soy cliente, estoy esperando al dueño de la cafetería para lo del puesto...

-¿Ustedes también?–Preguntó a los tres jóvenes que estaban sentados mirando sus celulares.

Los tres jóvenes se pusieron de pie y afirmaron con una pequeña reverencia.

-Soy el dueño y me llamo Woo Ji-hoo pero me dicen Zico... Ustedes tres se pueden ir que ya encontré al mesero que necesitaba–Habló tan dulce y educadamente que los jóvenes sólo asintieron embobados por su encanto.

-Yo también me retiro, que tenga buen día–Jimin sonrio y le hizo reverencia.

-No jovencito, tu serás el nuevo mesero así que nada de irse... A trabajar que no se demora en llegar los otros clientes...

Jimin se quedó mirándolo un tanto sorprendido.

-¿Enserio? ¿Yo soy el nuevo mesero?.

-Ujum, pero de una vez te aviso... Solo es medio tiempo, mi hermano y su novio trabajan aquí en las tardes así que no puedo darte mas...

-¡Oh no señor, esta bien así, tengo dos hijos que recoger en la tarde así que me parece perfecto el horario!–Le dijo Jimin alegremente. -¡Soy Park Jimin y llámeme como usted lo desee!

El hombre sonrió al ver la ternura de Jimin... Eso era lo que él necesitaba en su cafetería, encanto, atención y alguien joven pero no tanto para que fuera antipático o desinteresado con la clientela.