❀ | Capítulo 33

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Tan pronto como terminó de ordenar su escritorio sacó la computadora y su portafolio para comenzar a hacer sus tareas pendientes de la semana. Necesitaba exprimir el tiempo para poder estudiar correctamente durante las pocas horas libres que tuviera durante el día. Por supuesto, dividía sus tiempos entre sus comidas, ejercicio, cenas y eventos -que regularmente se llevaban a cabo durante la noche- y últimamente despertaba alrededor de las 4:30 y 5:00 am para conseguir estudiar un poco más.

Las convocatorias para realizar los exámenes de admisión a las universidades públicas más solicitadas de Corea se habían publicado hace aproximadamente tres días. Y pese a que Rossel ya tenía su lugar seguro en una universidad privada para ingresar a la carrera de Comercio Internacional -y también la habían inscrito a una prestigiosa escuela de actuación para que puliera sus habilidades-, había descargado un temario utilizado para los exámenes de admisión en universidades públicas e iba a sacar su credencial. Se le había metido una idea loca en la cabeza, que consistía en hacer el examen de admisión a alguna universidad pública para la carrera de Pedagogía, que era lo que ella realmente deseaba estudiar. Después pensaría en un plan para escaparse y que no la buscaran durante las horas que durara el examen.

–Que fastidio.

Tiró sobre su cama el libro que sus padres le dieron sobre la introducción a la carrera que ellos deseaban que estudiara. Realmente no quería hacerlo, le parecía tedioso y no le interesaba en lo absoluto.

Jungkook:
Holaaa :)
[7:30 pm]
¿Cómo estás? ¿Ya cenaste?
[7:30 pm]
Yo estoy trabajando ahora mismo, pero tengo unos minutos libres mientras me entregan la comida para llevarle a una de las mesas, así que aproveché para enviarte un mensaje.
[7:31 pm]

La pantalla del teléfono de Rossel se encendió notificando los nuevos mensajes de Jungkook. Sin embargo, la chica estaba tan absorta en el temario que no le puso atención a la notificación.

Pasó un par de horas más frente a la computadora y cuando reaccionó eran ya pasadas las 11:00 pm. Había rechazado la cena debido a que su estrés le reducía considerablemente el apetito, sus padres estaban tan ocupados atendiendo sus negocios que apenas y se acordaban de su existencia. Era triste, pero también bastante bueno debido a que no estaban constantemente siguiendo sus pasos y restringiéndola de la forma tan asfixiante en que solían hacerlo.

Todo esto la llevo a entrar de nuevo en un estado bastante depresivo. Sus padres tenían planeado su futuro literalmente desde que nació, no le sorprendería si ya hubieran seleccionado a algún hombre para que se comprometiera y casara con él dentro de unos años. No era libre de tomar sus propias decisiones y hacer planes acorde a sus intereses.

Desde que tenía uso de razón, Rossel deseaba ser profesora de niños pequeños. Adoraba a los niños, y desde que ella también era pequeña solía pasar horas jugando con Jimin a que era la profesora y él el alumno. Sin embargo, en este punto de su vida sentía que estaba soñando con imposibles, que para otras personas era quizá más sencillo de alcanzar. Sentía sus manos atadas, que era un títere y sus padres los titiriteros. Se sentía frustrada e impotente. Tenía mucho miedo de afrontar a sus padres, y eso la molestaba.

Llorando, se dejó caer en la cama con su teléfono a un lado y lo desbloqueó.

«Tengo mensajes de Jungkook»

Sonrio al leer lo que el chico le había escrito. Sentía lindo que se tomara el tiempo de enviarle un mensaje aún cuando contaba con descansos muy cortos de tiempo durante sus horas de trabajo. Limpió sus lágrimas y también formó un puchero en sus gorditos labios, sentía un poco de culpa al no haberle respondido cuando el chico se había preocupado por hacerle saber que la tenía presente en sus pensamientos. Seguro ahora mismo estaría dormido y no lo leería hasta el día siguiente.

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