Family

Día 10: Compras

Estaban caminando pasillo por pasillo, recorriendo todo el lugar, así es nuevamente en una tienda.

La diferencia es que ya no estaban en el área de bebés, bueno, por lo menos no en el de ropa.

— ¿Qué te parece este? — pregunto el azabache siendo la décima prenda que le mostraba.

— Me encanta, te quedaría estupendo.

— No me gusta — respondió y lo regreso a su sitio.

Naruto hizo una cara de pocos amigos, ¿Entonces para qué preguntaba?

— Es muy difícil Naruto, toda esta ropa, o es rosa, o tiene un estampado de un bebé saliendo de la ropa, ¿Cómo por?

— Bueno, el rosa te queda bien — añadió para ayudar.

— Todo me queda bien dobe, pero no me gusta, quiero algo un poco más oscuro como negro, o azul.

— Entonces compra el negro.

— Pero ya tengo muchos negros.

Naruto se golpeó la frente mentalmente, esto se estaba volviendo cada vez más difícil.

— Bueno, me llevaré el negro — decidió por fin.

Justo estaban en el área de maternidad, en dónde compras ropa mucho más grande y cómoda, se compran accesorios para facilitar ciertas cosas, en dónde compras los bolsos, las pañaleras y todas esas cosas para embarazadas o más bien embarazados.

— Hay que comprar una pañalera, mamilas, pañales, toallitas, crema, y todo lo que lleva una pañalera, pero antes debo ir al baño — añadió algo apenado, odiaba tener que ir al baño en lugares públicos, estaban sucios, quien sabe qué personas se sentaron en ese lugar, solo de pensarlo le daba asco, pero el bebé no le dejaba la vejiga en paz — Puedes ir escogiendo las cosas, ¿Verdad?

Para Naruto eso sonó más a amenaza, pero de igual forma le sonrió.

Camino hasta la sección de pañales y esas cosas, no lo tenía muy en claro, pero Sasuke le había enseñado bien.

— Hola Naruto — escuchó una voz por detrás.

— Kakashi-sensei, ¿Qué hace aquí?, ¿No debería estar en la torre? — pregunto confundido.

— Si, pero vine a pasear un rato.

— O sea que se escapó, ttebayo.

— Shh, no digas nada — advirtió con una pequeña sonrisa.

Naruto lo ignoro y siguió en su búsqueda.

— Pañales, toallitas.

— ¿Sasuke te mando a comprar solo?, No es muy propio de él.

— No, está en el baño, solo estoy adelantando las compras.

— Ah, ya veo, entonces te ayudo, sé muchas cosas de bebés.

— ¿En serio? — lo miro extrañado.

— Claro, acompañe a Kushina a todas sus compras, aunque ella no sabía que yo estaba ahí, pero el punto es que estuve ahí.

— ¿Cómo?

— Yo recomiendo esta marca de pañal, era la que compró en ese entonces, y se ve de muy buena calidad.

— No sé, esperaré a Sasuke para eso, él siempre tiene la última palabra.

— ¿Qué yo qué? — pregunto enojado en cuanto llegó.

— Hola Sasuke, justo estábamos viendo pañales — agrego el Hokage, verlo en ese estado era algo extraño y lindo a la vez.

— Llevaremos los morados, según las recomendaciones son los mejores.

No estaba enojado con ellos, lo que pasa es que en el camino de regreso se topó con unos ninjas o lo que sean, y pues se le quedaron viendo raro, así que les activo el Sharingan para que se fueran.

El único problema es que no debe de usarlo tan de repente y ahora le dolía un poco la cabeza.

— También debemos llevar el kit especial de limpieza, no lo olvides.

Naruto asintió mientras lo escribía en su lista, conociéndolo, se le iba a olvidar.

En lo que Sasuke buscaba las cosas en los estantes, Naruto iba detrás de él simplemente susurrándole cosas bonitas, cuánto lo amaba y cuánto estaba esperando al bebé, el azabache solo sonreía por las lindas palabras.

Kakashi estaba seguro de que lo harían muy bien, se habían preparado mucho, y si había alguien que deseaba un bebé con tanto anhelo eran ellos, no los distraería más.

Tiene que admitir que le sorprendió la noticia, el día que le dijeron que estaban esperando un hijo, al principio no entendió y hasta ahora tampoco entiende como fue posible, pero solo basto para ver sus sonrisas y sus miradas de amor, para saber que estaba de acuerdo y los apoyaba.

Estaría ahí para ayudarlos en cualquier cosa que necesitarán, sería un tío de gran ayuda, de eso estaba seguro.