XIII. DELPHI

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El templo a Apolo en Delfos fue una de las mayores atracciones griegas durante el siglo II antes de nuestra era, ahí una mujer que se encontraba en contacto con el constante vapor tóxico que emanaba la tierra, se aseguraba de decir un grupo de palabras sin sentido que pronto los intérpretes del oráculo descifrarían a su favor, manipulando el mensaje que los dioses enviaban.

Mark es la pitonisa y su madre la intérprete que no deja de examinarlo de arriba a abajo. El menor de los Suh es un total chismoso.

—Jamás habías hablado de él, es decir, apareció de la nada y ahora viene a verte seguido, oh, sin mencionar que se está cambiando en tu habitación.

—¿No deberíamos estar un poco agradecidos por lo que hizo? —Comenta deslizando las manos sobre la mesa y no mirándola directamente a los ojos.

—¿Y cómo por qué hizo todo eso?

—Bueno, su familia es bastante caritativa.

Cuando Mark alza sus casi inexistentes cejas con alevosía, quiere reírse y gritar de frustración al mismo tiempo, no puede enojarse con él por estar pegado a la ventana cuando llegó, además de lo cómico que se ve.

—Ten es muy noble y humilde, me parece un buen muchacho.

También quiere burlarse de eso, definitivamente podría vomitar su estómago si escuchara alguno de los constantes comentarios clasistas del chico, no siempre van con esa intención, pero tampoco puede borrarlos de la lista porque sí.

—Es un buen amigo.

Amigo—resalta Mark posando las manos en los hombros de su madre.

—Sabes, John, creo que deberías salir a divertirte un poco, cariño, me alegra que tengas otros amigos, pero ¿por qué venir aquí?

Tiene toda la razón, él se ha vuelto loco al llevar a Ten a su casa, es decir, ¿qué pretende? Ir a dormir con él como si no estuviese bajo el mismo techo sacro de su familia, tampoco es tan desvergonzado. Además, conociendo la impertinencia de Mark sumada al escándalo de Ten, eso va a salir muy mal y por el momento no es de su agrado traumar a su familia.

—Porque estoy cansado y Ten no quiere quedarse solo estos días, además no pensaba que fuera una molestia.

—No lo es, en absoluto, sólo pensé que podría ser algo incómodo para un amigo nuevo tener a la madre del otro rondando por la casa, ya sabes...

En realidad no lo sabe y piensa que Irene tampoco, así que si Mark ya le dijo algo, debería ir al grano, aunque desea con toda su alma que no lo haga y las palabras de esa noche se las lleve el viento.

—Sólo vamos a dormir, no es para tanto, no incómodas, mamá.

—Entiendo, entiendo, pero ¿no quieres decir algo más?

Así que eso es, quiere que salga de boca suya cuando el niño con el gato negro han ventilado el único secreto que pensaba guardar de todo el mundo, es culpa de Ten, no lo volverá a invitar a su casa, ni siquiera pudo mantener una promesa por más de media hora, no era ni el tiempo, ni el modo, tampoco tenía una razón óptima para besarlo, no le sorprendería que se trate de un complot.

—¿Cómo qué?

—No lo sé, trabajas mucho, ya lo dije, quiero que te entretengas y me preguntaba si no tenías algún tipo de interés, esto es difícil para mí, realmente estoy necesitando que retomes esa parte de tu vida social y no sólo con amigos, así que pensé en Ten...

Johnny traga saliva de forma ligera, en su vida ha mencionado dentro de su casa que tiene un interés por el sexo masculino, así que definitivamente es una sorpresa, Mark se ve igual de consternado que él, Irene ha sido bastante directa con todas sus indirectas.

Babylon Allure [JOHNTEN]Where stories live. Discover now