XX. ZENITH

666 77 39
                                    

En Santorini, el color del mar es como en ninguna otra parte del mundo, un azul tan precioso que, Johnny supone, muy abiertamente, se debe a que el mar mediterráneo es la tierra de los dioses más humanos que han pisado el orbe, así que con una calidad más errada, encontraron en el tono Zenith la misma maravilla que los hombres.

La concepción de esa zona sobre la belleza es el estándar hasta aquel día, aunque no con respecto a la imagen humana, sino a la naturaleza y lo que las manos de la humanidad pueden esculpir.

Su cabeza quiere dejar de dar vueltas sobre el mismo asunto, así que mira el cielo e imagina que se encuentra en una costa de Grecia, mirando el mar divino, y no esperando recibir una mínima noticia de cómo está Ten. Su azul se apagaba poco a poco por culpa suya, así que intenta consolarse con otros mientras el frío de la temporada le grita lo irresponsable que ha sido y que merece el rocío matutino congelando su cuerpo.

Nunca había tenido ese sentimiento, estaba tan consumido en la bruma para darse cuenta de lo estúpido que fue dejar a Ten solo. Eso no es amor. Así que se lo merece, por no saber cuidar de otros, pero Ten no lo merecía, no tenían que haberle hecho eso.

Se muerde los labios, son las cinco de la mañana, no ha dejado de llorar escondido tras un árbol cercano a la casa de Taeyong, si él lo ve, lo culpará y Johnny no tiene excusa alguna para decir que no ha sucedido a causa suya.

—John, deberías ir a casa—Doyoung lo busca entre las ramas, el mayor remueve la sal de su rostro antes de mirarlo.

—¿Cómo está?

—Ya despertó, está un poco confundido, pero se encuentra bien, no es realmente grave.

Johnny asiente intranquilo, Doyoung tiene razón, sí Ten está bien, él no tiene nada que hacer ahí, guarda sus manos en sus bolsillos y tras agradecer con la cabeza, camina lejos.

—Espera, necesito hablar contigo.

No puede dejar de mirar el piso, en realidad, no quiere hacer nada de eso, ¿por qué tiene que hablar sobre cómo se siente cuando no ha tenido el tiempo para reflexionarlo consigo mismo? Las cosas se le están saliendo de control y ahora Kim Doyoung lo retiene en su auto esperando que hable o que alguna de sus lágrimas sea delatada por su rostro caliente.

—¿Puedes siquiera decirme qué pasó? Necesito explicarle a mi novio por qué traje a mi mejor amigo drogado a su casa a las cuatro de la mañana.

El menor enciende el aire acondicionado y extiende un pañuelo.

—No lo sé, lo dejé un momento y cuando regresé empezó a actuar mareado y tonto.

—¿A dónde demonios fueron?

Baby Blue—Doyoung coloca una mano sobre su frente y se recarga, esa no parece ser la respuesta que esperaba.

—Johnny, ¿ustedes dos están teniendo algo serio?

El cambio de tema no es su favorito, Doyoung no debería entrometerse, él no hizo nada con respecto a su relación con Taeyong, así que, ¿por qué pregunta?

—No lo creo, quiero decir, Ten no piensa en algo de esa forma, ya sabes, sale con otras personas además mí, es puramente casual...

—No estoy hablando sólo de Ten, Johnny, y créeme que lo conozco suficiente para saber cómo actúa y por qué lo hace, así que, desde tu punto de vista, ¿están intentando salir como una pareja? ¿Es así como tú lo ves?

¿Y qué respondes cuando te preguntan si alguien te interesa? Sobre todo cuando esa persona ha intercedido a tu favor en varias ocasiones, pero resulta que es el mejor amigo de la persona que te gusta quien cuestiona, Johnny no puede responder con un: "creo que me estoy enamorando de él".

Babylon Allure [JOHNTEN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora