until we meet death

25. La noche del diablo.

Londres, Inglaterra.

9:45 PM.

25 de junio de 2021.

— Eres un niño tan inteligente, Estefan . Serás alguien grande

Los recuerdos sonaban como una música lejana en los oídos del periodista mientras avanzaba por los pasillos del hospital . Mantenía una expresión neutral , pasos seguros y confiados. 

Tenia una misión, un objetivo, y no se iba a detener hasta conseguirlo.

—Persigue lo que quieres — recordó la voz de su padre.

¿Cuál sería su excusa? El había tenido una gran infancia , todo había sido normal . Sus padres siempre lo apoyaron.

La parte más humana de Frank trataba de comprender que había ido mal con él.

—¿¡Que has hecho, Estefan?! — recordó el grito y la expresión asustada de su madre mientras se arrodillaba frente a el y tomaba sus manos manchadas de sangre... La sangre del cachorro que sus padres le habían regalado en navidad.

Siempre había sido el consentido de sus padres . Siempre le habían dado todo aquello que pidiera . Corriendo y cumpliendo sus caprichos cuando el lo quisiera y necesitase . Enseñándole que el mundo debía estar a sus pies , y que si el quería algo era su derecho tenerlo . Incluso cuando comenzó a mostrar signos ... Violentos . Sus padres lo cubrieron , hicieron de todo para no manchar la imagen de su querido hijo. Incluso su padre comenzó a llevarlo de cacería para que pudiera "liberarse" , aún cuando a su padre no le gustaba para nada la idea de tomar un rifle y disparar.

Lo habían ayudado, dirigido y controlado.

Pero ahora sus padres estaban muertos.

—ve a la escuela de medicina, Estefan . Utiliza toda esa fascinación por el cuerpo humano y esa inteligencia para...para algo bueno —  aconsejaron sus padres en algún momento del pasado.

Frank sonrió ante el recuerdo . Había sido una idea estúpida, pero sus padres nunca se rindieron con el.

Desearía haberlos podido amar de la forma que ellos lo amaban a él. Por qué el sabía que lo amaban , pero no entendía y mucho menos compartía el sentimiento.

Claro que acercarlo más a la sangre de las personas no había sido la solución. Pero al menos el podía decir que lo intento. Pero , ¿Cómo había terminado eso?

Sus manos se habían manchado de la sangre de personas inocentes, sus sentidos habían disfrutado de los gritos , y sus manos realizaron todo tipo de torturas.

No se arrepentía de los crímenes que había cometido, ni siquiera por un segundo. Había disfrutado cada una de las torturas . La escuela de medicina si que le había servido después de todo.

Observaba a la gente caminar por el pasillo, pasando junto a él , algunos incluso le sonreían . Nadie sospechaba de el ; ver a un tipo sonriente y tranquilo caminando por el pasillo de un hospital no era nada raro. Creía incluso que el ser una persona atractiva ayudaba a que los demás no se dieran cuenta de los tonos más oscuros en su chaqueta café , resultados de la sangre seca de Alison.

Dentro de su chaqueta de encontraba un arma , el peso constante de esta en su bolsillo le recordaba el por qué estaba aquí . Quería ver al cardiólogo , quería tomarlo consigo.

Y lo iba a hacer.

No importaba el precio.

—¡Oh wow! — exclamó alguien cuando chocó con el — Mierda , lo siento mu... Oh , eres tú.