Final

2.4K 250 23
                                    

Una mirada melancólica reposaba sobre un vaso de ron puro, incluso si no era su bebida alcohólica favorita... le traía recuerdos a los cuales le gustaba aferrarse, en ese momento era todo lo que tenía.

Stella suspiró mientras se cruzaba de brazos y acariciaba la suave tela aterciopelada que la cubría, miró a su derecha el helado paisaje que el noveno anillo le ofrecía. A primera vista era hermoso, pero nada más especial que cosas congeladas e imps abrigados.

Escuchó una corta y suave risa algo burlona en su habitación, desvió la mirada alcanzando a observar a su hermano mirándola con los brazos cruzados y una corta sonrisa pintada en su rostro.

- ¿Qué es tan gracioso?

- Pensar que terminarías así por un simple conde, mínimo un duque. ¿No?

La mirada de la fémina lo siguió hasta que tomó asiento frente a ella, cruzó las piernas y mantuvo la mirada fija en su hermana.

- Esto es tu culpa, Andrealphus.

- ¿Mia? Yo solo cumplí con una parte del trato, su castigo sería decidido por ti, me había parecido lo más justo.

- Sabes que nunca fui capaz de superar mis sentimientos por él. ¿Y aun así lo hiciste?

- Sencillamente creí que serías una adulta que piensa con la cabeza y no se deja llevar por emociones tan inútiles.

Stella guardó silencio mientras bajaba la mirada, permitiendo que el contrario siguiese hablando.

- Estoy profundamente decepcionado de ti, al igual que los demás en la familia. No solo te aferraste a algo tan fantasiosamente inútil como el amor hacia ese conde, también pusiste tu orgullo antes que tu matrimonio.

- ¿Y que debía hacer? ¿Sentarme a mirar como ese malnacido me era infiel y pretender que nada ocurría?

- Sí, Stella, eso esperábamos que hicieras. ¿Olvidas donde estamos? Es el jodido infierno cariño, cosas como la lujuria y la falta de compromiso son el pan de cada día, lo que debiste hacer fue justo eso, ceder y guardar silencio. Desde el momento de tu matrimonio se te advirtió, esto debía funcionar a toda costa.

- Solo nos casamos para tener mínimo un hijo, Octavia ya pasa de los 17.

- No estás entendiendo. Sí, el asunto del hijo era la prioridad, pero aún no entiendes tu posición. Pasaste de ser una princesa a la ex esposa de un príncipe, ni siquiera llegas al título de gran marquesa, ya que eso es mío. Así que dime, ¿qué tienes? Nada, Stella. Tampoco te queda nada de ese "orgullo" que tanto "defendiste" atormentando a Stolas; No me agrada, pero hasta yo conozco mis límites a la hora de tratar con él.

Andrealphus observó como su hermana terminaba por tensar todo su cuerpo, y su cabeza terminaba gacha al mismo tiempo que sus hombros comenzaban a temblar, estaba furiosa.

- Todo por un conde que incluso terminó saliendo con tu exesposo.

- ¿Qué? ¿De qué mierda hablas?

- Hay que ser tonto para no darse cuenta, Stella.

_____________________________________

Han pasado seis años, y con ello han pasado seis cartas.

No lo he superado, lo he intentado y finalmente llegué a la conclusión de que jamás lo haré. Después de la cuarta carta simplemente me rendí.

A pesar de que los llevo conmigo, no es lo mismo apretar un gatillo o sostener una espada a tener el placer de abrazarlos y poder sentir su calor corporal, sus respiraciones y sus hermosas voces al llamarme.

¿Goetia? (Stolas Goetia) (Helluva Boss)Where stories live. Discover now