XDINARY TALES

4. El Chico Nuevo

(Gunil X Junhan)

Gunil acababa de llegar a la empresa, había tenido un vuelvo muy largo desde Estados Unidos, estaba exhausto y fastidiado, para terminar de joder el asunto, el jefe quería comentarle algo importante con respecto a la banda.

¿De verdad no puedo esperar a mañana para hablar? Gunil solamente quería ducharse y dormir. Mientras caminaba emitiendo una pesada aura que alejaba a todos los trainees de su camino, trataba de calmarse y poner la mejor de sus sonrisas. Al estar frente a la puerta de la oficina del jefe suspiró y tocó un par de veces.

—Pase –escuchó desde adentro y abrió la puerta, al ver al hombre hizo una reverencia –. Oh, hola Gunil. Adelante, toma asiento, por favor.

Gunil obedeció y fue a sentarse en el sillón frente al escritorio. El hombre traía puestos unos lentes mientras revisaba unos documentos, pero inmediatamente se los quitó y alzó la barbilla prestándole total atención.

Gunil se revolvió incómodo.

—¿Qué tal el vuelo? ¿Cómo están tus amigos?

—Ellos están bien, el vuelo fue pesado.

—Me imagino, puedo notar tu casancio, pero tranquilo, no tardaré, lo prometo.

—Dijo que era algo importante sobre la banda.

—Si, así es –tomó unos documentos y volvió a hojearlos haciendo una mueca. Gunil se preocupó.

—¿Paso algo malo? ¿Los chicos están bien? ¿Alguien renunció? ¿Se retrasará nuestro debut? –el hombre lo miró y Gunil palideció –Oh no ... Sabía que no debí haberme ido, por mi culpa se retrasó el debut, yo ...

—Oye, tranquilo. No es tu culpa, Gunil. Se retrasó por qué incluiremos a un nuevo miembro.

El pelinegro dejó caer las manos a los costados mierando totalmente perplejo a su jefe.

—¿Qué?

—Así es, el día de mañana lo llevaré a su sala de prácticas para que lo conozcan y lo integren.

Gunil alzó las cejas en una expresión totalmente incrédula.

¿Acaso ese hombre no tenía idea de lo difícil que fue para él hacer que todos los miembros actuales de la banda se llevarán bien unos con otros? ¿No sabía que Kim Jungsu era la persona más callada y pesimista del planeta que sentía que no merecía estar con ellos? ¿O que Hwak JiSeok no sé cayara ni un solo segundo mientras practicaban? ¿O que Jooeyeon era la definición de la curiosos y hostigamiento? ¿O que Oh Seungmin siempre se aislaba en una esquina del salón a la hora de los descansos?

Había sido un año difícil de conocerse, conversar, expresarse. Gunil había tenido que leer libros de autoayuda y coaching para saber cómo romper el hielo en un grupo y que todos se llevarán bien. Aún habían discusiones entre Jungsu y JiSeok, de hecho.

¿Cómo mierda quería que integrarán a un nuevo miembro así de la nada?

—¿Gunil, me estás escuchando? –sacudió la cabeza y parpadeo.

—¿Qué? Ah, lo siento, señor.

El hombre suspiró, se levantó de su asiento y se colocó frente a él.

—Sé que crees que será difícil integraralo pero te puedo asegurar que no tendrás ningun problema con Hyeongjun.

—¿Hyeongjun?

—Si, así se llama. Es guitarrista, audicionó el mes pasado.

—¿El mes pasado? ¿De verdad? Pero entonces ¿Cuando sería el debut?