Hábito

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El tiempo juntas siempre ha sido algo que Jungeun atesora demasiado. Debe ser por tanto que se conocen que siente una compatibilidad extraordinaria con Jinsoul.
Cualquier momento, cualquier situación, se tornaba agradable y cómodo siempre y cuando Jinsoul estuviera a su lado.
Eran un poco más de las dos de la tarde, a ésta hora del día las temperaturas eran de las más altas y aunque el sol no tocaba su piel directamente era cierto que el ambiente se sentía bochornoso.
El camino a sus casas no era tan largo, de vez en cuando demoraban por el tráfico y parecía ser que hoy sería uno de esos momentos en los que tardarían un poco más de lo habitual.
Las dos amigas compartían los auriculares de la menor, escuchaban el repertorio que llevaba descargado en su celular mientras jugaban al ahorcado en un cuaderno.

—¡Oh! —Jinsoul volteó un poco para ver directamente al rostro de Jung —me gusta mucho ésta canción, ¿Cómo se llama? —.

Jungeun sonrío ante la expresión de sorpresa y además le parecía gracioso como es que otros días ya le había hecho la misma pregunta y seguía sin recordar el nombre.

—In My Dreams —desbloqueó la pantalla para mostrarle los detalles —si te gusta tanto ¿por qué sigues olvidando su nombre? —negó levemente aún con una sonrisa dibujada.

—Ya sabes que soy mala recordando, mejor deja de burlarte y escríbelo en mi cuaderno.

Jungeun dejó de lado la partida en la que estaban y escribió el nombre de la canción en un lugar de la hoja que estaban usando. Tuvo mucho cuidado a la hora de escribirlo, quería que su letra fuera bonita, sabía que Jinsoul acostumbraba a guardar notas, dibujos o cualquier cosa que ella garabateara en sus cuadernos.

—Ya está, pero no te vayas a aprovechar de mi bondad, no siempre voy a repetirte las cosas. —.

—Lo tendré en cuenta, no prometo nada. —Le dedicó una sonrisa burlona.

Guardó su cuaderno dando por terminada su entretenimiento, quería dedicarse a escuchar mejor la música y prestar atención a la letra.
Jungeun se quedó viendo por la ventana, dándose cuenta de que pronto llegarían a sus casas. Se concentró tanto en el entorno que no notó cuando la canción había terminado.

—La melodía de la canción me cegó por completo —soltó con sorpresa —no tenía idea de que la letra era algo... triste.

—Ah... sí, la realidad es que es un poco melancólica —giró para dirigirse mejor a su mayor —pero sigue siendo una muy buena canción.

—Tú y tus canciones deprimentes, ¿será que sufres por amor y no me lo has contado? —Una vez más trató de molestarla, recargando su peso en su hombro para poco a poco empujarla.
Jungeun se avergonzó por la pregunta que le hizo. Automáticamente se encogió en su lugar bajando la mirada a sus rodillas. Su cara no pudo contenerse en reflejar la ligera incomodidad que sintió por el hecho de no saber cómo responderle. Pequeños sonidos de queja salían mientras la mayor seguía apoyándose.
Se limitó a solo mirarla de forma tímida, evitando por completo ver directamente a sus ojos.
—Que escuche música con éste tipo de letra... no significa que esté en esa situación —mantuvo la mirada apartada. Sus orejas tenían un ligero color rosa.
Jinsoul no le tomó importancia, definitivamente tenía que ser el calor de la ciudad.
—Solo bromeaba. —Sonrió ampliamente haciendo que incluso sus ojos terminaran curveados dándole a Jungeun una expresión muy adorable y reconfortante.
La menor se sintió aliviada, tenía el presentimiento de que pudo haber sufrido algún tipo de interrogatorio, aunque siendo sincera, parecía que la pelinegra se estaba conteniendo en hacerlo.
—De todos modos, si yo estuviera sufriendo ten por seguro que lo sabrías, te pediría mimos y no me alejaría de tu lado. —Con su mano derecha comenzó a dar algunas palmadas ligeras sobre la pierna de Jinsoul. Ambas rieron un poco y la mayor comenzó a forcejear en forma de juego para evitar que siguiera haciéndolo.
—¿En verdad lo sabría? —dijo entre risas, las cuales fueron disminuyendo poco a poco —¿Aún me contarías sobre tus problemas? Creo que llevas un tiempo siendo más fría de lo normal, probablemente ya me estás ocultando cosas. —.
—Si vas a estar quejándote de mí entonces no me hables más —se apartó por completo y cruzó los brazos sobre su pecho —nunca podría ocultarte nada, eres mi mejor amiga, deja de cuestionarlo. —Cerró sus ojos y tomaba aire por el esfuerzo que estuvo haciendo segundos antes mientras jugaban.
Jinsoul se preocupó bastante, parecía que ahora sí había acabado con la paciencia de la menor. Quería expresar lo que estaba sintiendo, pero tal vez no era la mejor forma de hacerlo.
Se quedaron en silencio unos segundos que parecieron eternos para las dos. No tenían ni idea de cómo iniciar de nuevo.
Junegun comenzaba a sentirse tonta por haberse comportado así, sus impulsos salieron a flote y no los pudo contener correctamente. Estaba tan concentrada en que sus sentimientos no fueran cuestionados y finalmente descubiertos.

𝐀𝐥𝐛𝐚 •𝒍𝒊𝒑𝒔𝒐𝒖𝒍•Where stories live. Discover now