A través de la Melodía (Wenclair)

8| Salida 3D

Enid Sinclair POV

Joder olvidé configurar la alarma para que no suene hoy, me acaba de despertar un sábado a las 6:30 a.m. ya se arruinó mi mañana, porque una vez me despierto, se me hace difícil volver a dormirme.

Me levanto de la cama y observo la foto que siempre veo al despertarme en las mañanas, mis padres. Cada que la miro se me aguan los ojos, a veces termino llorando, pero ahora no quiero llorar. Veo mi piano a un lado y me entran ganas de tocar, pero mi tía está en casa y temo que me escuche.

-Tengo que vencer esto algún día, tengo que avanzar, sanar y empezar a reconstruirme nuevamente-. Me digo a mi misma y me siento en mi pequeño asiento dispuesta a tocar.

(En multimedia les deje el vídeo de la melodía)

Acaricio las teclas suavemente y pienso en mis padres, tengo una canción en mente, Lovely de Billie Eilish y Khalid. Empiezo a tocar la melodía de esa canción y pienso nuevamente en mis padres, en lo mucho que los extraño, en todos los momentos que pasamos juntos, cuando mi papá me enseñó a tocar piano y les tocaba a él y mi mamá, cuando mamá me regalo en mi cumpleaños número 8 este hermoso piano, muchos momentos de mi infancia cobran vida mientras toco esta hermosa melodía de la canción Lovely.

Escucho unos pasos subiendo por las escaleras, y me tenso un poco pero luego sigo tocando, sé que mi tía esta parada en la puerta de mi habitación escuchándome tocar, creo que está en un debate interno de si entrar o no.

-Entra-. Le digo firme pero nerviosa a la vez, tengo que dar el primer paso para poder vencer mi miedo.

La veo entrar lentamente, luego cierra la puerta y se queda parada mirándome con los ojos aguados, cierro los ojos y me concentro en lo que estoy tocando. Una vez término la vuelvo a mirar y esta me dedica una sonrisa.

-Eso fue realmente hermoso-. Me dice ella con las lágrimas cayendo por sus mejillas.

-Estoy orgullosa de ti Enid, lo estas logrando de a poco mi niña, sé que vas a vencer-. Me dice ella abrazándome y yo correspondo su abrazo empezando a llorar.

-Gracias tía, gracias por siempre estar, por nunca dejarme sola, por ayudarme a levantarme cuando me he caído, no tienes una idea de lo agradecida que estoy contigo y de lo mucho que te quiero-. Le digo abrazándola fuerte y llorando. Ella ha sido como mi madre para mí después de lo acontecido hace 7 años.

-No tienes que agradecerme nada cariño, eres todo para mí, eres la hija que nunca tuve, la bendición que me mandó Dios-. Me dice ella con una sonrisa.

La verdad es que sí, todos sus hijos son niños y nunca pudo dar a luz una niña, ella tiene 3 hijos.

Peter el mayor de 28 años, Henry el del medio con 18 y Milán el más pequeño de 8 años.
Peter ya está casado y tiene una familia, de vez en cuando viene a visitarnos.

Henry vive con su padre en Boston, viene cuando está de vacaciones y se las pasa aquí, me llevo muy bien con él.

Milán vive con nosotros pero ahora no se encuentra debido a que está en un viaje de su colegio que durará dos semanas, ya tiene una semana que se fue, muy pronto está por venir.

Yo soy hija única y por lo tanto no tengo hermanos, pero mis primos lo son para mí.

-Te quiero-. Le digo a mi tía.

-Yo más mi amor-. Me dice ella.

Cuando nos separamos del abrazo escucho mi móvil sonar, me están llamando, veo la pantalla y veo el nombre de Yoko.

-Hola Yoko-. La saludo.

-Ey Enid, hola ¿Cómo estás?-. La escucho decir.