Capítulo 28

5.6K 617 144
                                    

—Entonces, ¿os lleva y trae todos los días? —preguntó Milo mientras estaban sentados en el patio de la asociación.

Estaba llegando el buen tiempo y era agradable estar allí.

—Sí.

—Y luego se queda a comer con vosotros.

—Sí.

—¿Y te ofrece sus feromonas aún? —pero la pregunta en realidad sobraba, Oker olía a Ivory.

Sonrió, los jueves el tufo en él era bastante notorio.

Olson sonrió, los tres se llevaban realmente bien, era agradable aquel clima relajado y de confidencias.

—Es para protegernos.

—De mí —sonrió más grande Olson.

—Supongo, de cualquiera.

Milo solo asintió y dejó su mirada vagar por los niños que correteaban por allí.

—Zec ya ni siquiera viene a cenar.

Olson y Oker se miraron, era claro que la relación de Milo no era buena, ya lo había percibido en el poco tiempo que había visto a ambos juntos, pero el omega había comenzado a abrirse.

—No sé qué voy a hacer.

—Puedes hablar con Elsa —le aconsejó Olson, Elsa era la beta que los asesoraba legalmente—. No es común separarse entre alfas y omegas, pero no serías el primero.

Los ojos de Milo se licuaron, una separación entre alfas y omegas era una deshorna, el omega quedaría casi a la altura de un omega usado.

—Me gustaría ser lo suficiente para él.

Y aquello dejó a Oker y a Olson con el corazón estrujado. Milo era un omega magnífico, no se merecía aquello.

—Si quieres Thar y yo podemos hacerle una visita —dijo gruñendo Olson, sería de los alfas más dulces que jamás Oker hubiera conocido, pero era un alfa y el mensaje implícito tras esas palabras era violento.

Pero aquello hizo sonreír a Milo, que acarició la mano enorme de su amigo.

—¿Es que quieres ponerme celoso? —escucharon una voz jocosa a su lado.

Buddy sonreía a Milo, y este bufó, Oker sonrió, aquella asociación realmente había sido buena para él, pero se alegraba de que Milo también hubiera encontrado un lugar donde pudiera ser él mismo, y bufarle a Buddy y su eterno coqueteo era ya algo común.

Realmente no llegaba a entender del todo aquella dinámica, al principio creyó que de verdad a Buddy le interesaba Milo, pero luego vio, que era algo bastante común en Buddy esos comentarios y comportamientos.

Era cierto, que no era con todos, con Oker solo era amistoso, pero que obtenía placer en provocar a Milo era una realidad.

—Vamos, ¿han vuelto a descontrolarse? —preguntó Milo levantándose.

—Son insoportables, necesito al encantador de adolescentes. —Todos sonrieron, Milo se ocupaba de un grupo de alfas adolescentes. Eran los hijos de algunos miembros, y a veces se ponían difíciles.

Pero la mano de los otros alfas, solo servía para reducirlos físicamente. Sin embargo, Milo, conseguía mucho más hablando con ellos.

Lo habían adoptado como unos patitos y se calmaban con el omega.

El brazo alrededor de la cintura de Milo, les daba una sensación de cercanía a ambos peculiar.

—¿Tú crees...? —preguntó Oker, pero Olson contestó antes.

OmegaWhere stories live. Discover now