4

1.2K 52 15
                                    

Después de esa frase en francés que me dijo Charles, nos quedamos mirando fijamente.

Siendo sincera no había entendido lo que me había dicho, porque aún no sé demasiado de su idioma, pero por la forma en la que lo dijo, el brillo de sus ojos y cómo me tomó la mano después de ello, creo que fue algo bonito.

-Vamos con el resto. -dijo levantándose aún tomado de mi mano.

Nos llevó a los dos otra vez con el resto. Prácticamente todos estaban sobrios, menos Daniel, quién se encontraba borracho perdido. Ya era tarde y el monegasco no quería que se subiera al coche en ese estado. Nadie quería heridos. Por lo tanto lo dejó quedarse a dormir aquí.

-¡Daniel! -le llamó, el recién nombrado se giró a mirarle- A dormir.

-¿Yaaaa? ¡Si es muuy pronto! -se quejó.

-Sí, sí, como digas. Ahora a dormir. -dijo rodando los ojos.

-Está bieeen.. -Daniel puso los ojos en blanco- ¡Yo me pido con Jessica!

Iba a contestar pero al parecer alguien fué más rápido.

-No. -soltó seriamente Charles.

-¿Por qué no, Charles? -preguntó Daniel- ¿Estás celoso? -vaciló.

Mis mejillas tornaron un color rojo rápidamente. Seguro que en estos momentos parecía un tomate.

-Cállate, estás demasiado borracho. -dijo empujándolo al sofá.

El resto de los chicos ya se habían ido hace rato. Si que eran escurridizos cuando querían, eh.
Supongo que nadie quiere limpiar la casa y ayudar a un borracho. Es entendible.

-Serán idiotas.. -susurró Charles- Esta es la última vez que les invito a esta casa.

¿Cómo que "esta" casa?

¿Acaso tenía otra?

Pues claro imbécil, es millonario.

Ups, cierto. A veces se me olvidaba.

-No es por entrometerme pero, ¿a qué te refieres con "esta casa"?

-Esta es mi casa en Woking, pero pocas veces vengo aquí, sólo de vez en cuando. Yo realmente vivo en Mónaco.

Ahora todo encajaba.

-Mónaco.. -repetí- Siempre he querido ir. Aunque no he tenido la oportunidad. Dicen que es precioso.

-Lo es. Estoy muy orgulloso de haber nacido allí. -sonrió enseñando sus preciosos hoyuelos- Podrías venir.

Un momento, ¿qué?

-¿Cómo? -pregunté entre confundida y impactada.

-Podrías venir a Mónaco. Conmigo. -sonrió tímidamente, definitivamente era la imagen más adorable que mis ojos han presenciado- Claro, si tú quieres.

-¡Obvio que quiero! -dije emocionada- No sabes lo agradecida que estoy por lo que estás haciendo por mi, Charles. -le sonreí.

Él me devolvió la sonrisa y pasó su brazo sobre mis hombros.

-Aunque no quiero aprovecharme de tu amabilidad. Déjame pagar al menos una parte de la estancia. Porfavor. -supliqué.

Él estaba haciendo demasiadas cosas por mí conociéndome de hace tan poco tiempo. Un acto tan amable debía ser correspondido, no quiero ser egoísta. Y menos aún después de todo lo que ha hecho.

-Claramente no. Te estoy invitando porque no quiero que gastes los pocos recursos que tienes ahora mismo en eso, cuando perfectamente puedes estar sin deberme absolutamente nada.

-Charles porfavor.. Déjame buscar trabajo en algún sitio y te pagaré al menos una parte. Sino me sentiré culpable.

El monegasco dudó durante un tiempo considerable pero luego accedió.

-No tengas prisa en conseguir trabajo. -bromeó, yo no pude evitar reír.

Iba a contestarle pero Daniel apareció a mi lado y quitó el brazo de Charles que hasta ahora reposaba en mis hombros.

-Bueno Jessica, vámonos ya. ¡Tengo sueeeñoo! -dijo llevándonos a mi habitación.

-Daniel.. -susurró Charles.

-No te preocupes. Mejor que duerma conmigo, así puedo vigilarlo y evitar que vomite en tu sofá.

No pareció del todo convencido, pero al final terminó asintiendo para después despedirse.

-Buenas noches, ma chère.

-Buenas noches, Charles.

Después de eso, el monegasco desapareció de la sala rumbo a su habitación. Yo ayudé a Daniel a subir las escaleras y lo lleve a la habitación que usaba yo y que esta noche compartiría con él.

No me parecía bien dejarle a Daniel en el sofá, aparte de porque podría mancharlo con vómito porque es realmente incómodo dormir ahí.

-Túmbate, vamos a dormir. -le dije mientras le tapaba con la sábana.

-¿Dormir? -preguntó- Creía que haríamos otra cosa. -dijo desanimado poniendo puchero.

Oh por dios.

-¡Daniel! No seas cochino. Duérmete ya, antes de que me arrepienta haberte dejado quedarte aquí.

Me di media vuelta para poder conciliar el sueño. Y cuando estaba a punto de caer dormida, un brazo me agarró de la cintura y me pegó a él.


----------------------------------------------------

Aquí el esperado capitulo 4 !! Sé que es my corto, pero no os preocupéis porque el siguiente será mucho mejor.

Pronto lo veréis ;)

Cuidaros, os quiero mucho💟

Adióss<3

𝐹𝑒𝑟𝑟𝑎𝑟𝑖'𝑠 𝐺𝑖𝑟𝑙 ➪  ᴄʜᴀʀʟᴇs ʟᴇᴄʟᴇʀᴄ ғɪᴄWhere stories live. Discover now